Aún sin definir en cuestiones fundamentales, el tijeretazo de un 30% en el número de concejales que el Gobierno central acaba de anunciar para los comicios del 2015 tendrá sustantivas consecuencias en los once concellos que configuran la demarcación de Arousa. Para empezar, un total de 52 actas desaparecerán del mapa de las corporaciones, de forma que de los 152 ediles que fueron elegidos en mayo del año pasado se pasará a solo 100 en la siguiente cita con las urnas locales.
El municipio que pierde un mayor número de representantes es Vilagarcía, que pasará de 21 a 15, dejándose 6 por el camino. Persiste una duda acerca de la escala siguiente, aquellos ayuntamientos que elegían a 17 munícipes, pues para cuadrar las cuentas verían desaparecer a 4 o 6 ediles. Para el cálculo se ha tenido en cuenta el caso extremo, que dejaría en 11 los políticos a elegir en las urnas. Es el caso de demarcaciones como Cambados, O Grove y Vilanova. Las corporaciones que disponen de 15 miembros pasarán únicamente a 9. Y, por último, los concellos arousanos con menor población y 11 ediles en liza, caso de Catoira, A Illa y Pontecesures, tendrán que contentarse con 7 a partir de las elecciones del 2015.
Si la reforma se hubiese aplicado en el 2011, el PP perdería 28 concejales para quedarse en 59, el PSOE se dejaría 13 para redondear 24 ediles y el BNG diría adiós a 7 actas para conservar 15. Porcentualmente, sin embargo, de las tres principales formaciones son los socialistas quienes más sufrirían, con una merma del 35% en su cosecha de concejalías frente al 32% de populares y nacionalistas. Pero sin duda el mayor castigo lo recibiría Esquerda Unida, que perdería dos de sus tres actas para retener solo una, en Vilagarcía.
LA VOZ DE GALICIA, 15/07/12