Llegan a España los cadáveres de los dos gallegos fallecidos en Sri Lanka.

Está previsto que los cuerpos de María González Vicente y Alberto Chaves Gómez estén en Padrón a partir de las 16 horas.

Los cadáveres de los dos gallegos víctimas de los atentados de Sri Lanka, María González Vicente y Alberto Chaves Gómez, ya se encuentran en España, «Ya están en España los restos de los dos españoles víctimas de los atentados en Sri Lanka, una cruenta cadena de ataques que nunca debió haber sucedido», escribió el ministro de Exteriores, Josep Borrell en su cuenta de Twitter.

El titular de Exteriores traslada en el mensaje su «más sentido pésame a las familias» y su agradecimiento a la Embajada de España en la India y a la cónsul honoraria en Colombo «por su desempeño».

Los restos mortales de los dos jóvenes gallegos han llegado a Madrid a las 7.50 horas de este viernes, según el alcalde de Pontecesures (Pontevedra), Juan Manuel Vidal, en cuyo cementerio serán enterrados juntos este sábado. Está previsto que los cuerpos de María González Vicente y Alberto Chaves Gómez lleguen a partir de las 16 horas al tanatorio del municipio de Padrón, donde serán velados por familiares y amigos.

En los atentados del pasado domingo, día 21, contra iglesias y hoteles de lujo en Sri Lanka fallecieron 253 personas, según un balance corregido de las autoridades del país.

Alberto, de 31 años y natural de Rianxo (A Coruña), trabajaba en la filial de Profand en la India y su pareja, María, de 32 años, lo hacía en la empresa de su familia, en Padrón, especializada en equipación de trabajo. Ella había ido a visitar a su novio y ambos estaban de vacaciones en Sri Lanka. Se encontraban desayunando cuando se produjo el ataque al hotel donde se alojaban. 

La Voz de Galicia

Salvajada en el talud de la N-550. Talan todos los platanos.

Árboles sanos, de más de 50 años, fueron talados esta mañana. Eran cerca de diez plátanos situados frente a un lateral del Parque Infantil «Vicente Moure» y hace unos dos meses se había solicitado al alcalde por escrito que los árboles fueron podados pero nunca talados.
Resulta lamentable que tanto la alcaldía de Pontecesures como el Servicio Provincial de Carreteras del Estado en Pontevedra (el talud les pertenece a ellos) tomen estas decisiones tan importantes que ya son irremediables. Por agradecimiento a nuestros antepasados que los plantaron, por la función que hacían conteniendo las tierras del talud, por la sombra que daban en el verano y por respeto al medio ambiente resulta incomprensible lo sucedido.
Desde hace años en el núcleo urbano de Pontecesures están siendo talados árboles (los que había frente a la entrada de la Casa Consistorial, frente a la biblioteca, en la Calle Ullán, etc.. y no se planta ninguno. Realmente me siento indefenso. Parece que en nuestro pueblo los árboles en las zonas urbanas solo sirven para colgarle algún adorno de vez en cuando. Triste.

El hermano de Antonio Jamardo: «El maquinista es culpable, pero no al 100%

La estación de tren de Pontecesures acogió anoche el homenaje a Antonio Jamardo Villamarín, un vecino de la localidad fallecido en el accidente de Angrois. Uno de sus hermanos, José Jamardo, manifestó al término del acto que «estamos convencidos de que no hay un culpable único. El maquinista es culpable, porque iba hablando por el teléfono, pero no es culpable al 100 por 100. Ha habido varias circunstancias que influyeron en el accidente».

El homenaje lo convoca desde hace cuatro años Belén Silva, una vecina de la localidad. Para ello, utiliza la página de Facebook del grupo «Xente de Pontecesures». Medio centenar de personas se dieron cita en la estación, y depositaron rosas y claveles en recuerdo de Antonio Jamardo, un comercial del Grupo Quintá que residía en Madrid y que regresaba a Pontecesures junto a su novia para asistir a la boda de un hermano aquel fatídico 24 de julio de 2013.

José Jamardo apuntó al término del homenaje que «de nuestros gobernantes a nivel gallego y estatal ya sé que no podemos esperar nada… Han pasado cuatro años desde el accidente, y la curva sigue igual que la noche en que murió mi hermano. Pero si aún por lo menos dejasen las cosas seguir su curso, pero no. Encima están intentando entorpecer las cosas para que las familias de las víctimas nos desesperemos y tiremos la toalla». «Las familias hemos recibido palos por todas partes», añadió.

El hermano de la víctima afirma que «a nivel personal seguimos intentando convivir con lo que ha pasado, aunque nunca lo olvidaremos», y mostró su agradecimiento hacia los actos de homenaje que siguen organizándose hacia las víctimas, como el que habrá hoy en el pazo de Faramello, cerca de Santiago.

Insistió en que «las familias de las víctimas no queremos que vaya nadie a la cárcel», pero que sí desean «que alguien asuma sus responsabilidades, que diga por qué se tomaron determinadas decisiones». José Jamardo aseguró que ahora es más optimista que hace un par de años «gracias a esa ventana que se nos abrió en Bruselas», al abogar la Unión Europea porque se constituya una comisión de investigación.

Entre los asistentes se encontraba el alcalde en funciones, Ángel Souto, ya que el regidor Manuel Vidal Seage (PP), está fuera estos días. De todos modos, Souto aclara que su presencia en el acto no era a título institucional, sino particular. De hecho, no tomó la palabra en el mismo. Quien sí lo hizo fue la organizadora, Belén Silva.

La «Negra sombra»

Fue un acto muy emotivo, que empezó justo después de que dos trenes se cruzasen en las vías de la estación de Pontecesures. Se guardó un minuto de silencio y se colocaron sobre el andén flores y unas velas encendidas.

