Pontecesures pone en valor la cultura del municipio a través de la lamprea en una productiva jornada.

Pontecesures pone en valor la cultura del municipio a través de la lamprea en una productiva jornada
El programa contó con varios ponentes relacionados con Cesures.

El Concello de Pontecesures, en colaboración con la asociación Valeira, organizó el pasado sábado la jornada “Anacos da nosa historia” en la que diferentes autores y personalidades ligadas al municipio pusieron en valor la cultura de Cesures a través de la lamprea. Lo hizo además en una fecha muy relevante, coincidiendo con el fin de semana de San Lázaro, en el que habitualmente se organiza la cita gastronómica en exaltación a la lamprea y que este año corre peligro ante la escasez del producto.

Esta jornada cultural contó la presencia de la alcaldesa, Maite Tocino, que inauguró una iniciativa que contó, entre otros, con poeta cesureño Cándido Duro y el escritor Anxo Angueira, interpretaron obras propias contextualizadas a la villa del Ulla. También hizo acto de presencia el guía turístico Juan Segade y el presentador José Manuel García, o la actriz Uxía Ferreiro, que realizó una interpretación en homenaje a la figura de las patifas, vendedoras de pescado ambulantes y que recorrían varios kilómetros diarios a pie entre aldea y aldea.

Maite Tocino alcaldesa de Pontecesures
La alcaldesa cesureña, Maite Tocino, inauguró la jornada

No podían faltar en una cita dedicada a la lamprea los valeiros, que explicaron su trabajo diario en el río, especialmente arduo y complicado este año, en el que el escurridizo y prehistórico pescado se está dejando ver menos en el Ulla. La larga y provechosa jornada se completó con lecturas de autores que hablaron sobre Pontecesures y de su cultura. 

Dairio de Arousa

Pontecesures recorre las rutas olvidadas de «as patifas».

La actividad «Anacos de historia» se desplegó ayer en la villa.

Pontecesures realizó ayer por la tarde un apasionante viaje al pasado de la localidad. «Anacos da historia de Pontecesures co son das caracolas das patifas» era el título de una actividad organizada por el Concello, que permitió a los asistentes descubrir algunos de los secretos de la pesca de la lamprea, compartidos por una familia de valeiros que trabajan en el Ulla. La cita sirvió también para escuchar en la voz de sus autores, Cándido Duro y Anxo Angueira, algunos fragmentos de obras literarias sobre la localidad. Y abrió las puertas, además, a recorrer los caminos que, hasta no hace tanto, recorrían a pie, con las patelas —grandes cestas cuadradas— sobre la cabeza, «as patifas», pescantinas que recorrían la comarca vendiendo pescado.

Se calcula que en Pontecesures, durante la posguerra, hubo hasta medio centenar de patifas. Eran mujeres que se levantaban de madrugada y caminaban decenas de kilómetros cada día para vender su mercancía o cambiarla por lo que en las aldeas les pudiesen dar. La historia de estas mujeres se volvió ayer presente gracias a la actriz Uxía Ferreiro, que se metió en la piel de una de ellas. Pero, sobre todo, gracias a la proyección de un vídeo en el que varias de aquellas bravas mujeres compartían sus recuerdos. Picafolla, Casadiña, Maquena, Tinguitanga y A Pastora aparecían en la pantalla recordando cómo se levantaban en plena noche para ir a comprar el pescado a Rianxo, o para esperar a que este llegase en un coche, desde Marín o Malpica, hasta Pontecesures. Recordaban también las horas que pasaban caminando por las corredoiras para llegar a las aldeas para vender su carga: «Máis de trinta quilómetros todos os días e as veces traías unhas pesetas e a veces non traías nada». Llevaban la patela llena de pescado y volvían con ella cargada de maíz, o pan, o leche. Porque cuando no había dinero, el trueque ayudaba a matar el hambre y la pobreza.

La Voz de Galicia

Pontecesures aplaza su Festa da Lamprea: no hay capturas para alimentar el certamen.

