Pontecesures agota 480 raciones de rica lamprea y venera a San Lázaro.

Si hay alguien en la comarca del Ulla-Umia que sabe, y muy bien, vivir la fiesta esos son los cesureños. El ayuntamiento de Pontecesures celebró ayer una jornada repleta de actividades en la que no faltó ni la gastronomía ni el fervor religioso. La Festa da Lamprea y las celebraciones litúrgicas de San Lázaro coparon la agenda de todos aquellos que se acercaron a disfrutar de una jornada en la que el tiempo acompañó.

La amenaza de que había poca lamprea para la cazuela animó a aquellos que no querían perdérsela a visitar la gran carpa con tiempo de sobra para no quedarse sin ella. En poco tiempo se agotaron las 480 raciones que se prepararon y que, debido a la escasez, se vendieron a precios más caros que en ediciones anteriores. Una cuestión que no pareció importarles a los comensales.

Visita institucional
El rico manjar no solo fue degustado por el público de a pie, sino también por las autoridades que no quisieron perderse esta fiesta tan particular. Alcalde, concejales, diputados y también la conselleira do Mar, Rosa Quintana, dieron el pistoletazo de salida a la cita gastronómica que sigue sumando ediciones y, como no, con mucho éxito. Los comensales tuvieron oportunidad de degustar el peculiar pescado en diferente modalidades culinarias, a cada cual más sorprendente. Muchos advertían que para el año repetirán, y se espera que con más cantidad en el plato.

Lugar para la veneración
Además de la fiesta gastronómica en si en torno a la lamprea Pontecesures también disfrutó de la parte más litúrgica de la jornada. Ayer se veneraba a San Lázaro en una romería de las de siempre en la que no faltaron las rosquillas, los churros y las garrapiñadas. Las misas se celebraron a lo largo de todo el día y se prolongaron hasta bien entrada la tarde en una jornada en la que acompañó mucho la buena climatología.

Diario de Arousa

La Festa da Lamprea aspira a ser de interés autonómico

El Concello cesureño iniciará los trámites ante la Xunta.

Veintidós años de historia ofrecen un bagaje y dan un prestigio que bien merece un reconocimiento como el de Festa de Interese Autonómico. Al menos eso es lo que opina el gobierno de Pontecesures que, por boca de su alcalde, anunció que va a iniciar los trámites ante la Xunta para conseguir esta declaración para su Festa da Lamprea. En la edición celebrada ayer, el pez del Ulla volvió a demostrar su poder de convocatoria pues de las cerca de quinientas raciones que se cocinaron para la ocasión no quedó ni una, según informó el primer teniente de alcalde, Ángel Souto Cordo. La lamprea a la bordelesa ha dejado de ser un plato doméstico. «O que notamos este ano é que houbo máis xente de fóra, eu diría un 50 %», lo cual afianza la posición de esta cita gastronómica a la hora de conseguir entrar en el club de las fiestas de interés de Galicia.

La conselleira do Mar, Rosa Quintana, fue testigo ayer de que la lamprea tiene su público, más incluso del que puede satisfacer la pesquería. Los valeiros de Pontecesures se las vieron y desearon este año para conseguir capturas lo que, de forma excepcional, obligó al Concello a comprar ejemplares fuera del municipio para poder aproximarse a las quinientas raciones.

Además de la degustación, en la fiesta no faltaron otros ingredientes como el pregón, a cargo del biólogo Sergio Silva, el acuario de lampreas vivas y la entrega de los premios del concurso Tapealamprea, que ganó casa Chaves. También hubo música y la recepción de autoridades.

La Voz de Galicia

Vidal Seage apela a la implicación de los valeiros para salvar la fiesta de la lamprea.

Sostiene que los pescadores deben contribuir a la promoción de la «dama del Ulla» y les advierte de que es «inviable» pagarles el mismo precio que ponen para los restaurantes.

Juan Manuel Vidal Seage, el alcalde conservador de Pontecesures, hace un balance «altamente positivo» de la Festa da Lamprea do Ulla desarrollada ayer en la zona portuaria. Pero tras las dificultades para encontrar producto suficiente y el alto precio que tuvo que pagar la Administración, aprovecha para hacer un llamamiento a la plena concienciación e implicación del colectivo de pescadores que se dedican a la captura de dicho pez, los valeiros.

Es consciente el regidor de que «resulta vital apostar por el producto local», aunque esta vez fue preciso comprar algunos ejemplares en el Miño.

«Pero el objetivo es la defensa de la ‘dama del Ulla’ -continúa-, de ahí que todo gobierno que pase por este Concello deba ser proactivo en defensa de la fiesta y de nuestra lamprea; pero lógicamente también tienen que serlo los propios valeiros, ya que estamos hablando de un motor económico para todos».

