La Plazuela se llenó de gente para celebrar San Xulián
Pontecesures merendó este domingo a lo grande. Entre 28.000 y 30.000 churros se sirvieron en la Festa do Churro que se celebró esta tarde por el día del patrón, según los datos facilitados por la alcaldesa, Maite Tocino, que no dejó de acudir a una fiesta a la que parece haberle sentado bien el invierno. En ediciones anteriores se ralizaba en verano, pero el gobierno local consideró oportuno moverla en el calendario, y parece que acertó. La Plazuela se llenó de gente para disfrutar de la fritura dulce salida de diez puestos, de la chocolatada, también gentiliza del Concello, y para disfrutar de la música del dúo Nueva Era.
Por la mañana actuaron los grupos Algueirada y Xarandeira y se celebró misa con la Coral polifónica A Barcarola.
Hinchables y talleres. En el exterior del Belén Artesanal de Valga se montará una fiesta partir de las cinco de la tarde con hinchables y obradoiros y reparto de chocolate con churros gratis para amenizar la espera de los Reyes. A las seis serán recibidos por el alcalde y se hará la entrega de los premios del XXII Concurso de Beléns. Después, los niños podrán saludar a Melchor, Gaspar y Baltasar, que les entregarán un pequeño detalle.
Los valeiros largaron esta mañana las nasas en la zona de Pontecesures en busca de las primeras lampreas en el río Ulla. Tras una primera jornada marcada por el mal tiempo, que impidió a las embarcaciones abrir la campaña, el sector espera en la próxima joranda poder extraer las primeras capturas de un cotizado y prehistórico pescado.
De hecho, la primera pieza suele ser muy bien pagada por los restaurantes de la zona. El paso de los días determinará si se cumple lo previsto y si este año se puede mejorar las anteriores campañas, en las que no abundó la pesca de la Raíña del Ulla, que cuenta con su propia fiesta gastronómica en el municipio.
Los Reyes Magos de Oriente llegarán este viernes a la comarca del Ulla-Umia. En el caso de Valga, Melchor, Gaspar y Baltasar tienen previsto realizar la tradicional recepción en los exteriores del Belén Artesanal de Campaña. Así, para amenizar la espera, el Concello ha diseñado una intensa programación para que los niños puedan disfrutar de diferentes actividades infantiles durante toda la jornada.
Así, a partir de las 17 horas, la carpa acogerá una gran fiesta infantil con obradoiros, música e hinchables para que los niños puedan divertirse. Además, habrá chocolate con churros gratis para todos los que se acerquen a recibir a Sus Majestades.
La llegada de la comitiva real está prevista para las 18 horas, aproximadamente, y el alcalde, José María Bello Maneiro, será el encargado de darles la bienvenida. Tras este acto inicial, se entregarán los premios del XXII Concurso de Beléns y, a su conclusión, los niños podrán saludar a los Reyes, que realizarán un pequeño regalo como anticipo de los que recibirán en sus hogares en la mañana del 6 de enero.
Los barrios de Carreiras, A Toxa y Condide, en Pontecesures, celebrarán en enero los festejos en honor a A Raíña dos Anxos, que tendrá lugar el sábado 13 de enero, una semana después de la Festa do Churro, según reveló por Nochebuena la comisión de fiestas “Carreiras” a través de sus redes sociales.
La programación arrancará a mediodía, con música cantada por la coral A Barcarola, tras la que habrá procesión. A continuación, arrancará la sesión vermú, a cargo de Unión y Fuerza, donde tendrá lugar la tradicional Poxa de Ramos. Por la tarde, habrá una fiesta infantil con hinchables para los niños y pasacalles con la Banda de Música de Valga. La verbena se iniciará a las 22 horas y estará protagonizada por las orquestas Marbella y Unión y Fuerza. Además, a medianoche no faltará el chocolate con churros.
La cena y baile en el hotel Scala reunió a unas 140 personas y hubo algún primer beso, pero Cupido anduvo remolón ayer por la noche
David González Maceira fue uno de los solteros que ayer acudió a la segunda edición de La Gran Feria del Amor, celebrada en Padrón. Él ya había participado en la primera fiesta, organizada esta primavera en Celanova. En aquella ocasión sí conoció a alguien especial y, aunque en la capital del Sar no tuvo la misma suerte, regresó a casa con el teléfono de una mujer y dice que él repetiría la experiencia: «Yo se lo recomiendo a todo el mundo. Para mí esta es la mejor manera de conocer gente, en persona. En Tinder no sabes quién hay detrás de un perfil. Aquí, sin embargo, la ves cara a cara, habláis y sabéis si encajáis». Destaca el estradense, además, que es una oportunidad ya no solo para encontrar pareja sino también para conocer a gente de otros sitios, incluso de fuera de Galicia. Repetidores que hubieran estado en las dos ediciones había pocos, media docena calcula este soltero, quien explica que se lleva más de una amistad de Padrón y ya ha quedado con un grupo para ir a cenar un día por Muxía. «Deberían hacer esto en todas las provincias», subraya.
