Cofradías de la Virgen de los Dolores y el Nazareno de San Xulián de Pontecesures.

Párroco, Arturo Lores Santamaría

«Estamos en marcha, Cuaresma arriba, hacia la Pascua donde encontraremos el agua bautismal del renacimiento y la luz de la Resurrección».

En septiembre de 2006 tomo posesión de la Parroquia de San Julián de Pontecesures, como Párroco. Al año siguiente, con motivo de la Semana Santa, observo, en una sacristía la Imagen de un Nazareno. En Pontecesures, no había ninguna procesión de Semana Santa, y aprovecho la ocasión, para instituir la Procesión del Encuentro, con las imágenes de ese Nazareno y la Virgen de los Dolores. Había que pensar en el día y la hora, para no interferir con las procesiones de Semana Santa del vecino pueblo de Padrón, y así, se me ocurrió que el día apropiado, sería el Viernes Santo, por la mañana.

Basándome en las comisiones de Fiestas, de los diferentes lugares de la Parroquia, les encomiendo la titularidad de cada una de las imágenes, y así, saliendo de los extremos de la Parroquia, poder encontrarnos en la Plazuela del Centro, frente a la Iglesia. Y, ¿Quién podría ser el Predicador? el encargado de los Medios de Comunicación de la Diócesis, el Padre Isorna, Franciscano, natural de Cordeiro, (Valga) en ese momento era el que celebraba la Misa de la TVG.

A partir de esa experiencia, la gente se anima y deciden formar las diferentes Cofradías, la del Nazareno y la de la Virgen de los Dolores. Instituyéndose ambas, con sus Estatutos y con autorización del Sr. Arzobispo don Julián Barrio, el 16 de marzo de 2010.

Así seguimos ininterrumpidamente hasta este año 2020, que por razones de fuerza mayor, nos vemos obligados a vivirla más interiormente y pensando, en el 2021 Año Santo Compostelano como acción de Gracias a Dios.

Pastoral Santiago

El empresario Andrés Quintá, hospitalizado en el Clínico de Santiago.

Faro de Vigo rectifica la nota:

Andrés Quintá Cortiñas. // A. Villar

Andrés Quintá Cortiñas.

Andrés Quintá Cortiñas está ingresado en el Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela. El afamado empresario, cabeza visible de Extrugasa y el Grupo Quintá, dio positivo por coronavirus Covid-19.

La familia dice que no es grave, pero la preocupación existe en el Concello de Valga, donde está plenamente asentado, como hijo adoptivo, y donde montó su imperio. Pero también en localidades vecinas como Padrón, donde nació, y en otros muchos municipios de las comarcas de Caldas, Barbanza, O Sar, Santiago y O Salnés, a las que está estrechamente ligado profesionalmente y a las que pertenecen muchos de los más de setecientos trabajadores de su industria.


La noticia sobre la hospitalización del laureado empresario se extendió rápidamente en las últimas horas, sobre todo porque la plantilla de Extrugasa está al tanto de ello y no deja de interesarse por su estado de salud, al igual que hacen desde el Concello de Valga.

Hay que tener presente que Andrés Quintá es un hombre muy popular que además tiene una importante presencia mediática en la actividad cultural, social y económica del Bajo Ulla y de toda Galicia.

Una de sus últimas apariciones públicas, el mes pasado

Sin ir más lejos, a principios del mes pasado participó en el almuerzo oficial que organiza cada año el Concello de Valga para reunir a empresarios y políticos; un encuentro de confraternidad que contó con la presencia de algunos de los más importantes patronos de la comarca, como siempre arropados por alcalde, José María Bello Maneiro, y esta vez también por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el conselleiro de Economía.

Quintá se mostró entonces tan activo como lo fue siempre. Y se dejó ver como es, un hombre extrovertido, campechano y sencillo, al que le gusta hablar de historia y recordar cómo levantó su imperio, capaz de exportar a medio mundo el 60% de su producción para dar servicio a sectores como el naval, ferroviario, industrial, aeronáutico, arquitectura o construcción.


Un referente en Galicia

A base de esfuerzo, Andrés Quintá se convirtió en uno de los empresarios más importantes de Galicia, situando a su empresa estandarte, Extrugasa, entre las más significativas del mundo dentro de su sector, el de extrusionados de aluminio.

A través de dicha firma y del Grupo Quintá, el afamado empresario también se convirtió en un importante benefactor, colaborador habitual del Concello de Valga en todo tipo de iniciativas socioculturales, al igual que patrocinador de clubes de fútbol y baloncesto, entre otras disciplinas deportivas.

