André Oliveira aspira hoy a su primera medalla mundialista.
El cesureño y Yeray Picallo lograron ayer el billete para la regata por el título del C-2 200. Tono Campos firmó el sexto puesto en la final B del C-2 1.000
El cesureño André Oliveira y su compañero de club y selección, Yeray Picallo, volverán a enfilar hoy la pista húngara de Szeged a las 13.40 horas con la vista puesta en el podio del C-2 200 metros del Campeonato del Mundo. La pareja gallega ofreció ayer una de las contadas alegrías recibidas por la afición hispana de su equipo nacional, clasificándose para la regata por el título con el sexto mejor crono de las dos tandas de semifinales. La final A del C-1 4×200, a la que España accedió con el peor registro, es hoy otra baza de podio para Oliveira.
La jornada de ayer arrancaba para el canoísta cesureño a las 9.52 horas, en la primera de las tres series clasificatorias del C-2 200. Los 17 barcos en competición buscaron en sus respectivas regatas el triunfo, única vía directa a la final A. Una mala salida privó a Oliveira y Picallo de cualquier opción. «Con el ruido que la grada hacía para animar a Hungría, que iba en nuestra misma eliminatoria, tuve dificultades para escuchar el pistoletazo», explicaba ayer André. «Tras hacer unos 50 metros algo malos no pudimos enganchar bien con la cabeza de regata y nos venimos un poco abajo, pensando también en la semifinal». El dúo gallego fue quinto -de siete barcos- empleando 39.381. Los lituanos Labuckas y Gadeikis ganaron con 36.747.
En la semifinal (11.38 horas) fue otra cosa. El del Baixo Ulla relata que «fuimos bastante mentalizados para intentar hacerlo mejor, sobre todo en la salida, nuestro fuerte. La regata fue bastante bien. Salimos cuartos y después enganchamos con los de delante llegando casi a liderar la semifinal y manteniendo bien después el segundo puesto, hasta el final, que se nos fueron un poco los húngaros y entramos terceros» en 38.173, con 0,750 segundos sobre el cuarto. Los rumanos Dumitrescu y Mihalachi ganaron la semifinal con 36.829, y los magiares Horváth y Foltán acabaron segundos con 37.231.
En la final de hoy, con ocho barcos europeos y un brasileño, parten como teóricos favoritos los tres ganadores de las series clasificatorias. Los lituanos Labuckas y Gadeikis, los rusos Melantiev y Lipkin, y los germanos Kiraj y Waeschke. André Oliveira apunta que «intentaremos mejorar la salida» y acercarse a su nivel habitual en la maniobra de arranque. «Mejorando eso, y con lo que ya hicimos, creo que podemos estar ahí luchando con todos».
Por su parte, el grovense Tono Campos y José Manuel Sánchez cerraron ayer su participación en el Mundial de Szeged sextos en la final B del C-2 1.000 con un crono de 3.36.810. A 4,008 segundos de los canadienses Russell y Beauchesne-Sevigny, los ganadores, y a 2,046 de la canoa mexicana, quinta en la meta.
LA VOZ DE GALICIA, 21/08/11
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