El Concello confía en que a mediados de abril se puedan celebrar las jornadas gastronómicas; estesábado se celebrará una jornada sobre la cultura y las tradiciones articuladas alrededor de esta pesquería

No hay una razón reconocida oficialmente que lo explique —¿será cosa del cambio climático, de la contaminación de los ríos, de las condiciones atmosféricas?— pero desde hace unos años, las capturas de lamprea no paran de reducirse en el Ulla. Ni los valeiros logran hacer caer en sus redes ese pez, ni en las pesqueiras de Padrón cogen tantos ejemplares como solían. Este año, la situación es tal que desde el Concello de Pontecesures, donde celebran cada año una fiesta de exaltación de esa antigua especie, no dudan en calificarla de nefasta». «A día de hoxe non hai capturas suficientes para celebrar a festa no día de San Lázaro [como marca la tradición], polo que o goberno está á expectativa dunha mellora do número de presas para trasladar a cita gastronómica ao 13 e 14 de abril, coincidindo coa última fin de semana da tempada».

Habrá que ver si para entonces la situación mejora y si hay reservas de lamprea suficientes para hacer la fiesta «en toda a súa dimensión» o, por lo menos, «de maneira reducida só co TapeaLamprea, servindo petiscos nos locais da hostalaría do municipio, unha alternativa que require menos exemplares e que a restauración vería con bos ollos porque mantería parte da actividade e atraería público» hasta esta localidad.

Esta edición de la fiesta, pues, está supeditada a lo que pase en el río en las próximas semanas. A finales de mes, el Concello volverá a tantear la situación teniendo muy claras cuáles son sus líneas rojas: en la mesa se servirá únicamente producto local, del Ulla. Y es que, hasta el momento, «a única alternativa era adquirir lamprea francesa a prezos prohibitivos, algo que se descartou de maneira rotunda ao non consideralo nin ético nin coherente, xa que esta festa o que pretende é poñer en valor un produto local, que repercute na nosa economía e que ten a súa tradición».

Dentro de unas semanas, el Concello volverá a analizar la situación y tomará «de maneira meditada unha decisión sobre a festa da dama do Ulla, que xa tivo que ser suspendida estes últimos anos en varias ocasións tanto pola escaseza como pola covid».

Recuperando la memoria de las «patifas»

Puede que el apartado gastronómico de la Festa da Lamprea esté en el aire este año. Pero alrededor de ese antiguo animal se ha generado, en Pontecesures, una rica tradición, una cultura particular que «nos identifica e nos une como pobo». Mantener esa riqueza es algo que no depende de las capturas y por ello, el Concello de Pontecesures ha diseñado para este fin de semana un apetecible menú en el que se servirán interesantes bocados de la historia de la localidad. Una historia que, pese a no remontarse tanto tiempo atrás, se está diluyendo, se está borrando. Este programa, en el que se dará voz a vecinos y vecinas de esta villa situada junto al Ulla, se desarrollará el sábado por la tarde, a partir de las cinco. Tras la inauguración de la jornada, que correrá a cargo de la alcaldesa Maite Tocino, el poeta cesureño Cándido Duro y el escritor Anxo Angueira pondrán voz a sus propias obras, en las que hablan de la villa cesureña. Acto seguido, habrá una suerte de mesa de diálogo en la que el guía de turismo Juan Seage y el presentador José Manuel García ofrecerán a los asistentes sorprendentes y curiosos bocados de la historia de la localidad. Luego, los participantes en la jornada, que tendrá como primer escenario la plaza de abastos, se acercarán al puerto, donde serán representantes de los valeiros quienes se encarguen de hablar de los secretos de su trabajo. Estos profesionales forman parte de la cultura de la lamprea, a la que también pertenecían las «patifas»Minia del Río, encargada del diseño de la actividad, recuerda quienes eran estas mujeres: «eran mulleres que vendían o peixe porta a porta». Hubo una época en la que abundaban en Pontecesures, pero su oficio acabó condenado a la extinción con los nuevos usos y costumbres. Ahora, en Pontecesures quieren reconocer aquel trabajo ambulante y duro y para ello habrá una acción teatralizada a cargo de la actriz Uxía Ferreiro. Para terminar, ascensión hasta el mirador del Pino Manso, con paradas en varios puntos emblemáticos de la localidad.