En las fiestas populares y con la cultura

Es un hombre que disfruta asistiendo a fiestas como la de la empanda de maíz, en la parroquia valguesa de Cordeiro, y a la exaltación anual de la anguila y la «caña do país», también en Valga.

El artífice del imperio Quintá es, en definitiva, un hombre del pueblo que participa activamente del día a día de su localidad y de la comarca.

Un hombre que presume de haber disfrutado siendo joven «de la buena música de las verbenas, reuniones y comidas familiares y con amigos«, de ahí que no dude en respaldar este tipo de acontecimientos que, como la Mostra da Caña do País, «nos dan un respiro y ayuda necesaria para continuar luchando y trabajando».

Quintá en la fiesta de su 80 cumpleaños, el pasado verano.


Un hombre concienciado

«Las fiestas gastronómicas son un importante difusor de los productos ecológicos que deberían marcar la base de una alimentación sana», explicaba Andrés Quintá en una entrevista concedida a FARO el pasado verano.

Y abundaba en ello diciendo que es «una de las asignaturas pendientes de este siglo, en las que el sobrepeso y la obesidad infantil son verdaderas epidemias causadas por una alimentación precaria a base de alimentos ultra-procesados».


Promotor turístico del Concello

Se pronunciaba así con tanta firmeza como la que emplea cuando promociona turística y empresarialmente al Concello de Valga.

Una postura que, en buena lógica, mantiene al referirse a su buque insignia, Extrugasa; empresa en la que «siempre nos hemos preocupado por luchar a diario e invertir los beneficios de nuestra facturación en investigación y desarrollo de nuevos productos demandados por el mercado».


Quintá, al lado del alcalde, en la pasada comida de Navidad.


Ese es Andrés Quintá, un hombre que tanto habla de la siembra del trigo en una parcela de Valga, para enseñar a los niños cómo se cultivaba el campo antaño, como de las exportaciones de aluminio realizadas por su empresa a medio centenar de países.


«Esfuerzo, modestia y aprendizaje»

Y es que «Extrugasa surgió del esfuerzo de personas emprendedoras con visión de innovación que supimos adaptarnos a la transformación de la industria y arquitectura», enfatiza el empresario siempre que tiene oportunidad.

Lo tiene claro, como claro tiene el secreto de su éxito: «Modestia, aprendizaje y esfuerzo». Esas son las «guías fundamentales para lograr el éxito « de las que suele hablar para referirse a la filosofía de su empresa, asentada en un espacio de 400.000 metros cuadrados, con 112.000 construidos, en el que se generan 750 empleos directos y se facturan más de cien millones de euros al año.

Pero Andrés Quintá no solo piensa en su pueblo y su empresa. También se implica al máximo en el desarrollo de su comarca y de toda Galicia. Prueba de ello es que, como presidente de la asociación empresarial del Ulla-Umia, en el almuerzo de trabajo desarrollado en febrero ya expuso al presidente de la Xunta que es fundamental «lograr una mayor internacionalización de nuestra actividad empresarial y prestigiar la marca Galicia y la marca España», lo cual se logra, a su juicio, «a base de la cultura del trabajo y de la calidad de nuestros productos, planificando el futuro de nuestra sociedad a partir de la educación y la formación«.

Formación

Defendía así el papel del binomio Universidad-Empresa, convencido de que «deben ir de la mano para adecuar la preparación de nuestros jóvenes a las necesidades del mañana de nuestras empresas».

Esto lo llevaba a reivindicar más inversión en I+D+i, tratando de «convertir nuestras facultades de Ingeniería en auténticos laboratorios tecnológicos que eviten la llamada fuga de cerebros hacia la emigración».

Andrés Quintá incluso animaba entonces a los demás empresarios a «asistir a ferias internacionales, muestras tecnológicas, simposios formativos y centros expositivos de interés mundial «. Es decir, a «salir, ver mundo y conocer lo que hacen otros para inspirarnos en ellos y superarlos».


Reclamaciones ante Feijóo

En aquella ocasión Quintá también reclamó a Feijóo medidas de apoyo a los emprendedores y la concesión de premios a la exportación. Además de quejarse de las «enormes cargas fiscales y burocráticas que asfixian a empresarios y trabajadores».

Por todas estas razones, y muchas más, Andrés Quintá es un empresario de éxito cuyo estado de salud preocupa a muchos ciudadanos.

Por el momento, lo que sostienen en la propia empresa y en el Concello de Valga es que está estable, dentro de la gravedad de la situa

El empresario Andrés Quintá, hospitalizado en la UCI del Clínico de Santiago.