Dos músicos, el cantante Enzo Fernando Chinchilla y el pianista Julio César Pereda, interpretaron la versión musical de la «Negra sombra» de Rosalía de Castro. Pero el cantante ni siquiera fue capaz de terminar la canción. «Se emocionó demasiado», cuenta Belén Silva.

Silva considera que la clase política no está siendo justa con las víctimas. «Después de cuatro años debería saberse bastante más de lo que pasó aquella noche».

Faro de Vigo

Los cosacos ortodoxos pasarán por Pontecesures.

En Vilanova nunca tal se vio. El propio alcalde, Gonzalo Durán, se confesó sorprendido por la estampa que dejó ayer la Asociación Española de Cosacos del Volga durante su visita al municipio. Hombres fornidos vestidos con ropas militares y gorros al estilo Doctor Zhivago marchaban a buen ritmo y cantando, portando a hombros una suerte de trono de madera con un icono de la Virgen María. El séquito se completaba con sacerdotes ataviados de negro y lustrosas cruces y mujeres con la cabeza cubierta y faldas largas, según la tradición ortodoxa.

Su presencia en Vilanova se inscribe en el peregrinaje que están realizando a Santiago a través de la Variante Espiritual que atraviesa la comarca. No es casual. La Mancomunidade do Salnés lleva un par de años haciendo contactos en Rusia con el fin de captar turismo de aquel país y sigue apostando por este mercado con su próxima participación en una feria de turismo en Moscú.

La visita de ayer tenía más visos religiosos que turísticos, pero, sin duda, contribuirá a dar a conocer Galicia en la tierra de los zares. Por de pronto, desde la asociación dicen que les gustaría volver y Gonzalo Durán se comprometió a atender la invitación de su presidente, Alexander Vasilenko, para viajar a los dominios del Volga. Su ruso es limitado pero el regidor alcanzó a decir spasíbo (gracias) y le entregó una placa como muestra de agradecimiento.

La delegación cosaca llegó el martes al monasterio de Armenteira y de allí se trasladó a Vilanova, donde fueron objeto de una recepción institucional en el Concello. De las labores de traducción se encargó el capellán Andrey Kordochkin, que demostró un perfecto dominio del español ante un auditorio en el que predominaban las cabelleras rubias. El grupo que se desplazó a Galicia está compuesto por 53 personas, la mayoría hombres, aunque también hay algunas mujeres y un niño. De estos, 21 proceden directamente de Rusia y el resto son rusos afincados en España que, a través de esta asociación y con el apoyo de su embajada, promueven actividades con el objetivo de dar a conocer su cultura y su religión, al tiempo que actúan de embajadores de una España que trasciende a la «playa y la paella» , según explicó Kordochkin.

Su periplo entre los bosques de Armenteira y los viñedos de Vilanova les dejó huella. «La ruta nos cambió por dentro», señalaba ayer Vasilenko, y todavía les faltaba vivir el momento más emotivo, que se espera para este mediodía en la misa del peregrino, en la catedral de Santiago. Hasta entonces, todavía tenían muchos kilómetros por delante, por tierra y por mar. Desde el puerto de Vilanova se embarcaron ayer por la mañana en catamarán para cubrir el trayecto del camino que rememora el traslado del apóstol hasta Pontecesures por la ría de Arousa y el río Ulla. A partir de ahí emprendieron camino hacia Compostela, disfrutando de un día espléndido y turnándose para portar el icono de la Virgen. La pieza viaja sobre una plataforma de madera que pesa unos cuarenta kilos. Cuando el camino tiene ancho suficiente, la llevan entre cuatro hombres, y dos cuando este se estrecha, pero María siempre viaja con ellos.

Según explicó Andrey Kordochkin, la imagen apareció «milagrosamente» el 21 de octubre de 1917 en Rusia y, a partir de ahí, los cosacos ortodoxos la llevan en procesión por todo el país, y ahora también por el extranjero, como símbolo de su fe. Nunca había estado en Galicia. Esta deuda queda saldada.

La Voz de Galicia

Gobierno y oposición de Valga, orgullosos de los vecinos que hacen realidad «un espectáculo que recibe a miles de personas»

Gobierno y oposición quisieron felicitar públicamente a los vecinos que dedican parte de su tiempo la trabajar duro para montar el Belén Artesanal de Campaña. Aunque no intervinieron en el acto inaugural, los socialistas, encabezados por María Ferreirós, dijeron sentirse «orgullosos» de ello y los animaron a seguir en la misma línea, sabedores de que «este Belén atrae a miles de personas». En ello había insistido el alcalde, el conservador José María Bello Maneiro, durante la inauguración oficial, que como es tradición incluyó una bendición religiosa, esta vez con dos curas. El primer edil declaró que «no hay palabras ni muestras de agradecimiento suficientes para esos vecinos que trabajan sin cesar durante tres meses» para desmontar la composición artística del año anterior y montar la del siguiente, dando como resultado una obra «espectacular» que «se supera cada año que pasa», de ahí que reciba a decenas de miles de personas «llegadas de toda Galicia y diferentes puntos de España». Flanqueado en todo momento por la edil de Cultura y presidenta de la Asociación Amigos do Belén que lo hace realidad, María del Carmen Castiñeiras, Maneiro agradeció la colaboración económica de Turismo de Galicia, «pues nos permite seguir mejorando». A pesar de sus tablas políticas confesó que cada acto inaugural que pasa le pone más «nervioso» porque el creciente nivel alcanzado por este Belén hace que la responsabilidad sea también mucho mayor.

Faro de Vigo