Estamos cabreados. Irritados. Enojados. Hastiados. Aburridos. Hartos. Estamos enfadados. Saltamos a la mínima. Malhumorados. Estresados. Amostazados. Somos una bomba de relojería a punto de explotar. Nunca se corrió tanto para nada. Tenemos mejores coches, más carreteras y dos accidentes colapsan en un segundo nuestros sistemas respiratorios y nos dejan atacados, atracados, en el atasco. Nos enfadamos dentro del coche y fuera del coche. Por el móvil. En casa. En la ducha. Nadie tiene tiempo para nadie. Que la gente te preste atención es un milagro. Están en tensión hasta los que pasean y miran las obras. Parecen desocupados, pero tan pronto les quieres decir algo salen corriendo.
Opinión
O cha cha cha do tren.
¿ Quen non perdeu o tren algunha vez? Non tan só as persoas, senón que mesmo algún que outro pobo «perdeu o tren» quedando en «vía morta», mentres outros avanzaban máis co famoso AVE.
Agora tamén por decisión de Fomento e da señora ministra dona Magdalena Álvarez queren deixar os pobos das comarcas do Sar, Baixo Ulla e parte do Salnés sen o servizo dos trens de proximidades, causando a inquietude lóxica entre a cidadanía de «a pé».
Opinión
Cuidar el entorno es tarea de todos.
Ya nos hemos preguntado desde aquí qué suerte de extraño mecanismo funciona en la mente de algunos a la hora de deshacerse de la basura o los viejos enseres, ya que son capaces de encaminarse monte arriba o ribera abajo para tirarlos al pie de cualquier árbol o en la orilla del cauce fluvial más a mano. Lo malo del asunto es que en dicho esfuerzo gastan bastante más energía y tiempo que en deshacerse de ellos por el camino más racional de depositarlo en los sitios habilitados por los gobiernos municipales. A consecuencia de estas actitudes incívicas, los ayuntamientos tienen que hacer repetidos llamamientos a sus habitantes para que se cumplan unas mínimas normas de convivencia que a la larga redundan en el beneficio de todos. Es lo que acaban de hacer los regidores de Padrón y Pontecesures a través de sendos bandos que recuerdan la necesidad del cumplimiento de la normativa que rige en la recogida de basuras o de enseres voluminosos con la finalidad de evitar tanto la imagen nefasta de contenedores de basura rodeados de bolsas, como, también, erradicar los malos olores que estas prácticas acarrean. El cuidado del entorno, la apariencia del inmobiliario urbano son, conviene no olvidarlo, dos importantes baremos para conocer en cualquier momento el grado de civismo de los vecinos que habitan esas localidades. Hay que pedir, pues, que se cumpla. Si no por responsabilidad, al menos que sea por vergüenza.
Columna ESPINAS
Contraportada de TIERRAS DE SANTIAGO, 30/10/07
Opinión
Un tren o metro de cercanías. ¿Para cuándo?
Leía con interés en el pasado ejemplar de TIERRAS DE SANTIAGO la decisión del Ministerio de Fomento de dejar en desuso la línea que comunica Padrón con Vilagarcía y con paradas en sus estaciones intermedias. Es cierto que las administraciones públicas luchan denodadamente por el progreso y la implantación del controvertido AVE (por cierto ¿para cuándo?) pero no lo es menos que en un momento en el que todos echamos mano del carácter positivo de la globalidad de los hinterlands alrededor de las grandes urbes no sólo es necesario un importante despliegue en materia de infraestructuras viales, que ya están a la vista, sino también en vías férreas. A tenor de como están nuestras carreteras, no sería nada descabellado pensar, por ejemplo, que una ciudad como Santiago podría comunicarse con su entorno inmediato por tren, es decir por transporte colectivo y no siempre por el consabido vehículo particular que, por cierto, la mayoría de las veces está ocupado sólo por el conductor. A quién corresponda ¿Es completamente cierto que hay un estudio de viabilidad del ferrocarril de cercanías en Galicia?
Fernando Vázquez (Teo)
Carta al Director de TIERRAS DE SANTIAGO, 30/10/07
Opinión
Movilidad ciudadana, asignatura pendiente.
De un tiempo, largo tiempo, a esta parte, cuantas prospecciones se hacen entre los vecinos del entorno geográfico de Compostela, capital incluida, para conocer aquellos problemas que el ciudadano percibe como más relevantes, en todas ellas aparece entre los primeros puestos de la preocupación social la problemática de la movilización, ya sea para denunciar el permanente caos y saturación de tráfico rodado, bien para lamentar la ausencia de un transporte público acorde con los tiempos actuales o, por no seguir, para rebelarse ante la manifiesta carencia de aparcamientos y el elevado precio de los existentes en la ciudad que es cabecera comarcal. Frente a este repetido y deplorable estado de cosas, desde los ayuntamientos se responde por la vía de las lamentaciones pero no por el de la eficacia en las propuestas; por criminalizar al conductor, pero nunca por experimentar nuevas opciones y proyectos una vez que los vigentes se demuestran caducos e ineficaces. Así, el malhadado transporte comarcal, con seis años a sus espaldas de insultante ineficacia administrativa, aún sigue esperando su plena concreción en empresas, frecuencias y precios. Y otra importante opción, como sería la del aprovechamiento para vía de cercanías de la línea férrea de Osebe a Vilagarcía, que se cerrará tan pronto se inaugure el AVE (que, por cierto, no pasará de velocidad alta en vez de alta velocidad), acaba de ser desestimada por la ínclita Magdalena Álvarez, que ya se sabe qué referencias escatológicas le provocamos los gallegos. Y en esas andamos.
Columna «ESPINAS», Contraportada de TIERRAS DE SANTIAGO 23/10/07
Opinión
Comulgar con un tren que parece del siglo pasado.
La ministra de Fomento y el propio Touriño se llenan la boca cuando hablan de tren de alta velocidad, pero yo creo que no es para estar orgullosos. Los pueblos pequeños también existimos y cada vez nos alejan más de los transportes. No contenta con ello, la ministra descarta habilitar un tren de cercanías que acerque Santiago y Vilagarcía, con las ventajas que ello conlleva para los vecinos de Catoira, Valga, Padrón o Teo. ¡Cómo se nota que los políticos no van en tren! Y cuando lo hacen viajan en vagones de alta velocidad con todas las comodidades por ser vos quien sois. Y así seguimos, con un tren que parece del siglo pasado.
Jesús Vidal (Padrón) Carta al director.
TIERRAS DE SANTIAGO, 23/10/07