La Voz de Galicia

Anacos da historia de Pontecesures.

A cultura da lamprea en Pontecesures identificanos e únenos como pobo; ó patrimonio material e inmaterial e tamén ás persoas, mulleres e homes que, co seu traballo diario, crearon ese mundo.
Co propósito de poñelo en valor, este sábado 16 de marzo, organizamos unha actividade coa que falar e compartir, na que participarán persoas de diferentes eidos unidos por Pontecesures.

Para abir a tarde, o poeta cesureño Cándido Duro e o escritor Anxo Angueira, interpretarán obras súas contextualizadas na nosa vila. O guía de turismo Juan Segade e o presentador José Manuel García, ampliarán os «anacos da nosa historia».A actriz Uxía Ferreiro realizará unha interpretación en homenaxe á figura das patifas.

Os valeiros farán unha achega ó seu traballo diario no río e, se o tempo o permite, faremos un pequeno percorrido ata o Pino Manso no que faremos un repaso á historia da nosa vila.

Membros da AACC Valeira e a bibliotecaria de Pontecesures, Teresa Gil , levarán a cabo lecturas de autores que falaron da nosa vila. Agardámoste o sábado 16 de marzo ás 17:00 horas na Praza de Abastos para falar e compartir contos e historias sobra a lamprea e Pontecesures.

Concello de Pontecesures

Polémica en Valga por la configuración del jurado del Premio Xesús Ferro Couselo.

Polémica en Valga por la configuración del jurado del Premio Xesús Ferro Couselo
Imagen de archivo de una sesión plenaria.

La sesión plenaria de este miércoles estuvo marcada, indubitablemente por la cercanía del Día Internacional de la Mujer con la aprobación del quinto Plan de Igualdade, aunque también con el nombramiento del jurado del Premio de Investigación Xesús Ferro Couselo, que cumple este año su vigésimo quinta edición. Xulio Rodríguez González, facultativo del Cuerpo Superior de Museos; Pegerto Saavedra Fernández, Catedrático de Historia Moderna de la Universidad de Santiago; Marcial Gondar Portasany, Catedrático de Antropología de la Facultad de Filosofía y de Ciencias de la Educación de la USC; y Pablo Sánchez Ferro, director del archivo histórico provincial de Ourense y nieto del homenajeado.

Desde la oposición reprocharon al ejecutivo que no se incluya a ninguna mujer en la ecuación, una actitud “machista que o goberno reitera ano tras ano”, criticó la portavoz socialista, María Ferreirós, que solicitó fijar un mínimo de 50 % de mujeres. Desde el Bloque, Miguel Lois se pronunció en los mismos términos y pidió una “reformulación das bases”: “a calidade dunha investigación non se delimita ao número de páxinas”, sentenció.

Por su parte, el alcalde, José María Bello Maneiro, defendió la propuesta del ejecutivo por “excelente” el currículum de los seleccionados, así como por tradición, ya que “son os mesmos que o viñan facendo habitualmente”. Una explicación que no convenció a la oposición, que votó en conjunto en contra de la propuesta de la Alcaldía y que aprovechó la ocasión para ironizar sobre la aprobación del plan de igualdad con respecto a la elección del jurado.

Diario de Arousa

A artista tardía da navalla e a forquiña.

Con máis de 50 anos de idade esta veciña de Pontecesures descubriu o seu talento innato para crear fermosas e realistas figuras de cerámica. En pouco tempo foi quen de dar vida a impresionantes recreacións de persoeiros, xente do cotiá e dun Belén de Nadal que chegou a estar exposto no Museo Provincial de Pontevedra

Foi a partires da década dos 60 cando María Magariños, coñecida como "A Cuca", comezou a deseñar unhas pezas moi delicadas, que aínda hoxe conservan os seus familiares. ARQUIVO PERSOAL FAMILIA VIEITES MAGARIÑOS
Foi a partires da década dos 60 cando María Magariños, coñecida como «A Cuca», comezou a deseñar unhas pezas moi delicadas, que aínda hoxe conservan os seus familiares.

