La caída de un tejado en una edificación del ADIF causa problemas en la estación de FFCC de Pontecesures.

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Las fuertes lluvias de estos días y la falta de mantenimiento motivaron el derribo de una parte del tejado de una edificación de ADIF adosada al edificio principal de la estación de FFCC de Pontecesures donde se encuentran diversos dispositivos y maquinaria relativa a la circulación de los trenes.

La desagradable incidencia incidió negativamente en el alumbrado de los andenes y de la marquesina principal que estuvieron desactivados algún tiempo. Personal dependiente del ADIF instaló unos plásticos para la protección de las instalaciones y se reparó, en lo posible, la avería del alumbrado público. Al parecer, en breve se repondrá la cubierta.

Todo lo ocurrido tiene que ver con el desmantelamiento paulatino de las estaciones de ferrocarril en estos pequeños pueblos desde hace muchos años al decidirse el cierre de las mismas. Parece que solo interesa la inversión grandilocuente, la modernidad mal entendida y la población de los grandes municipios, dejando a las pequeñas villas y a los viajeros de esta comarca abandonadas a su suerte.

Desde ACP esperamos que la cubierta sea reparada con toda urgencia. Apostamos por el tren de proximidad y por la permanencia de la vía convencional una vez entre en servicio la de alta velocidad y por eso incentivamos el uso del tren repartiendo horarios, velando por las instalaciones, denunciando las deficiencias, etc…. Sería un desaatre para toda esta zona que supriman el servicio de ferrocarril con el que contamos desde hace más de 100 años.

Pontecesures, 22/12/12

Luis Ángel Sabariz Rolán
Concejal de ACP Pontecesures

La «Sarita», primera máquina de vapor de Santiago a Carril.

sarita

La locomotora se oxida frente a la casa fundación Camilo José Cela, en la vecina Iria Flavia

La «Sarita» era una pequeña máquina de tren, a la que los portugueses llamaban cariñosamente «ratinha», que el presidente de la Compañía dos Caminhos de Ferro Portugueses Beira Alta, José María Abalo Sousa mandó traer desde Inglaterra procedente de la compañía inglesa Hunsslet para dedicarla a la construcción de las vías del ferrocarril. Con el paso de los años, la compañía inglesa construyó más de 2.200 de vapor, y más de 19.000 entre vapor, diésel y eléctricas abasteciendo a todos los continentes. La «ratinha» hizo el recorrido Santiago a Carril.

VÍCTOR VIANA La locomotora había sido fabricada en Leeds en la poderosa fábrica «Hunslet Engine Co» y entregada a los «Caminhos de Ferro de Beira Alta» en 1980 con los datos de fábrica 030-0201. Tipo 030ST. Hunslet/243/1880 según los datos de historiador del ferrocarril Mariano Orozco. Estaba dotada de gran separación de ejes y los tanques de agua montados sobre el lomo de la caldera, según el citado estudioso.

Se trataba pues de una bien acreditada fábrica a quien nuestro futuro paisano les pidiera una pequeña «Saddle-Tank» dedicada en principio a la construcción del ferrocarril de Beira Alta que finalmente uniría Figueira da Foz con la estación fronteriza de Vilar Formoso con un total de 252 kilómetros y 522 metros de trazado, cuando esta fue finalizada en el año 1882. En la práctica serviría para comunicar gran parte del norte de Portugal con la vecina España.

Como realmente el servicio de la futura Sarita no era de línea regular, los portugueses no le dieron un nombre y tendría que esperar a pertenecer al «The West Galicia Railway Company» mas conocido en Galicia como el ferrocarril de Santiago de Compostela a Carril, para que sus cariñosos viajeros le pusiera el nombre de «Sarita».

Cuando en 1886 José María Abalo y Sousa regaló (o vendió a bajo precio según los portugueses) la «ratinha» portuguesa a su amigo John Trulock a la sazón poderoso gerente de la compañía gallega del ferrocarril, por presión del abuelo de Camilo José de Cela, había salido una Real Orden según la cual, la compañía inglesa «The Coruña, Santiago and Peninsular Railway Company Limited», sustituía a la anterior compañía del «Ferrocarril Compostelano de Santiago a Carril», en todos sus derechos y obligaciones, con domicilio social en Londres, con un Consejo de Administración formado exclusivamente por ingleses.

