El feísmo de Padrón lastima los ojos.

Además de varios edificios inacabados desde hace años, un recorrido por la carretera N-550 muestra varios inmuebles en ruina en algún caso y muy deteriorados en muchos otros.

Padrón se presta para una segunda entrega de información sobre feísmo urbanístico, tras una primera dedicada a edificios empezados a construir hace años pero que nunca se acabaron, como sucede en A Ponte, Extramundi o en pleno casco urbano. Frente a obras inacabadas, están los edificios de todo tipo que quedaron en desuso y se deterioran con el paso de los años, alguno incluso en riesgo de acabar en ruina.

Para este segundo recorrido por el feísmo padronés hay que tomar como referencia la carretera N-550, que cruza el concello y que es su escaparate para lo bueno y lo malo. Así, la primera parada está en A Ponte, puerta de entrada a Padrón por la provincia de Pontevedra, donde se levanta una casa de más de cien años que, precisamente por su antigüedad, se salvó de la demolición que afectó en su día a otros inmuebles para las obras de urbanización de la travesía. A la vista de su estado, más de uno se pregunta «¿para qué deixaron iso a pe?»

Desde el Concello, el edil de Urbanismo José Ramón Pardo confirma que se le requirió a la titular para que tome medidas en la casa, en cuyo interior ya crece la maleza. La siguiente parada es en el centro de la villa donde un antiguo hostal y restaurante, sin actividad hace muchos años, se deteriora al lado de casas y edificios habitados. Uno de sus propietarios confirma que la intención es edificar en el terreno, en el que por cierto aparecieron restos arqueológicos en la zona del aparcadero, cuando el sector de la vivienda se recupere un poco.

Parada de caballos

Fuera del casco urbano, en la zona de Muíños, en A Escravitude, se levanta un inmueble que fue una conocida casa de citas pero que está sin uso desde hace unos quince años, según recuerdan algunos vecinos. Su deterioro es evidente, sobre todo porque, según cuentan, ya sufrió más de un robo en el que se llevaron hasta las ventanas. A ello hay que sumar las llamativas pintadas que tiene en la fachada. Aún así, su titular le renovó el tejado hace alrededor de un año, según dicen algunos vecinos y confirman desde el Concello.

Además, parece que el sótano del edificio se usa aún para guardar animales, como ovejas, aunque en su día fue parada anual de los caballos sementales del Ejército en León, para realizar cubriciones de yeguas de toda la comarca.

El último punto de este recorrido es a poco metros de la antigua casa de citas y se trata de un edificio en desuso desde hace años, que fue el taller inicial de construcción de ataúdes, además de vivienda de los titulares del negocio. No es el que peor estado presenta pero se aprecia su deterioro en la fachada y en las ventanas. Siguiendo la vía N-550 en dirección Santiago, están las casas en ruina de A Escravitude, que deslucen un lugar que en su día debió destacar por la grandeza de sus construcciones de piedra.

Y si tomamos como referencia la carretera N-550, buena parte de los edificios sin acabar, deteriorados y en ruina son vistos por los miles de conductores que usan esta carretera a diario, pero también por un elevado número de peregrinos que recorren la última etapa del Camiño Portugués.Andamios en las últimas semanas en pisos más recientes del casco

Los peregrinos son testigos también de la ruina que hay en el casco histórico de Padrón que, pese a pequeños avances, no acaba de sacudirse la imagen de decadencia. Mientras imponentes casas de piedra se deterioran e incluso arruinan en la zona vieja y en otros puntos del municipio, los titulares de inmuebles de construcción más recientes situados en el centro echan mano de ellos, de modo que en estas últimas semanas se puede ver mucho andamio en Padrón. Se trata, según confirma el concejal de Obras y Urbanismo, de trabajos de mejora de fachadas, ventanas, canalones y tejados, aunque también hay alguna obra de rehabilitación integral en marcha, como sucede con un impresionante edificio de la Rúa Longa.

La Voz de Galicia

Comuneros de Padrón convierten un basurero del monte Lapido en mirador.