Dio positivo por coronavirus.

Andrés Quintá Cortiñas está ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela. El afamado empresario, cabeza visible de Extrugasa y el Grupo Quintá, dio positivo por coronavirus COVID_19, por lo que permanece entubado en la citada unidad médica en estado grave.

La preocupación es máxima en el Concello de Valga, donde está plenamente asentado, como hijo adoptivo, y donde montó su imperio.

Pero también en localidades vecinas como Padrón, donde nació, y en otros muchos municipios de las comarcas de Caldas, Barbanza, O Sar, Santiago y O Salnés, a las que está estrechamente ligado profesionalmente y a las que pertenecen muchos de los más de setecientos trabajadores de su industria.

La noticia sobre la hospitalización del laureado empresario se extendió rápidamente en las últimas horas, sobre todo porque la plantilla de Extrugasa está al tanto de ello y no deja de interesarse por su estado de salud, al igual que hacen desde el Concello de Valga.

Hay que tener presente que Andrés Quintá es un hombre muy popular que además tiene una importante presencia mediática en la actividad cultural, social y económica del Bajo Ulla y de toda Galicia.

Una de sus últimas apariciones públicas, el mes pasado

Sin ir más lejos, a principios del mes pasado participó en el almuerzo oficial que organiza cada año el Concello de Valga para reunir a empresarios y políticos; un encuentro de confraternidad que contó con la presencia de algunos de los más importantes patronos de la comarca, como siempre arropados por alcalde, José María Bello Maneiro, y esta vez también por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el conselleiro de Economía.

Quintá se mostró entonces tan activo como lo fue siempre. Y se dejó ver como es, un hombre extrovertido, campechano y sencillo, al que le gusta hablar de historia y recordar cómo levantó su imperio, capaz de exportar a medio mundo el 60% de su producción para dar servicio a sectores como el naval, ferroviario, industrial, aeronáutico, arquitectura o construcción.


Un referente en Galicia

A base de esfuerzo, Andrés Quintá se convirtió en uno de los empresarios más importantes de Galicia, situando a su empresa estandarte, Extrugasa, entre las más significativas del mundo dentro de su sector, el de extrusionados de aluminio.

A través de dicha firma y del Grupo Quintá, el afamado empresario también se convirtió en un importante benefactor, colaborador habitual del Concello de Valga en todo tipo de iniciativas socioculturales, al igual que patrocinador de clubes de fútbol y baloncesto, entre otras disciplinas deportivas.

En las fiestas populares y con la cultura

Es un hombre que disfruta asistiendo a fiestas como la de la empanda de maíz, en la parroquia valguesa de Cordeiro, y a la exaltación anual de la anguila y la «caña do país», también en Valga.

El artífice del imperio Quintá es, en definitiva, un hombre del pueblo que participa activamente del día a día de su localidad y de la comarca.

Un hombre que presume de haber disfrutado siendo joven «de la buena música de las verbenas, reuniones y comidas familiares y con amigos«, de ahí que no dude en respaldar este tipo de acontecimientos que, como la Mostra da Caña do País, «nos dan un respiro y ayuda necesaria para continuar luchando y trabajando».

Quintá en la fiesta de su 80 cumpleaños, el pasado verano.


Un hombre concienciado

«Las fiestas gastronómicas son un importante difusor de los productos ecológicos que deberían marcar la base de una alimentación sana», explicaba Andrés Quintá en una entrevista concedida a FARO el pasado verano.

Y abundaba en ello diciendo que es «una de las asignaturas pendientes de este siglo, en las que el sobrepeso y la obesidad infantil son verdaderas epidemias causadas por una alimentación precaria a base de alimentos ultra-procesados».


Promotor turístico del Concello

Se pronunciaba así con tanta firmeza como la que emplea cuando promociona turística y empresarialmente al Concello de Valga.

Una postura que, en buena lógica, mantiene al referirse a su buque insignia, Extrugasa; empresa en la que «siempre nos hemos preocupado por luchar a diario e invertir los beneficios de nuestra facturación en investigación y desarrollo de nuevos productos demandados por el mercado».

Quintá, al lado del alcalde, en la pasada comida de Navidad.


Ese es Andrés Quintá, un hombre que tanto habla de la siembra del trigo en una parcela de Valga, para enseñar a los niños cómo se cultivaba el campo antaño, como de las exportaciones de aluminio realizadas por su empresa a medio centenar de países.


