Morison cambia a Dacosta por Natalia García para intentar ir a los Juegos.

La kayakista cesureña concluye, al menos de momento, su asociación internacional con la barbanzana, con la que logró dos medallas europeas júniores en los dos últimos años.

La elección del C-1 1.000, con semifinales el jueves 5 de mayo y final el día 6, es solo una parte del macro selectivo que durante tres días dilucidará el nombre de los ocupantes de los barcos todavía pendientes de asignación para el Preolímpico Europeo de Duisburgo. Entre ellos, los dos káyaks 500 femeninos.

En ellos aspiran a remar tres palistas arousanas. Camila Aldana Morison, Raquel Dacosta, y Natalia García. Las dos primeras, compañeras del Náutico Pontecesures, dominadoras del káyak juvenil femenino en los tres últimos años, y estrellas emergentes en el panorama continental, con bronce y plata europeas en el K-2 1.000 en el 2014 y 2015, respectivamente. Resultados a los que hace dos años añadían un quinto puesto continental y un séptimo mundial en el olímpico K-2 500.

A por las plazas en en el K-1 y K-2 500 del Preolímpico irá Camila Morison. Solo que para alcanzar su sueño, la cesureña ha decidido cambiar de pareja de baile en el K-2. Apostando por la breoganista Natalia García, con la que recientemente estrenaba pareja haciéndose con el K-2 1.000 para el próximo Europeo Absoluto.

«Creo que es el K-2 que más anda, y que más opciones tiene de ir al Preolímpico. La decisión fue solo mía, después de la Copa 1.000, porque las sensaciones en el barco con Natalia son mejores», explicaba ayer Morison. ¿Se trata de una decisión puntual, o a largo plazo?». Los resultados lo aclararán, dice la cesureña.

La cesureña deja en suspenso su asociación internacional con la barbanzana, sustanciada en dos medallas europeas júniores, pero ambas continuarán remando juntas a nivel nacional con la elástica del Náutico Pontecesures.

La Voz de Galicia

Catoira propone una rebaja del billete de tren para quienes hagan la ruta en drakkar.

El alcalde solicita una tarifa especial con la que atraer más visitantes dispuestos a surcar las aguas del Ulla en barco vikingo -Incluso sugiere aumentar la frecuencia de trenes.

drrakkar

El alcalde del Concello de Catoira, Alberto García García, se ha dirigido a Renfe y al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) para ver la posibilidad de establecer descuentos en los billetes o tarifas especiales para aquellos ciudadanos que decidan viajar al municipio con el propósito de disfrutar de su “Ruta Vikinga en Drakkar”.

Como se explicó en otras ocasiones, desde el recinto fortificado de las Torres do Oeste es posible surcar el río Ulla en un barco de guerra vikingo, siendo ésta una propuesta que gana adeptos poco a poco y de la que suelen disfrutar, sobre todo, los alumnos de diferentes centros de enseñanza.

En estos casos desde el Concello suelen animar a los grupos interesados en navegar en drakkar y conocer la historia de los vikingos y de Catoira a que se desplacen a la localidad haciendo uso del servicio ferroviario, de ahí que el regidor catoirense apele ahora a la colaboración de Renfe, tanto para potenciar el tren de cercanías como la propia ruta turística a bordo del drakkar.

Explica Alberto García que estas singladuras “están teniendo muy buena aceptación y una alta demanda”, de ahí que solicite una reunión con representantes de Adif para “estudiar la posibilidad de conseguir alguna tarifa especial para grupos” e incluso para valorar una modificación de horarios que permita parar en Catoira a algún tren más.

Faro de Vigo

Un viaje a Oriente de la mano de la pequeña Irene.

Mañana. 17.30 horas.Biblioteca de Cordeiro (Auditorio).

Dentro de los actos organizados con motivo del Día del Libro, el Concello de Valga ha requerido la ayuda de Solidaridade Internacional para desarrollar una particular sesión de cuenta cuentos. De la mano de una niña, Irene, los chavales de Valga viajarán a Oriente Próximo a través de la música, los sabores y los olores.

La Voz de Galicia

Activistas por el Sáhara inician una campaña para aumentar las acogidas.

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Solidariedade Galega co Pobo Saharaui planea adelantar el programa Vacaciones en Paz, para sacar al mayor número posible de niños de los campos de refugiados, en el marco de una escalada del conflicto en el Sáhara occidental. Para ello urge la búsqueda de financiación y familias de acogida, así como la concienciación, que impulsarán a través del reparto de 17.000 sobres con dípticos en los centros educativos de toda la comarca, para recaudar donaciones.

«Marruecos solo quiere un pretexto para volver a la vía armada», estas palabras -pronunciadas ayer en una rueda de prensa del colectivo Sogaps, en el ateneo Valle-Inclán de Ribeira- pertenecen a Kudus Salek, miembro de la asociación y antiguo usuario del programa de acogida estival infantil Vacaciones en Paz.

Arropado por Amparo Cerecedo, delegada de Sogaps en Barbanza, y María José Escurís, codelegada en Rianxo y Padrón; este activista originario del Sáhara anunciaba el riesgo de que sea necesario adelantar la actividad por la cual cerca de 300 niños de los campamentos de refugiados argelinos pasan cada año un par de meses en hogares gallegos.

Este peligro de escalada en el conflicto entre el gobierno marroquí y el Frente Polisario responde a la expulsión, a principios del mes de marzo, de 84 miembros de la misión de la ONU para el referéndum del Sáhara Occidental (Minurso), que también se ocupaban de vigilar el cumplimiento del alto el fuego en vigor desde 1991.

Consecuencias directas

A ello se suma la negativa de Rabat a la entrada de observadores internacionales. Los hechos se produjeron tras una visita del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, quien utilizó el término «ocupadas» para referirse a las zonas del Sáhara bajo control marroquí.

Pendientes de la votación del próximo día 30, donde se decide la prórroga de la Minurso, de confirmarse el cese de su actividad supondría «incendiar el conflicto», ya que Salek remarcó que cuentan con documentación gráfica de movimientos de tropas y material bélico, que evoca el fantasma de la destrucción del campamento de Gadaym Izik en 2010.

«Este ano é especialmente urxente e grave a necesidade de financiamento para evitar padecer in situ as consecuencias dunha guerra», alertó Escurís sobre la necesidad de envío de mayor cantidad de ayuda humanitaria.

La Voz de Galicia