Lo que quiere decir es que «es inviable que este Concello pueda pagar la lamprea al mismo precio que los restaurantes especializados». O dicho de otro modo, los pescadores deben ofrecer un precio asequible, partiendo de la base de que ellos también están muy interesados en que se dé a conocer el producto que extraen del río».

Además, utilizar la lamprea del Ulla y potenciarla año tras año «es la base para conseguir la declaración de Festa de Interés Turístico Autonómico», de ahí que Seage insista tanto en «buscar soluciones de futuro entre pescadores, empresa organizadora y gobernantes», de tal forma que cada una de esas partes aporte «lo que mejor sabe hacer, es decir, la pesca, la organización y la promoción de nuestra lamprea, respectivamente».

Además del público que acudió a la fiesta de la lamprea y se mezcló con el que asistía a la Romería de San Lázaro, por Pontecesures se dejaron ver también representantes de la Diputación y la Xunta -con la conselleira Rosa Quintana a la cabeza-, además de alcaldes como los de Padrón, Rois, Dodro y Valga.

«Somos tres cocineras y cada una la prepara a su manera, hay algún ingrediente distinto».

Carmen Batalla tiene dominada a la lamprea. Desde su venta, su limpieza y posterior transformación en un plato en el que no existen las medias tintas. Su pesca tampoco es un misterio para ella: tanto su marido como su hija continúan con una labor a la que se dedicaron tanto sus abuelos como sus suegros. Fueron estos últimos quiénes le enseñaron a esta pescantina cesureña a preparar el plato que hoy cocinará en la Festa da Lamprea.

-No es una novata en esto de cocinar lamprea

-Cierto. Son muchos años ya. LLevo participando en la Festa da Lamprea 16 años o más. Ya ni me acuerdo. Preparándola para casa son más, unos 35 años aproximadamente, es un plato que nos gusta mucho.

-Es un pescado para el que no existen términos medios. Encanta o ni se quiere probar.

-Si gusta, gusta mucho, pero, en caso contrario, ni se prueba. Es algo que puede verse hasta en mi casa, habituada a la lamprea, donde mi hijo de 24 años no la ha querido comer nunca. No sé si es el color o la forma de culebra pero es cierto que hay a gente que le echa para atrás. No lo entiendo, el congrio también tiene esa forma pero, sin embargo, se come sin reparo.

-Se encarga de todo el proceso, ¿cuál es la parte más complicada?

-Lo más difícil es limpiarla. Es necesario hacerlo en agua caliente y quitándole todo el limo. Una vez limpia la parte de fuera, hay que abrirla en la propia cazuela en la que se va a cocinar para recoger la sangre.

-Desde esta limpieza hasta que se sirve en el plato, ¿cuánto tiempo puede pasar?

-Con agilidad, una hora y media de preparación.

-¿Qué le anima a repetir tantos años como cocinera de la fiesta?

-Me gusta que haya fiesta en el pueblo y poder colaborar. Cada año hay más gente y, aunque acabas más cansada, es mucho más entretenido habiendo ajetreo.

-Son tres cocineras, ¿también tres sabores distintos?

-Si, si. La hacemos de forma distinta. No todas trabajamos igual, cada una le echa ingredientes diferentes, y eso termina percibiéndose en el sabor.

-¿En qué se diferencia la suya?

-Los ingredientes diferenciadores son secretos (risas). Pero es probarla y saber cuál es la mía sin ninguna dificultad.

-¿Compiten, aunque sea de broma, para ver cuál gusta más a los asistentes a la fiesta?

-Hay un tono de cachondeo, jugamos como niños. Si una es la primera en acabarla, les dice a las demás que ha sido la mejor. Siempre de broma, no hay una competición.

-La prepararán a la bordelesa, ¿hay alguna otra forma en la que le guste tanto?

-Me encanta de todas las formas. Ya sea en empanada, guisada o a la brasa.

La Voz de Galicia

Pontecesures sirve hoy 450 raciones de lamprea en una edición marcada por la escasez.

Alrededor de 450 raciones se servirán hoy en la Festa da Lamprea de Pontecesures. La escasez de este pescado en el río Ulla provocó que el gobierno local tuviera que recurrir a capturas del Miño. Aproximadamente el 30 % de las lampreas serán, así, traídas de fuera. «La idea era que todas las lampreas procediesen del Ulla pero, lamentablemente, resultó imposible que fuese así. Sabíamos que llegar a las 600 tapas de otros años estaba complicado pero habíamos puesto el tope en las 450. Debido a la proyección de la fiesta no podíamos celebrarla con menos, se trata de un año excepcional», señala el concejal Ángel Souto sobre la compra de piezas de otra procedencia. El comienzo de la campaña ya adelantó que podría tratarse de un mal año, al no pescarse ni una lamprea, pero los valeiros tenían la esperanza de que la situación cambiase con la llegada del mes de marzo.