«Esfuerzo, modestia y aprendizaje»

Y es que «Extrugasa surgió del esfuerzo de personas emprendedoras con visión de innovación que supimos adaptarnos a la transformación de la industria y arquitectura», enfatiza el empresario siempre que tiene oportunidad.

Lo tiene claro, como claro tiene el secreto de su éxito: «Modestia, aprendizaje y esfuerzo». Esas son las «guías fundamentales para lograr el éxito» de las que suele hablar para referirse a la filosofía de su empresa, asentada en un espacio de 400.000 metros cuadrados, con 112.000 construidos, en el que se generan 750 empleos directos y se facturan más de cien millones de euros al año.

Pero Andrés Quintá no solo piensa en su pueblo y su empresa. También se implica al máximo en el desarrollo de su comarca y de toda Galicia.

Prueba de ello es que, como presidente de la asociación empresarial del Ulla-Umia, en el almuerzo de trabajo desarrollado en febrero ya expuso al presidente de la Xunta que es fundamental «lograr una mayor internacionalización de nuestra actividad empresarial y prestigiar la marca Galicia y la marca España», lo cual se logra, a su juicio, «a base de la cultura del trabajo y de la calidad de nuestros productos, planificando el futuro de nuestra sociedad a partir de la educación y la formación».

Formación

Defendía así el papel del binomio Universidad-Empresa, convencido de que «deben ir de la mano para adecuar la preparación de nuestros jóvenes a las necesidades del mañana de nuestras empresas».

Esto lo llevaba a reivindicar más inversión en I+D+i, tratando de «convertir nuestras facultades de Ingeniería en auténticos laboratorios tecnológicos que eviten la llamada fuga de cerebros hacia la emigración».

Andrés Quintá incluso animaba entonces a los demás empresarios a «asistir a ferias internacionales, muestras tecnológicas, simposios formativos y centros expositivos de interés mundial». Es decir, a «salir, ver mundo y conocer lo que hacen otros para inspirarnos en ellos y superarlos».


Reclamaciones ante Feijóo

En aquella ocasión Quintá también reclamó a Feijóo medidas de apoyo a los emprendedores y la concesión de premios a la exportación. Además de quejarse de las «enormes cargas fiscales y burocráticas que asfixian a empresarios y trabajadores».

Por todas estas razones, y muchas más, Andrés Quintá es un empresario de éxito cuyo estado de salud preocupa a muchos ciudadanos.

Por el momento, lo que sostienen en la propia empresa y en el Concello de Valga es que está estable, dentro de la gravedad de la situación.

Faro de Vigo

Murió «Baleirón».

A los 69 años de edad falleció en el día de ayer, José Manuel Suárez Baleirón, vecino de Pontecesures que estaba casado con Mª Carmen Silva López.

Sus restos mortales recibieron sepultura esta mañana en el Cementerio Parroquial de Santa Columba de Cordeiro.

Descanse en paz.

Valga, el lugar en el que no hay «nin un metro» de suelo industrial libre.

Una vez al año, convocados por el Concello, los empresarios afincados en la localidad del Baixo Ulla comparten mesa y mantel.

Una vez al año, convocados por el Concello, los empresarios afincados en Valga comparten mesa y mantel. Y de paso, impresiones, problemas, experiencias… La reunión anual tuvo lugar el lunes. Y esta vez, tras varios años de ausencia, el presidente de la Xunta Alberto Núñez Feijoo acudió a la cita. Era, señaló él mismo, casi una deuda pendiente que ha querido saldar.

La visita de Feijoo no fue desaprovechada ni por los empresarios de Valga ni por el alcalde de esta localidad, que expusieron al máximo responsable del gobierno gallego sus reivindicaciones, que son muchas y variadas. El alcalde, José María Bello Maneiro, se encargó de poner sobre la mesa una realidad que hace del municipio, casi casi, una excepción en el conjunto de Galicia: «Non dispomos dun metro cadrado de terreo industrial público e as empresas demandan solo», dijo. El municipio está perdiendo la oportunidad de fijar industria por esa carencia, y por esa razón reclamó al presidente de la Xunta «un esforzo para que poidamos contar con solo empresarial, porque o polígono industrial é básico para nós». Y ese «nós», recordó, hace referencia a un municipio que presume de ser «unha potencia industrial», un puesto en el que se quiere afianzar.

Núñez Feijoo reconoció que en Valga, efectivamente, hace falta suelo para favorecer la instalación de empresas. Y se lamentó de que, en su momento, se ubicasen polígonos en lugares en los que no existía esa demanda, y que siguen hoy en día vacíos. A los empresarios reunidos a su alrededor les reconoció ser «a chave deste concello» y les agradeció, especialmente, «o voso traballo e os empregos que dades».