Sea regalada o bien fuera vendida la locomotora por Jose María Abalo a John Trulock, lo que si se sabe es que se devolvió al gran favor que el inglés había hecho al por entonces presidente de la compañía Beira Alta ante la financiera «Credit Company» que participaba en la «Societé Financiere de Paris, que fue la compañía que inicialmente había sido la encargada de la construcción de los ferrocarriles de Beira Alta en 1878 y que presidía Abalo y Sousa (los problemas económicos no eran exclusivos de la compañía gallega).

Según los datos de Cavanna Benet, la ya bautizada con el nombre de «Sarita», tenía un peso de 19.810 kilos. Y desarrollaba una potencia de 211 CV, y «conforme a la costumbre de la época de fabricar al menos dos locomotoras de cada pedido para garantizar los recambios, con la 243 se construyó otra locomotora gemela, la nº 242 de nombre «Nene», que fue suministrada a un contratista inglés de ingeniería de caminos».

Aunque organizativamente la nueva locomotora fue llamada «Sar» por estar adscrita a la línea de Santiago-Pontevedra por la que transcurría parte del recorrido de dicho río, en la realidad la maquina estaba al servicio directo de Trulock que la usaría para sus continuos desplazamientos por la línea, razón por la cual los empleados la llamaban la «máquina do xerente». No resulta extraño que con la habitual habilidad de los vilagarcianos para humanizar los objetos agradables, pasaran a llamarla «Sarita».

El problema que se planteaba tras el regalo de la maquina era ¿quien seria su conductor?

Mr. Trulock decidió que fuera Francisco Porto Codesido, al que hubo que enviar a Inglaterra para que aprendiera y familiarizara con el manejo de la pequeña locomotora.

Tan formado regresó Porto de sus estudios en Gran Bretaña, que no solamente hablaba inglés a la perfección sino que hasta exigía tomar el té a las cinco de las tarde.

Supo aprovechar bien sus ganancias edificando una casa y abriendo una fonda en la misma en el camino de Vilagarcía a Carril.

Risuroso y cumplidor en extremo, cuenta Manolo Suarez – la persona que sin duda alguna más sabe sobre el ferrocarril gallego -, «que en todas las estaciones del recorrido ordenó colocar unos carteles con las frases: «Los que llegan retrasados al trabajo siempre son los mismos», «Un sitio para cada cosa, cada cosa en su sitio», «Las máquinas poco limpias solo se prestan a personas sucias», «La puntualidad es una gran virtud en las personas».

Hasta el final de su vida se impregnó de ferrocarril ya que en sus últimos años vendía billetes en la estación de Vilagarcia de Arousa.

En cuanto a la «Sarita», tras la muerte de Trulock en el año 1919, quedó en el servicio de maniobras, siempre con base en la estación de Carril.

De acuerdo siempre con los datos de Tomás Cavanna, «primero con The West Galicia y, a partir de 1928 con la Compañía del Oeste, sirvió en este trayecto entre Santiago y Pontevedra, mientras que desde 1941, ya con Renfe, estuvo como máquina de maniobras y cocheras en el muelle de Vigo» y hasta se usó «para impulsar la polea que movía el árbol de transmisión de los talleres, para lo cual se la elevaba sobre unos soportes de madera construidos a tal efecto».

Desde el año 1941 se le incluyó para formar parte del Museo del Ferrocarril, aunque siguió sirviendo para múltiples funciones.

En 1948 formó parte de la exposición ferroviaria conmemorativa del Centenario del Ferrocarril en España, y en 1968 y por sus propios medios acudió a una feria de muestras que se celebró en Vilagarcia.

Este viaje entre Vigo y Vilagarcía sería el último que pudo hacer por si misma, y en 1975 fue elegida entre todas las locomotoras antiguas para formar parte del Museo del Ferrocarril, lugar al que llegó definitivamente en 1979 (extraños problemas burocráticos la mantuvieron en Valladolid varios años).

