El concejal independiente lamenta que Pontecesures se quede sin esta celebración – Critica que el ejecutivo se escude en problemas económicos cuando tres de sus miembros cobran del erario público.
Luis Ángel Sabariz Rolán, en representación de la Agrupación Cidadá de Pontecesures (ACP), se pronuncia después de que tanto las churrerías como el gobierno tripartito anunciaran que han roto relaciones y que desaparece la Festa do Churro.
El independiente dice recibir la noticia con tristeza, y acto seguido arremete contra el ejecutivo que forman BNG, Terra Galega y PSOE, pues considera que el equipo capitaneado por el nacionalista Manuel Luis Álvarez Angueira actuó «de forma patética y ridícula».
«Se cerró en banda»
A su juicio, la gestión del tripartito «es realmente lamentable en todo este asunto, pues ante la postura de las artesanas del churro, que este año querían cobrar por su trabajo pero no llegaron a hablar de cifras, el gobierno se cerró en banda y se negó a pagarles cantidad alguna, lo que demuestra que no hay capacidad de diálogo, que se deja todo para el último momento e incluso que se culpa de todo a la oposición».
Por si fuera poco, el portavoz de la ACP argumenta que el tripartito «adopta decisiones contradictorias que no entiende nadie, pues en el primer trimestre del año pidieron una subvención para la Festa do Churro a la Diputación, dentro del Programa de Acción Municipal, y al hacerlo aportaron un presupuesto de gastos total de 4.100 euros».
En este sentido, aclara que «de esa cantidad, 2.400 euros eran para el pago a los trabajadores encargados de elaborar los churros, 1.300 para la elaboración del chocolate y 400 euros para vasos, bolsas y publicidad». Una vez aclarado esto, se pregunta «cómo puede decir ahora el gobierno que no había nada previsto para pagar a los churreros», a lo que añade que «es muy grave solicitar una subvención con unos gastos que después no se van a atender».
Ante este «ridículo espantoso», Luis Sabariz Rolán denuncia que «es muy posible que la Diputación conceda una subvención que se va a perder, al no celebrarse la fiesta», por lo que sugiere que «lo normal sería que el gobierno municipal se interesase por este tema arrancando el compromiso en el órgano provincial sobre la cuantía aproximada de la subvención a conceder».
«Están desunidos»
Pero no se hizo así porque, según sostiene Sabariz, «este tipo de gestiones brillan por su ausencia en el gobierno local, donde no quieren la fiesta, no hay ilusión y están desunidos, lo cual es algo que pagamos todos los vecinos».
En cuanto a la postura del alcalde, Manuel Luis Álvarez Angueira, Luis Sabariz la define como «patética», pues «llegó a publicar un bando dando cuenta de la eliminación de la fiesta después de la reunión-trampa que mantuvo con las churreras el lunes».
Lo que ocurre es que «en ese bando no cita los presupuestos en los que se basa la solicitud de subvención a la Diputación, se lía con los datos de pasadas ediciones citando gastos, pero no ingresos, muestra un nula voluntad negociadora y pretende dejar mal al colectivo de las churrerías para enfrentarlo con los vecinos».
La disculpa de la crisis
La disculpa de la crisis tampoco le sirve, «pues tres integrantes del gobierno perciben salarios y los consideran un gasto primordial, pero no así esta fiesta».
Para abundar en esto, argumenta que «es una pena que nos quedemos sin esta fiesta, que tendría que institucionalizarse para todos los años, por la relevancia que los churreros tuvieron, tienen y tendrán en la economía de Pontecesures».
Luis Sabariz, que fue uno de los impulsores de este evento, en el anterior mandato, termina recordando que «hasta ahora la exaltación del churro fue un acto más de la fiesta del Carmen también a efectos de ingresos generales, como donativos vecinales o de establecimientos».
FARO DE VIGO, 04/07/13