No pleno ordinario de xaneiro, a Corporación de Pontecesures acordaba render homenaxe a unha das grandes persoeiras de Pontecesures no pasado século. O vindeiro día 9, un tramo da Subida do Requeixo pasará a levar o nome de María Magariños Figueira. «A Cuca», como era coñecida, foi unha artista naif, autodidacta e improbable, porque nin ela mesma foi consciente do seu don ata superar os 50 anos de idade.

Filla de Ramón Magariños e María Figueira, María naceu o 10 de agosto de 1910. Costureira de oficio, non sería ata xa entrada a década dos 60 cando comezaría a dar vida ao seu legado infinito: a creación de figuras de barro sen cocer. Facendo uso dunha forquiña para o cabelo e dunha pequena navalla de man, o que comezou como un pasatempo acabaría por confirmarse como un brote artístico sen precedentes. En apenas uns meses creou un espectacular Belén de Nadal, que chegou a ser exposto no Museo Provincial de Pontevedra a principios dos 70. As primeiras recreacións de temática relixiosa deron paso a reproducións de persoas do cotiá, ata dar vida coas súas mans a réplicas impresionantes de Rosalía de Castro, Carlos Maside ou Félix Rodríguez de la Fuente. Así o recolle José Piñeiro Ares no seu libro Historia de Pontecesures.

A propia «Cuca» contaba a súa experiencia nunha entrevista concedida a Diario de Pontevedra en 1971. Foi nun serán do Día do Pilar cando recolleu restos de barro sobrantes da obra da nova estrada, que utilizou para moldear a súa primeira figura: «un macaco». A partires de aí, viría todo o demais. «Encántame facer isto, as horas pasan moi rápido», declaraba na devandita entrevista, na que tamén explica que as figuras do Belén «fíxenas todas nun mes porque non as podía mercar».

Figuras de barro sen cocer feitas por 'A Cuca'. ARQUIVO PERSOAL FAMILIA VIEITES MAGARIÑOS
Figuras de barro sen cocer feitas por ‘A Cuca’.

María Magariños tivo cinco fillos e oito netos e netas. Unha delas, Olga Vieites, explica con orgullo que o prezado tesouro artístico da súa avoa o garda a familia. «Son pezas moi delicadas, porque están feitas sen cocer, pero tanto as do Belén como moitas outras aínda as gardamos», sinala Olga. «Era unha persoa con boa formación para a época. Sempre comentaba que lle tería gustado ser mestra, pero as circunstancias eran as que eran», recoñece a súa neta, en referencia á Galicia da emigración e da dura vida do rural, na que a figura da muller alcanzaba unha importancia que non era recoñecida como tal.

A pesar do interese suscitado, María negouse a sacar rédito económico das súas creacións. «Nunca quixo vender nada e iso que ofertas tivo de sobra», asegura Olga. «Como moito, regalábaas». O polígrafo Fernando Cabeza Quiles, que pasou parte da súa nenez en Cesures, visitou o taller da «Cuca» cando contaba cuns dez anos de idade. Aínda hoxe recoñece a sorpresa que se levou ao ver as figuras. «Estaban feitas con verdadeira mestría», recorda. Sobre a súa autora, fala dunha muller «amable, humilde, loitadora e indomábel».

A proposta de dar o seu nome ao tramo da Subida do Requeixo no que se atopa a súa casa forma parte dos actos organizados polo Concello co gallo do Día da Muller. O Goberno local cesureño sinala que o feito de chamar a este espazo Rúa María Magariños Figueira recoñece «o talento e a creatividade dunha muller que deixou unha fonda pegada e un legado artístico cun valor incalculable para Pontecesures».

«A Cuca» finou en 1995, aos 84 anos. Nembargantes, preto de tres décadas despois do seu pasamento, o seu legado e o seu recordo continúan máis vivos ca nunca no seu Pontecesures natal.

Diario de Pontevedra