Tres cocineras

De la elaboración de las 450 tapas que está previsto que se degusten hoy, en la carpa instalada en la zona portuaria, se encargarán tres cocineras. Cada una de ellas contará con, al menos, una ayudante para preparar las raciones de lamprea a la bordelesa, que se venderán a doce euros, dos euros más caras que el año pasado a causa de la escasez.

La jornada gastronómica arrancará a las 13.30 horas y estará amenizada por Tina, A Perla de Arousa. Pero, horas antes ya habrá animación: la charanga Strade??s Band, de A Estrada, recorrerá las calles cesureñas desde las 11.00 horas, haciendo paradas en los establecimientos hosteleros para avivar la celebración. Una hora después, a las 12.00, tendrá lugar la lectura del pregón. Se encargará de ello el biólogo Sergio Silva.

La Voz de Galicia

Vidal Seage rectifica y acepta la compra de lamprea foránea para garantizar la fiesta.

El alcalde de Pontecesures, Juan Manuel Vidal Seage, rectifica su postura inicial y reconoce que finalmente será preciso adquirir lamprea foránea para garantizar la celebración de la fiesta que tendrá lugar mañana en la villa.

El regidor había garantizado que esta XXII Festa da Lamprea do Ulla solo se llevaría a cabo en caso de disponer de materia prima suficiente, y parece que no es así.

La escasez de capturas en la presente campaña obliga a adquirir producto en otros lugares, quizás en el río Miño, «para no perder la oportunidad de desarrollar esta exaltación, para no desaprovechar el trabajo promocional ya realizado y sobre todo para no defraudar a aquellos que puedan venir a nuestra villa para saborear la lamprea y podrían verse obligados a marcharse de vacío en caso de no tener pescado suficiente».

Imposible reunirla toda

Seage reconoce que, «efectivamente, planteamos que solo íbamos a hacer la fiesta si teníamos lamprea del Ulla suficiente, pero va a resultar imposible juntar toda la necesaria y ya son muchas las reservas que ha realizado gente de diferentes partes de Galicia, por lo que nos sabe mal que vengan a probar este producto y tengan que marcharse sin hacerlo; de ahí que accediéramos a adquirir algunas piezas foráneas».

A su juicio «quizás logremos reunir 100 o 150 lampreas del Ulla, pero necesitaremos disponer de 40 o 50 más, aunque sea de otras procedencias, para garantizar el suministro durante la degustación».

Descontento

Esta decisión no ha gustado en el colectivo de pescadores de lamprea con nasa butrón, ya que algunos creen que sería preferible suspender la fiesta o pagarles más por sus capturas, pues así reservarían más ejemplares en lugar de venderlos a sus clientes habituales.

Ajenos al debate sobre la procedencia del producto, ayer los niños de Pontecesures pudieron ver de cerca cómo se pesca y lo escurridizo que puede resultar este pez cartilaginoso que ya pescaban los romanos, río arriba, en las tradicionales pesqueiras.

Pudieron tocarla

Lo que hicieron los alumnos y profesores del CPI Pontecesures fue visitar la zona portuaria para ver in situ a los pescadores que se dedican a la captura de la conocida como «dama del Ulla» desde sus embarcaciones.

De este modo los escolares pudieron tocar los ejemplares extraídos esta misma mañana en el cauce fluvial, familiarizarse con el funcionamiento de los aparejos y charlar con ese colectivo de pescadores al que se conoce como valeiros.

Casa da Lamprea y mercado

Pero eso no es todo, ya que la «excursión» desde el colegio de Infesta hasta el puerto incluía la visita a la recientemente estrenada Casa da Lamprea y al edificio en el que se sitúa a pie de río, el de la plaza de abastos, también reinaugurada hace unas semanas después de un proceso de mejora y modernización.

El alcalde, Juan Manuel Vidal Seage, que acompañó a los alumnos junto a otros miembros de su gobierno tripartito, como Ángel Souto Cordo, explica que esta visita se organizó para que los niños «conozcan un poco mejor este producto tan característico de nuestro pueblo, para seguir potenciando la actividad en el río y, en definitiva, para mostrar lo mucho que Pontecesures puede ofrecer».

Faro de Vigo