Saldo vegetativo negativo en la comarca.

Año 2017

Valga, 36 nacimientos, 68 defunciones.

Catoira, 23 naciomientos, 37 defunciones.

Pontecesures, 32 nacimientos, 24 defunciones.

Año 2018

Valga, 41 nacimientos, 79 defunciones.

Catoira, 26 nacimientos, 39 defunciones.

Pontecesures, 17 nacimientos, 34 defunciones.

Año 2019

Valga, 37 nacimientos, 79 defunciones.

Catoira, 20 nacimientos, 39 defunciones.

Pontecesures, 22 nacimientos, 27 defunciones.

Subvención para a bilioteca municipal de Pontecesures.

Un total de 45 concellos da provincia de Pontevedra beneficiaranse este ano das axudas que a Xunta ten en marcha para mellorar as coleccións bibliográficas e dotar de novidades editoriais ás súas bibliotecas e axencias públicas de lectura municipais integradas na Rede de Bibliotecas de Galicia, para o que o Goberno autonómico destina este ano 153.176,6 euros. Na comarca de Caldas beneficiaranse seis concellos.

Como publicaba onte o Diario Oficial de Galicia (DOG) a primeira liña de axudas, queubvenciona a dotación de novidades editoriais en galego en formato físico, beneficiará a Catoira, Caldas de Reis, Cuntis, Portas e Valga e conta cunha dotación de 5.847,93 euros. Con esta medida a Consellería de Cultura pretende ofrecer aos usuarios e usuarias estas novidades editoriais no momento da súa entrada no mercado.

O segundo programa, dedicado á mellora das coleccións bibliográficas, ten como destinatarios este ano a un total de seis concellos desta comarca (Caldas, Catoira, Pontecesures, Cuntis, Portas e Valga) e as axudas alcanzan un importe total de 22.661,83 euros.

Estas liñas de axudas enmárcase no compromiso da Xunta de Galicia por mellorar e incrementar a oferta e o servizo aos usuarios.

El Correo Gallego

La piscina de Pontecesures es la única exterior abierta en Arousa.

Ir a la piscina nunca fue tan complicado, pero no queda otra que adaptarse a los nuevos tiempos. En Pontecesures no hay playa y la alternativa para darse un chapuzón es la piscina municipal, que abrió esta semana sus puertas, aunque de una forma muy distinta al año pasado. La prioridad es hacer cumplir las normas de seguridad y para ello se ha establecido un estricto protocolo que empieza por la petición de cita, vía Internet.

La aplicación diseñada para este fin se puede descargar a través de la página de Facebook del Concello. El usuario debe indicar turno y día, teniendo en cuenta que solo se puede reservar con 24 horas de antelación y que se han establecido dos horarios durante julio y agosto: 16 a 18.15 horas y 18.45 y 21 horas. La media hora que queda libre se emplea en limpiar y desinfectar las instalaciones. Cada adulto puede tener a su cargo a tres menores de doce años y los chavales de doce a dieciséis años solo pueden acceder al recinto con autorización de su tutor legal. Los usuarios deben aportar su nombre, dirección y teléfono con el fin de que, en caso de que haya sospechas de algún positivo en coronavirus, se pueda rastrear un posible brote.

Una vez cumplidos estos requisitos, todavía hay mucho protocolo por delante. Cuando el usuario llega a la piscina debe presentar el justificante de acceso mediante un código QR a través del móvil, pasar el calzado por una alfombra rociada con desinfectante, utilizar los dispensadores de gel hidroalcohólico y superar un control de temperatura. Se ha establecido un aforo del 75 %, lo que supone un máximo de 50 personas. En lo que va de semana, se está alcanzado una asistencia aproximada de 35 personas por turno. Además se han señalizado las zonas de tránsito para garantizar las distancias de seguridad interpersonal.

La adecuación de las instalaciones le ha costado al Concello alrededor de 5.000 euros, cantidad que el alcalde, Juan Manuel Vidal Seage, da por bien empleada. Abrir la piscina era una apuesta de su gobierno porque consideran que, tras el largo confinamiento, había que darles a los cesureños la oportunidad de ponerse el bañador, especialmente a los más jóvenes, y por eso, también, este verano el acceso es gratuito. «Levou moito tempo e moito traballo sacar isto adiante, pero estou moi satisfeito e moi orgulloso», apunta el regidor.

La de Pontecesures no será la única piscina municipal al aire libre que funcionará en Arousa este verano. En Catoira prevén abrir la suya en breve mientras que las de Ribadumia y Meaño permanecerán cerradas. Así lo han decidido los respectivos concellos siguiendo las directrices de la Mancomunidade do Salnés y con el fin de evitar posibles focos de contagio. Preparar las instalaciones para la nueva normalidad no es sencillo y han preferido no arriesgar.

