La industria en Valga y Pontecesures.

En el caso de la industria, el Concello ourensano de Carballeda de Valdeorras (productor de pizarra) tiene al 46,9 % de su fuerza laboral afiliada a este sector. Le sigue As Somozas, con un 36,8 %, y Valga, 35,5 %.

La cuarta y quinta plaza la ocupan Pontecesures y Catoira, ambos con un 31,5 %. Ya por debajo del 30 % se incluyen Salceda de Caselas, Boiro, Salvaterra de Miño, Dodro, Cerceda, O barco de valdeorras, Mos, Pobra do Caramiñal, Rubiá y Rianxo.

El Correo Gallego

Detectan vertidos permanentes de aguas fecales y restos industriales en el río Ulla.

Hace semanas vecinos y pescadores de Pontecesures denunciaban la existencia de vertidos al Ulla procedentes de fosas sépticas. Ahora se recrudecen esos lamentos y se escuchan los de otros ciudadanos del entorno, así como de mariscadores de la ría de Arousa, que ponen el grito en el cielo tras constatar la existencia de “infinidad de puntos de vertido contaminantes”.

Se trata tanto de desagües como de regatos que desembocan en el río totalmente repletos de aguas fecales e incluso restos procedentes de diferentes industrias.

Las críticas se refieren al “preocupante estado” del cauce fluvial en las localidades de Padrón, Pontecesures, Catoira y Valga, por lo que se pide una mayor presencia del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y que esta actúe “con mayor contundencia” contra los que se encargan de destruir el medio natural e incluso las administraciones públicas que puedan tolerarlo.

“Estamos ante un auténtico atentado medioambiental que se comete permanentemente, las 24 horas del día y todos los días del año”, aseguran algunos de los damnificados.

Hay mariscadores que faenan en los bancos de Os Lombos do Ulla y los parques de cultivo de Carril (Vilagarcía) que achacan a esa contaminación fecal e industrial del río el progresivo declive de sus zonas productivas. Al igual que hay pescadores que relacionan la escasez de lamprea, anguila, solla y otras especies con esa supuesta contaminación.

Al tiempo que piden “medidas contundentes” para acabar con esto, muestran imágenes en las que se aprecian importantes vertidos que, efectivamente, acaban en el Ulla, además de contaminar el entorno natural del mismo y de los afluentes que lo abastecen.

Hay tramos donde el agua está completamente marrón, mientras que en otros presenta un color amarillo intenso que cubre toda la lámina de agua.

No faltan restos de toallitas y otros desperdicios que acaban en el lecho fluvial procedentes de redes de alcantarillado que no pasan por depuradora o directamente desde las fosas sépticas de algunas viviendas.

Faro de Vigo

Hacen un llamamiento para que cesen las pintadas en la estación de Pontecesures.

Comienzan los trabajos de reparación del techo de la marquesina.

Lo usuarios del tren en Pontecesures, y especialmente Luis Sabariz Rolán, el exconcejal que desde hace años reivindica todo tipo de mejoras para el apeadero de la localidad, hacen un llamamiento a la colaboración ciudadana para que cesen las pintadas en el edificio.
El propio Sabariz señala que fueron eliminadas no hace mucho, con el pintado exterior del inmueble, pero solo unos días después los gamberros volvieron a embadurnarla, como sucedió en la estación de Catoira. Ayer se pintaron nuevamente las paredes del edificio pontecesureño, por lo que Sabariz muestra su deseo de que no sea atacado otra vez.

Reparación de la marquesina 

El exedil y portavoz de la comisión en defensa del tren de cercanías aprovecha para indicar que comenzaron los trabajos de reparación del tejado de la marquesina que se colocó hace unos meses, y por la que caía agua al andén principal.
Sabariz se lo comunicó al Administrador de Infraestructuras ferroviarias (ADIF), proponiéndole diferentes soluciones para acabar con esa filtración de agua. “Y esos trabajos han empezado ayer, para satisfacción de todos”, explica.

Iluminación

También detalla que “en los próximos días van a mejorar la iluminación en la entrada a los andenes desde la Praza do Coche de Pedra o desde el Camiño da Portiña”, por lo que “ahora quedamos a la espera de que nos instalen nuevos bancos y papeleras en los andenes, ya que se trata de mobiliario muy necesario”.

Faro de Vigo

Camila Morison no estará en las citas internacionales.

El selectivo programado por la Real Federación Española de Piragüismo esta semana en la pista del Pontillón do Castro de Verducido concluía ayer con tres canoístas de los clubes de Arousa entre sus protagonistas. Con María Pérez (Náutico O Muíño de Ribadumia) y Raquel da Costa (As Torres-Romaría Vikinga de Catoira) agenciándose las plazas del C-2 500 para los Juegos Europeos (21 a 30 de junio en Minsk, Bielorrusia) y el Campeonato del Mundo Sub-23 (1 a 4 de agosto, Pitesty, Rumanía); y Noel Domínguez (Breogán do Grove) las del C-2 1.000 en las mismas citas, solo que con parejas de embarcación diferentes.

Da Costa y Pérez se impusieron ayer con absoluta autoridad en la regata selectiva del C-2 500 Sub-23. Empleando 2.07,130, sacándole 4 segundos a la segunda mejor pareja, la formada por Ana Barea y Belén Díaz. El día anterior el efecto cascada provocado por la decisión de la pontevedresa Antía Jácome de renunciar al C-1 200 en la Copa del Mundo de Duisburgo, que había ganado en las aguas de Verducido, para centrarse en el C-2 500 acabó con Da Costa sustituyendo a la madrileña María Corbera como acompañante de Pérez en los Juegos Europeos. Plaza esta que la palista del O Muíño había conquistado con su segundo puesto en la final del C-2 500 del selectivo junto a la deportista del Aranjuez, con triunfo de Jácome y Patricia Coco.

El caso de Noel Domínguez es idéntico al de María Pérez, solo que él irá a las dos citas internacionales con la selección española en compañía de sus parejas en el selectivo. A los Juegos Europeos con el asturiano David Fernández en el C-2 1.000 absoluto, segundos el miércoles tras los poienses Sergio Vallejo y Adrián Sieiro; y al Mundial Sub-23 en el mismo barco después de imponerse ayer con el cangués David Barreiro (Náutico Rodeira) en la final correspondiente con un crono de 3.40,680, 2 segundos y 780 milésimas menos que los empleados por Ignacio Calvo y Jaime Martínez.

El también breoganista Diego Romero estuvo muy lejos del premio en la final del C-1 1.000 Sénior, quinto a 5,362 de Vallejo, regata a la que ya no logró siquiera acceder Yerai García (Piragüismo Illa). Por su parte, Camila Morison, del Náutico Pontecesures, parece caminar hacia otro año en blanco, tercera en el selectivo del K-2 500, quinta en el del K-1 500 y sexta en el K-1 1.000, los tres Sub-23.

La Voz de Galicia.