Desde la inauguración del citado Museo del Ferrocarril en 1980 pudo verse en Madrid, aunque la historia quiso que tampoco aquí fuera su destino definitivo, ya que en 1990, y tras una reparación adecuada, fue enviada «en depósito» a la Casa Fundación Camilo José de Cela en Iria Flavia.

Desde entonces, el deterioro metálico de la «Sarita» ha ido en aumento por estar expuesta a los elementos sin más. Por eso, el año 2007 la Fundación Cela hizo una petición de 31.900 euros a la Consellería de Política Territorial de la Xunta de Galicia para hacer reparaciones imprescindibles en la locomotora «Sarita», y en octubre de 2008 un informe de dicha Fundación anunciaba de nuevo el deterioro de la pequeña locomotora, a la vez que solicitaba que se declarara a la «Sarita», como Bien de Interés Cultural.

Recientemente Manolo Morales, como representante de la Asociación por la Recuperación del Patrimonio de Vilagarcía ha solicitado al presidente de la Xunta de Galicia el traslado de la «Sarita» al que podría ser su sede definitiva, el Museo del Ferrocarril de Vilagarcía de Arousa.

Lo curioso de esta petición en pro del Museo del Ferrocarril de Vilagarcía es que el asunto debería ya haberse solucionado hace muchos años de haberse hecho realidad lo dicho por el periódico ABC el 31 de octubre del año 1965 :»La popular locomotora Sarita que acaba de cumplir, en buen estado de conservación y rendimiento, 85 años de vida muy activa, va a ser conservada en Vilagarcía de Arosa como pieza museo que evoque el más antiguo ferrocarril de Galicia. La Sarita merece este nombre por su marca de fábrica».

FARO DE VIGO, 16/12/12

Queixas dos condutores dos vehículos que baixan para o Cagaxol pola pista recentemente pavimentada.

Hai uns días executouse en Pontecesures a obra de Medio Rual de pavimentación da rúa do Campo ata a rúa Calera. Pois ben; dende o campo de fútbol «Ramón Diéguez» ata o Cagaxol (xa preto do paso a nivel do ferrocarril Porto-Devesa) a baixada é moi pronunciada. Precisamente na intersección da pista asfaltada coa que vai dende o paso a nivel para a Devesa (Valga), quedou un problema importante. A nova capa de rodadura motiva que os vehículos que baixan contacten en ocasións coas súas defensas no chan.

Dende ACP solicitamos ao goberno local que se realicen xestións urxentes para solucionar esta deficiencia advertindo mentres desta circunstancia mediante a oportuna sinalización na zona.

La ACP reparte los nuevos horarios del tren por los establecimientos.

El pasado 12 de noviembre, Renfe Comercial emitió de nuevo los horarios vigentes a partir de esa fecha en los que hay muy pocas variaciones. En concreto a Pontecesures solo le afecta el cambio de horario del último tren procedente de A Coruña y Santiago, que llega a las 22:04 horas, en lugar de a las 21:49 como se anunció hace unos días.

Como en anteriores ocasiones, la ACP comenzó a repartir en estos días los horarios en los establecimientos de la villa. Además del interés en informar a la ciudadanía, se quiere potenciar, como se hizo siempre, el uso del ferrocarril en Pontecesures y comarca. El interés que nos mueve es que cada vez haya más usuarios con el fin de que continuemos con el servicio por la vía convencional cuando entre en funcionamiento la Alta Velocidad. Sería una pérdida enorme que nos quedemos sin un dervicio cada vez más utilizado y queremos aportar todo nuestro esfuerzo para que eso no ocurra.

Pontecesures, 21/11/12

Luis Ángel Sabariz Rolán
ACP Pontecesures

El BNG de Catoira intenta reactivar la lucha en defensa del tren de cercanías.

El BNG de Catoira insiste en una vieja reivindicación, como es garantizar el servicio de cercanías incluso después de que el Eje Atlántico implante de manera definitiva el Tren de Alta Velocidad (TAV), para el que, por cierto, continúan las obras a un ritmo francamente llamativo en la propia localidad catoirense.