La que también funciona, ya con horario de verano, es la piscina municipal de Cambados, aunque en su caso está cubierta. La de Vilagarcía, igualmente climatizada, seguirá cerrada hasta el otoño a la espera de unas obras.

La Voz de Galicia

En Pontecesures bajó el paro en junio.

No han ido mal las cosas por lo que respecta al empleo a lo largo de junio. No, al menos, frente a lo que se podía prever con las consecuencias del coronavirus encima. El mes pasado se cerró en O Salnés con un descenso generalizado en los registros del desempleo. Son 671 desocupados menos de los que estaban inscritos a finales de mayo. Un fenómeno que se repite en el Baixo Ulla, territorio en el que los municipios de Catoira, Pontecesures y Valga experimentan bajadas de 16, 17 y 21 trabajadores en sus balances del desempleo.

Esta lectura positiva se reproduce, sin una excepción, en los nueve concellos que conforman O Salnés. En Vilagarcía, por ejemplo, hay 78 parados menos que en mayo. En Ribadumia son 37, en Meis, 39, 43 en Meaño, 37 en Vilanova y 21 en A Illa. Con todo, son tres los municipios en los que el descenso resulta más acusado. Encabeza este listado Sanxenxo, con 195 desempleados menos que el mes anterior, y le siguen O Grove (140) y Cambados (81), que ofrece una cifra bruta semejante a la de la capital arousana, pero su menor población otorga una mayor importancia relativa al dato.

Sin embargo, sería ingenuo pensar que la pandemia y el estado de alarma no han pasado factura al tejido laboral de la comarca. La comparación con respecto al mes anterior ofrece una imagen muy puntual, que una lectura más amplia en el tiempo contribuye a matizar. La reducción continúa siendo positiva, eso no cambia, pero no cabe duda de que la situación se ha deteriorado frente a lo que sucedía en O Salnés un año atrás. Esa erosión se sitúa en un 29 % con respecto a junio del 2019. Es decir, en las oficinas de Arousa hay un  29 % de parados inscritos más que hace doce meses. Y, de nuevo, es algo que afecta a todos los concellos de la demarcación, con especial incidencia en las grandes plazas turísticas. Así, este incremento interanual del desempleo alcanza un 54 % y un 41 % en O Grove y Sanxenxo, aunque también Ribadumia y Meaño acusan porcentajes de empeoramiento que rondan el 40 %. Resisten mejor, en cambio, Vilagarcía y A Illa (con un 20 %), Vilanova (26%) o Meis (25 %).

En general, junio deja 2.005 desocupados más en O Salnés de los que figuraban en sus registros hace un año. Su número es, ahora, de 8.793 personas, con 428 en Valga, 271 en Catoira y 268 en Pontecesures. El sector servicios sufre con mayor intensidad este deterioro, con 1.619 parados más y un porcentaje del 36 %. La industria y el sector primario se dejan un 24,8 y un 23 % del empleo por el camino. El doble que la construcción, que muestra un mejor comportamiento: 12 %.

La Voz de Galicia

Catoira reivindica que se mantengan en el Ullán los servicios ferroviarios que había antes de la pandemia.

García presidió ayer el primer pleno de su nueva etapa. García presidió ayer el lunes el primer pleno de su nueva etapa.

Alberto García presidió ayer su primer pleno desde que recuperó el bastón de mando de Catoira. Y aprovechó la sesión para sacar adelante el primer acuerdo trascendente de esta nueva etapa, como es una reivindicación dirigida a Renfe, al Estado central, la Xunta y a todo organismo que tenga algo que decir en la materia, para que se garantice el mantenimiento de los servicios ferroviarios.

En concreto, se quiere que se respeten la periodicidad y frecuencia de los trenes que utilizaban antes de la pandemia no solo los catoirenses, sino también los ciudadanos de Pontecesures y Padrón -con apeaderos propios- y, en general, los de comarcas como Caldas, O Sar y Barbanza.

Lo que hizo el alcalde vikingo fue incluir esta reivindicación en el orden del día a modo de Resolución de Alcaldía, pero sometiéndola a votación para que la Corporación le diera más fuerza tomando el acuerdo de reivindicar ese mantenimiento de los servicios ferroviarios, ya que con el estado de alarma por el coronavirus bajaron de 10 a 4 diarios, en cada sentido, y se teme que no vayan a recuperarse.

La propuesta elevada por García al pleno se basa en la reivindicación que hace días dio a conocer FARO DE VIGO, cuando el exconcejal pontecesureño Luis Sabariz hizo llegar a todos los grupos políticos parlamentarios y a los alcaldes del Bajo Ulla un informe en el que se alerta de esa pérdida de trenes, en perjuicio de la sociedad en general y, muy particularmente, de trabajadores y estudiantes.

“Como también van a salir muy perjudicados, en caso de reducirse el número de trenes, los ciudadanos de toda la comarca de Barbanza que se acercan a nuestras estaciones para utilizar este importante medio de transporte”, advierte el propio García.