La Comunidade de Montes Veciñais en Man Común de Lapido, en Padrón, está adecentando en sus terrenos un mirador con vistas al río Ulla y al monte Castro Valente. La entidad, integrada por 75 comuneros de seis aldeas de la parroquia de Carcacía, quiere convertir un espacio que estaba siendo usando de forma no autorizada como basurero en un área de ocio para vecinos y foráneos, una vez que el mirador está ubicado a un margen de la carretera AC-242.

Los trabajos están financiados con una subvención de la Consellería de Medio Ambiente, así como con fondos europeos del programa Feder. Tienen un coste de 12.000 euros y, por ahora, llevan invertidos unos 6.000, en la limpieza y preparación del terreno, incluido el depósito de tierra negra; colocación de bancos y mesas, además de toda una valla perimetral. De esa inversión total, los comuneros tienen que pagar el 21 % de IVA.

Queda pendiente sembrar césped y plantar algunos árboles, como roble autóctono y abedul, e instalar papeleras y un cartel informativo sobre las vistas al río Ulla y al monte Castro Valente, según explican desde la directiva de la comunidad de montes de las aldeas de Cruxeiras, Sobrerrivas, Casal, Lamas, A Igrexa y Xoane, todas ellas en Carcacía.

«Cando empezamos a mover o terreo, todo era lixo», cuenta la presidenta de la entidad, Ana Belén Castro, quien habla de que «é importante que a xente respecte este espazo, sobre todo que non se tire lixo». Incide en ello porque, en plenas obras para el mirador, ya hubo quien dejó basura depositada en el espacio que ocupa y que está situado de lado de una carretera lo que, sin duda, contribuye a que se dé este mala práctica.

La presidenta de los comuneros explica que para la entidad «é un esforzo facer este tipo de actuación», teniendo en cuenta además que no dispone de medios para mantener el área en buenas condiciones. Por ello, la comunidad ya contactó con el Concello de Padrón para que colabore en este sentido y se ocupe, por ejemplo, de vaciar las papeleras. Incluso se plantean instalar un contenedor de basura, para todos los restos que puedan quedar para quien decida comer o merendar en el espacio.

Por otra parte, la entidad está con los trabajos de limpieza de una franja de seguridad en el entorno de las aldeas y con la recuperación de otros espacios de monte ya que, como explica la presidenta, «hai que aproveitar o que hai». En esta línea, otro de sus proyectos futuros es adecentar un camino que, desde el mirador, baja hasta el río Ulla, para recuperar y poner en valor toda una zona de gran belleza natural.

La Voz de Galicia

Empiezan las obras para instalar una pasarela en Iria que evitará a los peatones caminar por la N-550.

Este paso es una vieja reivindicación de los vecinos de la zona, especialmente de los residentes en el edificio de La Azucarera.

Augas de Galicia comenzó días atrás los trabajos de limpieza del regato de Abelendas a su paso por Iria-Flavia, en el municipio de Padrón, al tiempo que el Concello también inició las obras para la instalación de una pasarela peatonal de madera sobre este cauce, con el fin de mejorar la seguridad vial en este punto.

De acuerdo con el alcalde Antonio Fernández, «esa pasarela evitará que os viandantes, moitos deles nenos que fan ese percorrido cada día, teñan que salvar o regato camiñando a carón da estrada nunha zona na que practicamente non hai beiravía». De hecho, la pasarela es una vieja reivindicación de vecinos de la zona, sobre todo del edificio de viviendas situado en la antigua azucarera que, para ir a Padrón a pie, debían pisar la vía N-550, con el consiguiente peligro. Lo mismo sucede con los escolares que viven en ese edificio y tienen la parada de transporte escolar justo antes de la Fundación Cela.

En este mismo proyecto se incluye, por otra parte, la mejora de la capa de rodadura de un camino en el núcleo de Angueira de Suso, en la parroquia de Cruces, además de los trabajos de pavimentación de la avenida de Pontecesures, con una inversión superior a los 40.000 euros, de acuerdo con datos del Concello. La actuación incluye la reparación de los baches en toda la avenida, la mejora de la capa de rodadura con aglomerado en caliente, la limpieza de cunetas para facilitar el drenaje y la señalización horizontal.

La Voz de Galicia

O Concello de Pontecesures perde unha subvención de 40.000 €

O grupo municipal socialista confirmou no pleno do pasado luns, que o Concello dirixido polo conservador Vidal Seage perdeu unha subvención de casi 40.000 €.

