Batalla judicial de una periodista para ser reconocida hija de Juan Castaño.

La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Pontevedra abordó ayer el caso de la periodista gallega María José Cruces Lorenzo, actualmente afincada en Madrid, quien dice ser hija biológica del empresario de Cordeiro Juan Castaño, fallecido hace tres años. Una sentencia del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Caldas de Reis avala la tesis de la mujer, pero los tres hijos que el empresario reconoció legalmente recurrieron este fallo ante la Audiencia Provincial.
La principal prueba es un estudio pericial biológico de paternidad realizada mediante la extracción y el estudio del ADN de todos los hijos de Juan Castaño. Esta prueba corrió a cargo del Instituto de Medicina Legal de la Universidad de Santiago de Compostela, según el cual María José Cruces es hija de Juan Castaño con una probabilidad del 99,99 por ciento. La periodista llegó incluso a entrevistarse un par de veces con el empresario valgués antes de que este falleciera en el año 2007. ??Es curioso que él accediera a verla en varias ocasiones pero nunca en su casa, seguramente para ocultar esos contactos a su familia?, dijo la fiscal en réplica a la abogada de la familia Castaño, que se opone a ese reconocimiento de paternidad.

La letrada de los tres hijos reconocidos del empresario cuestiona el valor de la prueba de ADN porque no se contrastó el perfil genético de las dos madres. Un experto aseguró que no hacía ninguna falta, pero la abogada insistió en que los manuales que ella consultó dicen que sí es absolutamente imprescindible para que el resultado sea fiable. Lo que se descartó desde un primer momento se descartó la exhumación del cadáver de Juan Castaño.

María José Cruces Lorenzo, nacida en Pontecesures en el año 1956, sostiene que su madre, Mercedes Cruces, mantuvo una relación con Juan Castaño antes de que éste se casara con la que fue su mujer. Fruto de aquella relación nació la periodista, que tiene entre sus trabajos más conocidos el libro que relata la odisea de la peluquera Ana María Ríos cuando fue retenida en Cancún.

Encuentros > Según parece, el empresario valgués no quiso hacerse cargo de su supuesta hija, que residió en la zona de San Xulián hasta los nueve o diez años. Después se trasladó a Madrid. Años más arde María José Cruces decidió realizar averiguaciones sobre su padre y así, gracias a conversaciones y contactos con algunos familiares, consiguió que Juan Castaño la recibiera a finales del año 2006, aunque sin presentarle a sus otros tres hijos. Tres meses después el empresario falleció y a partir de entonces la periodista intentó ponerse en contacto con sus supuestos hermanos, sin que éstos se mostraran dispuestos. Esto fue lo que movió a María José Cruces a presentar una querella para intentar que se la reconozca como hija biológica de Juan Castaño. El Juzgado de Caldas de Reis ya le dio la razón en octubre del año 2009, pero ahora deberá ser la Audiencia Provincial la que ratifique aquella sentencia, tras el recurso presentado por los tres hijos que Castaño si reconoció en vida.

DIARIO DE AROUSA, 12/11/10

La lamprea.

Estoy seguro que si Benedicto XVI hubiera realizado su visita a Santiago entre enero y marzo y no en este noviembre, en la comida que se le ofreció ayer no hubiera faltado la famosa lamprea, esa especie de serpiente que sube a desovar a las rías y que, según los gastrónomos «no es carne ni pescado». Lo que sí se sabe de la lamprea es que aparece en la comida de las legiones romanas y que los soldados las llevaban en el zurrón, dentro de ollas de barro, cocinadas en su propia sangre. Benedicto XVI sí la habrá visto en los muros del comedor del Palacio Arzobispal, donde los artistas dejaron constancia e su presencia como el más preciado manjar en las mesas de los clérigos, arciprestes y obispos.

Extracto de la columna AZUL & ROSA de Jaime Peñafiel
EL MUNDO, 07/11/10

Requián acoge el lunes la subasta pública de los doce caballos salvajes retenidos.

El precio de salida supera los 4.700 euros y la puja arrancará en la aldea a las once de la mañana

El lugar de Requián, en la parroquia estradense de Frades, acogerá el lunes una nueva subasta pública de ganado mostrenco. La primera teniente de alcalde y edil delegada de Medio Rural, Raquel López, explicó que, aunque el plazo otorgado para que el propietario de los doce caballos retenidos en esta aldea reclamase a los animales (y asumiese los gastos originados por los daños causados y por su manutención) concluyó y la subasta tendría que celebrarse hoy como día inmediatamente posterior, los sábados están excluidos por no estimarse jornada hábil. De este modo, la puja será a las 11.00 horas del lunes en el mismo lugar en el que se encuentran los equinos.
El precio de salida de la subasta será de 4.767 euros, una cantidad que resulta de sumar el valor asignado conjuntamente a los équidos (4.650 euros) y los gastos de sacrificio de un animal herido, valorados en 117 euros. Y es que fueron en total 13 los animales retenidos, todos ellos caballos salvajes carentes de identificación, aunque alguno sí posee alguna marca. A los primeros ejemplares capturados por los vecinos, cansados de acumular daños en fincas y plantaciones, se sumaron los nueve apresados últimamente. Los lugareños aseguraban que todos ellos formaban parte de una misma manada que, según relatan, viene rondado la zona en el último año, irrumpiendo con frecuencia en las propiedades vecinales.

FARO DE VIGO, 16/10/10

O problema de deixar os cans abandoados.

O pasado venres, 8 de outubro, o 112 chamou á Policía Local de Pontecesures, alertando de que un can fora atropelado onde comeza a PO-548 Pontecesures-Vilagarcía (Avda. de Arousa) e estaba ferido na estrada. O animal, un palleiro noviño duns seis meses sen distintivo identificativo algún, foi recollido na casa dunha veciña e non andaba, pois tiña un forte golpe nas patas traseiras e estaba asustado. O sábado, desprazouse o veterinario á vivenda xunto con un axente da Policía Local, o can comezou a recuperarse, e no día de hoxe, 14 de outubro foi trasladado polos servizos municipais á canceira de Vilagarcía, logo de realizarse as xestións oportunas, facéndose cargo o concello do custo do ingreso que ascendeu a 60 euros. Por suposto, dironselle as grazas á veciña que coidou tan ben ao animal nestes días.