Como portavoz de esos empresarios tomó la palabra Andrés Quintá, el veterano fundador de Extrugasa. Quintá recomendó a los políticos presentes en la reunión -estaban también los conselleiros de Industria y Medio Rural- que echasen un vistazo a lo que se está haciendo en otros lugares. Puso especial énfasis en Portugal, «un centro de captación de empresas a menos de hora y media de nosotros, con una oferta de polígonos con servicios de logística, energía, extensión de terreno y sin trabas burocráticas». Aquí, sin embargo, quedan muchas cosas que hacer. A nivel global, por ejemplo, mejorar la educación y la formación, convirtiendo las facultades «en auténticos laboratorios tecnológicos» y formando «mano de obra cualificada que dé respuesta a las demandas de nuestras fábricas». Apoyar a los emprendedores y aliviar «las enormes cargas fiscales y burocráticas» son otras necesidades que afectan a todo el empresariado gallego. Pero hay otras demandas con claro sabor local. Es el caso, por ejemplo, de la reivindicación de un apeadero del tren entre Campaña y Cordeiro, que «representaría una notable utilidad y rentabilidad por la reducción de costes de desplazamiento de sus mercancías a los principales puertos gallegos».

La Voz de Galicia

El empresariado y el gobierno de Valga reclaman a Núñez Feijóo más suelo público en el polígono.

El presidente de la Xunta acudió a la tradicional comida de San Blas acompañado por dos conselleiros.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, compartió el lunes una comida con los empresarios de Valga y el alcalde del municipio, José María Bello Maneiro, en un acto celebrado con motivo de las fiestas de San Blas. El máximo representante del municipio no dejó escapar la ocasión para reclamar una serie de mejoras, especialmente relacionadas con el sector emprendedor.

Así, Bello Maneiro recalcó que el polígono “é de suma importancia par Valga”. Y es que “en pouco máis dun kilómetro cadrado hai máis de 1.500 postos de traballo”, dijo el regidor conservador, que definió orgulloso al municipio como una “potencia empresarial”. Pesen a ello “non dispoñemos dun metro cadrado de terreo industrial público e as empresas demandan solo”. Lamenta, en este sentido, que en los últimos tiempos varias firmas marcharon de Valga “por falta de terreo”.

Por ello, reclamó a Núñez Feijóo “un pequeno esforzo” para dotar de suelo empresarial al polígono. El presidente no fue el único representante de la Xunta en la comida que tuvo lugar en el restaurante Couceiro. También asistió el conselleiro de Industria, Francisco Conde, el de Medio Rural, José González Vázquez, y varios cargos autonómicos.

Feijóo reconoció su deuda con los empresarios valgueses por no haber podido asistir en las ediciones anteriores y aseguró que, a día de hoy, “a economía galega está máis forte que nos últimos anos”. En cuanto a las perspectivas futuras, destacó que pasan por la “internacionalización e o aumento das exportaciones”. La falta de suelo industrial es, según el presidente de la Xunta, “un problema de primer orde en Valga” y puso en valor las medidas puestas en marcha por su gabinete para hacer más accesible el parque empresarial.

El alcalde, por su parte, destacó la importancia para el municipio de los empresarios a los que pidió que, “na medida do posible”, contraten a “xente da vila”.

Bello Maneiro también reclamó que se agilicen las concentraciones parcelarias en Martores, Vilares y Laceiras y destacó a Valga como el concello que tiene las tasas e impuestos “máis baixos” de toda la provincia. “Sen vos Valga non sería o que é”, dijo el alcalde a los empresarios, sobre los que Núñez Feijóo aseguró que “sodes a clave deste concello” y se mostro agradecido por su trabajo y “os empregos que dades”.

Un apeadero

Por parte del empresariado local, tomó la palabra el presidente de Extrugasa, Andrés Quintá que, en términos generales, hizo un llamamiento para convertir las escuelas de ingeniería en “auténticos laboratorios tecnológicos” para evitar así, dijo, la “fuga de cerebros”. Además, solicitó más apoyo por parte de las administraciones para los emprendedores y ayudas a la exportación. En el ámbito local, defendió la construcción de un apeadero en la zona industrial entre Campaña y Cordeiro lo que, dijo, sería un beneficio social para “muchas familias” y permitiría reducir los costes de transporte a los puertos.

Diario de Arousa