Desde las filas nacionalistas, militantes históricos como José Ramiro Paz Tarrío, que también forman parte de la plataforma en defensa del tren de cercanías, consideran que no es momento de «dormirse» ni de cesar en el empeño, por eso anima a sus convecinos a seguir «luchando» para que la línea férrea actual no desaparezca.

Ramiro Paz aprovecha para arremeter contra el PSOE y el PP, al tiempo que critica las obras que se ejecutan en la actualidad, ya que el nuevo viaducto que se construye sobre el Ulla va a dejar «encerradas» a las Torres do Oeste, ya que van a tener ese puente por la cara sur, mientras que por la norte ya se sitúa el que sustenta la carretera interprovincial Catoira-Rianxo.

En relación con esas obras para el TAV, ya se explicó hace unas semanas que empezaron los trabajos para colocar la estructura que va a situarse a 60 metros de altura sobre el cauce fluvial.

Se trata de unos trabajos tan lentos como laboriosos y espectaculares, de ahí que sean muchos los conductores y los usuarios del ferrocarril que al pasar por esa zona se sorprenden con tales sobras.

Hay que indicar que la estructura de hierro empezó a colocarse desde el lado catoirense, a la altura de la laguna de Pedras Miúdas, y ya es fácilmente apreciable desde la carretera Pontecesures-Vilagarcía, puesto que esas vías «aéreas» del TAV van a pasar sobre ella.

Evidentemente, el sistema que se emplea ahora nada tiene que ver con aquel otro al que alude Ramiro Paz cuando explica que «Catoira tiene tren desde hace 139 años, siendo hasta los años setenta del siglo pasado el medio de transporte de pasajeros y de mercancías más utilizado e importante». Por aquel entonces la estación de Catoira «era el centro neurálgico» del pueblo. En el BNG quieren evitar que desaparezca para siempre.

FARO DE VIGO, 04/11/12

Inquedanza na ACP ante a posibilidade de que ADIF peche os terreos de aparcadoiro na estación.

Escrito solicitando a intervención da Xunta de Galicia diante do ADIF:

«Sr. D. Miguel Rodríguez Bugarín.
Director Xeral de Mobilildade da Xunta de Galicia.

Nestes días procedeuse por parte de ADIF a trazar unhas liñas provisorias no chan no límite dos terreos que ten o administrador ferroviario na Estación de FF.CC de Pontecesures. Ao parecer, pretèndese construir un cerre de obra por eses límites e iso constituiría un desastre para o cada vez maior número de usuarios do ferrocarril que deixan o seu vehículo nesa zona para utilizar o tren na nosa estación. ? unha zona de aparcadoiro fundamental se estamos a falar de estacionamentos disuasorios para fomentar o uso do transporte publico.

Pechar a zona sería un duro golpe para o tren de proximidade que vai gañando usuarios día tras día en Pontecesures e comarca. Sería ademais totalmente innecesaria esta obra na antiga zona de praia ou de carga e descarga da estación pois o ADIF o que podería facer é marcar con sinalización horizontal os seus terreos para coñecemento xeral. Por certo, temos información da posibilidade de que haxa unha magnífica nova para esta vila, pois, ao parecer hai empresas interesadas en utilizar a estación para carga e descarga de mercadorías por ferrocarril o que dinamizaría a noso municipio dende o punto de vista económico, pero iso non xustificaría un cerre dun espazo tran grande. Entenderíamos unha sinalización horizontal ou vertical limitando certos usos en determinados puntos pero nunca un muro perimetral que dificultaría, ademais, a circulación de vehículos ata novas rúas que se están a abrir.

Xa hai uns tres anos o ADIF barallou a posibilidade de construir o cerre pero este grupo logrou convencelos do negativo que sería iso para os usuarios do tren e para toda esta vila e así pavimentáronse os terreos (foi unha actuación moi valorada por todos) pero non se pecharon.

Polo exposto, prégolle unha vez máis a vostede que faga as xestións oportunas co ADIF ata conquerir que siga completamente aberta a zona en cuestión.

Pontecesures, 11/10/12

Luis Ángel Sabariz Rolán
Concelleiro da ACP de Pontecesures»