Tras la aprobación definitiva en pleno, con el apoyo de todos los grupos políticos, de la modificación de la ordenanza del Concello de Padrón que conlleva la peatonalización de todas las calles y plazas del casco histórico, su entrada en vigor se producirá quince días después de la publicación en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) del anuncio correspondiente. De este modo, el cierre al tráfico de las calles y plazas de la zona vieja que aún no lo están podría ser una realidad en torno a la fecha de Reyes.
El pleno extraordinario para la aprobación definitiva de la modificación de la ordenanza de circulación y uso de la vía pública apenas duró unos dos minutos, una vez que el gobierno local y los grupos de la oposición llevaban todo acordado de la comisión informativa celebrada el martes por la mañana. En la misma quedaron desestimadas las seis alegaciones que tanto vecinos como la Asociación de Empresarios de Padrón, Rois y Dodro habían presentado a la modificación, reclamaciones que tenían informes desfavorables de los servicios técnicos de Urbanismo y de los jurídicos del Ayuntamiento. Aún así, tras estudiar las alegaciones, gobierno local y oposición acordaron realizar cambios en el horario establecido para carga y descarga en la zona histórica. En concreto, por las mañanas se amplía media hora, y queda fijado de ocho a once y media de la mañana (antes era hasta las once).
A mayores, gobierno y oposición decidieron establecer un horario de carga y descarga por las tardes, tal y como reclamaban, por ejemplo, desde la Asociación de Empresarios del Sar, además de algunos repartidores. Así, por las tardes, el horario será de tres y media a cinco y media, pero la carga y descarga debe hacerse siempre en la plazuela Camilo José Cela, según la información aportada por el alcalde de Padrón, Antonio Fernández.
Tras la aprobación definitiva de la ordenanza que conlleva la peatonalización, Padrón tiene pendiente ahora una segunda fase para buscar plazas de aparcamiento alternativas o crear una zona azul de estacionamiento, como hay en otras localidades.
La Voz de Galicia