Os socialistas explican que ao abeiro da resolución do 18 de maio de 2017 da Axencia Galega de Desenvolvemento Rural (AGADER), o concello de Pontecesures pideu, e lle foi concedida, unha subvención por un total de 37.628,64 € do Plan de Mellora de Camños municipais 2017-2018, que se destinaron a obras de mellora do camiño Toxa-Carreiras.

A subvención obrigaba a presentar a xustificación e execución da inversión o día 1 de setembro de 2018, circunstancia que non se cumpleu, polo que o propio alcalde renunciou a subvención o día 10 de setembro.

A perda desta subvención é un exemplo máis da pasividade e mala xestión do alcalde e do seu equipo de goberno , que leva ao Concello a ter que afrontar con fondos propios as obras realizadas, nun exemplo máis de ineficacia.

A inoperancia e irresponsabilidade do alcalde e do seu equipo de goberno ainda é maior, xa que para afrontar o pago vanse empregar 20.000 € dunha baixa dunha obra do Plan Concellos da Deputación, que ben se poderían invertir noutros lugares da nosa vila.

Las calles de Pontecesures reciben una nueva capa de asfalto.

Con mayor o menor grado de acierto, ya que en algunos casos se han escuchado críticas vecinales por el resultado final de las obras -la Rúa dos Namorados es un ejemplo-, en los últimos días se procede al reasfaltado de diferentes calles de la localidad pontecesureña.

A estas mejoras hay que añadir la ejecución de otras recientemente adjudicadas.

Faro de Vigo

Comienza la reparación del azud del canal del río Sar, en Padrón.

El organismo Augas de Galicia, dependiente de la Consellería de Medio Ambiente, inició las obras de reparación de daños en el azud del canal de derivación del río Sar, situado en Iria, en el municipio de Padrón. Se trata del azud que regula la derivación de caudal de agua hacia el canal de by-pass para crecidas, previo al paso del río Sar por el núcleo urbano de la villa, en un tramo definido como Área de Riesgo Potencial Significativo de Inundación.

La vía paralela al canal permanecerá cerrada unas tres semanas por esos trabajos. La actuación proyectada tiene un presupuesto de 60.391,58 euros y un plazo de ejecución de un mes, según explica el alcalde de Padrón, Antonio Fernández. La obra tiene por objeto la impermeabilización y sellado de las fisuras existentes en el azud, para evitar el desvío de caudal desde el propio río hacia el canal artificial fuera de las condiciones de crecida para las que fue diseñado. Según información de la consellería facilitada por el Concello, la pérdida de caudal por las grietas del azud es relevante en época de estiaje, con consecuencias negativas para el ecosistema fluvial, situado en un espacio de gran valor ecológico, perteneciente a la Red Gallega de Espacios Protegidos y, en concreto, al Sistema Fluvial Ulla-Deza, incluido en la Red Natura 2000.

Se trata, por tanto, según añaden fuentes del Ayuntamiento, de una obra de protección medioambiental, para mantener los caudales de estiaje naturales asociados al propio río.

El azud del canal rompió en un extremo hace dos años, por lo que Medio Ambiente hizo una intervención de urgencia colocando sacos de arena en los agujeros de la pared que separa el río del canal. Ahora, las obras comenzaron colocando más sacos para evitar que el agua del río vaya para el canal, con la idea de secar este último y poder trabajar.«? unha actuación necesaria, estabamos esperando por ela»

La obra de reparación de daños en el azud del canal era muy esperada por un colectivo, el de pescadores de Padrón. Uno de ellos aseguró ayer que es una actuación «necesaria» porque, desde la rotura de la pared, «marchaba máis auga polo burato para o canal da que ía polo río Sar», de modo que había tramos del mismo que se estaban quedando secos, como por ejemplo a la altura del Paseo del Espolón. «Era necesario que arranxaran esa parede», recalcó un representante de los pescadores de Padrón, para que siempre haya más agua en el río Sar que en el canal de derivación, añadió. Para ello también es necesario, según considera este pescador, que se haga un control anual del azud.

La Voz de Galicia