“No tiene sentido que se introduzcan nuevos recortes o se mantengan los aplicados a raíz de la pandemia cuando está demostrado que los ciudadanos utilizan el tren en gran número, e incluso que cada año parecen hacerlo más, por eso nos oponemos a la reducción de frecuencias y exigimos que sigan parando en nuestros apeaderos”,” proclama el máximo mandatario catoirense.

Iván Caamaño, portavoz del PP , se ofreció a pedir a la diputada Ana Pastor que ejerza de mediadora en el Congreso y reclamó un frente común de reivindicación participado por los Concellos de Rianxo y Boiro.

Faro de Vigo

Clamor en el Ullán ante el temor a perder seis trenes diarios en sus apeaderos.

Los servicios ferroviarios se redujeron durante el estado de alarma y ahora cabe la posibilidad de que ya no se restablezcan – De diez al día en cada sentido podrían pasar a solo cuatro.

Un tren, a su paso por el centro de Pontecesures.

Un tren, a su paso por el centro de Pontecesures.

Preocupación e indignación. Es lo que sienten los vecinos de localidades como Pontecesures, Catoira y Padrón ante la posibilidad de que se vea notablemente reducido el número de servicios ferroviarios que se prestan en ellas.

Ya se hizo, por cuestiones obvias, durante el estado de alarma propiciado por el coronavirus. Pero ahora parece que ya nunca volverá a ser lo mismo. Todo indica que de diez servicios diarios se pasará a solo cuatro, lo cual limita considerablemente las posibilidades de desplazamiento en el territorio del Ullán.

Esta hipótesis, y la preocupación existente al respecto, ya son de conocimiento del presidente de la Xunta y los líderes de todos los grupos políticos con representación parlamentaria. Al igual que son conscientes de ello los alcaldes de Catoira, Alberto García; Pontecesures, Juan Manuel Vidal Seage; y Padrón, Antonio Fernández Angueira.

Lógicamente, las quejas de los vecinos también han sido puestas en conocimiento de Renfe y del Gobierno de España, con la esperanza de que se mantengan operativos el mayor número de trenes de cercanías posible y se garantice que seguirán deteniéndose, al menos como hicieron hasta la pandemia, en los apeaderos del Baixo Ulla.

El temor radica en que a partir de ahora “en lugar de tener diez, solo vamos a contar en Catoira, Padrón y Pontecesures con cuatro servicios en cada sentido, eliminándose, por ejemplo, los trenes de primera hora de la mañana”, de tal forma que los más madrugadores “partirán sobre las 11.00 horas”. Asimismo, el último, procedente de Santiago, “saldrá antes de las 20.00 horas de la capital gallega”.

Así lo explican los denunciantes de la situación, abanderados siempre por Luis Sabariz, exconcejal pontecesureño y exmiembro de la plataforma en defensa del tren de proximidad.

Consideran que el citado recorte, y más aún si se produce en horarios considerados “esenciales”, resulta del todo “inconcebible” , pues advierten de que “va a impedir el uso del ferrocarril a trabajadores, estudiantes universitarios, pacientes de hospitales y un largo etcétera de usuarios”.

Ni que decir tiene, argumentan los defensores del tren de cercanías que piden la implicación de todos los partidos políticos en esta causa, que reducir la frecuencia de los trenes “va a afectar muy negativamente a la actividad económica de toda la zona”.

Por si fuera poco, “los trenes regionales en todo el eje A Coruña-Vigo se quedan solo en cuatro, suprimiéndose los que salían desde Santiago, A Coruña, Vilagarcía y Pontevedra, lo cual supone un golpe definitivo a las cercanías ferroviarias o trenes de proximidad”.

En resumen, que “nunca se puso en marcha en Galicia un servicio de cercanías como tal, pero es que ahora los pocos tramos que tenemos con algo parecido se pretenden eliminar”, explica Sabariz a los representantes políticos y a Renfe.

Todo esto le lleva a decir que “resulta descorazonador que se aproveche una tragedia sanitaria para acometer un recorte tan brutal y se tomen este tipo de decisiones en contra del medio de transporte más ecológico, económico y seguro”.

Por cierto, que la amenaza que pesa sobre la presencia del tren y su vinculación con el Ullán sigue latente a pesar de que el balance oficial de Renfe referido a 2019 deja patente la existencia de una gran cantidad de pasajeros en la línea Vigo-A Coruña, con una muy importante actividad en sus estaciones, donde el número total de subidas y bajadas fue de 102.647.

Puede decirse, además que en Pontecesures se apearon 18.355 personas en 2018 y 19.047 en 2019; en Catoira pasaron de 21.554 a 24.355 usuarios; y en Padrón la cifra subió de 21.929 a 23.301 pasajeros.

Faro de Vigo