En general, la noche de ayer en el hotel Scala podría resumirse en que hubo mucha fiesta y poco enamoramiento. Cupido anduvo remolón en la cena y baile posterior, confirman los organizadores. A pesar de que se materializó algún primer beso entre los cerca de 140 solteros que acudieron a esta fiesta para singles, se quedaron muy lejos de cumplir el objetivo inicial de reunir a medio millar de personas y formar al menos 70 parejas. Eso sí, la diversión no faltó.
Hay quien ni siquiera pudo saltar al terreno de juego y tuvo que darse de baja a última hora. El covid se interpuso en lo que podría haber sido su «gran noche», como cantaba Raphael. Tampoco pudo descubrir el «qué pasará» ni «qué misterio habrá» alguno por una recomendación médica de lo más insólita, cuenta Julio Gosende, uno de los impulsores de la iniciativa: «El doctor le dijo que si venía podía recaer en el tabaco». En cambio, otros que no tenían pensado asistir, se apuntaron sobre la marcha, como sucedió con dos castellanoleoneses que estaban alojados en el hotel padronés y se enteraron ese mismo día de que allí se iba a celebrar La Gran Feria del Amor.
A las siete de la tarde ya estaban los más madrugadores en la cafetería del hotel haciendo los primeros contactos. En esta ocasión asistieron más hombres que mujeres, al contrario de lo que sucedió en la primera edición de la fiesta en Celanova, y la media de edad anduvo entre los 40 y los 60 años. Constata David que el porcentaje jugó en contra de ellos anoche: «Habría unas 30 o 40 mujeres nada más».
«Hubo mucho sanitario y médico, o al menos eso decían ellos», comenta Gosende con suspicacia. En general, costó romper el hielo al principio, pero la cena ayudó a sacudir la vergüenza inicial y la música se alargó en el salón del hotel hasta las tres y media de la madrugada. Tras las últimas congas, bengalas y baladas, que sirvieron para acortar un poco más las distancias, el baile se despidió con un clásico de Los Suaves, Dolores se llamaba Lola. Fue el momento en el que algunos dieron la noche por acabada y se enfrentaron a la pregunta del millón que sonó con los últimos acordes: «¿Dónde vas triste de ti?». Hubo quien cogió el coche de regreso a su casa, como David, aunque la mayoría de los asistentes tenía una habitación reservada en el propio establecimiento, al acudir desde otros concellos más alejados. Pero no todos se fueron a dormir a esa hora.
Al día siguiente, de paseo por Padrón
«Yo me acosté a las cuatro y media de la mañana», cuenta Darío, un autónomo de Celanova de 55 años que no asistió a la primera edición de La Gran Feria del Amor en su localidad y sí a la de este fin de semana en la capital del Sar. Acudió solo y esta mañana relataba, acompañado por cuatro de las solteras que conoció en la fiesta (tres de Pontevedra y una de A Coruña) mientras visitaban los puestos del mercadillo padronés, que «se creó muy buen rollo en muy poquito tiempo y un ambiente muy bonito».
Él fue buscando «conocer gente y pasárselo bien» y acabó conectando con una pontevedresa que se sentó en su misma mesa durante la cena, quien asistió con dos amigas. «Esto es una ruleta rusa, como la vida misma. Tanto puede cuajar como no», indica Darío. Divorciado hace ocho años, explica que a estas alturas de la vida ya no espera «luces de colores», pero sí encontrar a «una persona con la que pueda hablar y tenga cada uno su espacio». Sobre la mujer con la que conectó en el hotel Scala, destaca que tenían muchas cosas en común: «Yo viví 25 años en Pontevedra, por ejemplo. Era una chica muy agradable. Bailamos, saltamos y reímos». Lo que vaya a durar su historia, el tiempo lo dirá. De entrada, el grupo se intercambió los teléfonos porque decidieron comprar un décimo de Lotería entre los cinco para comprobar si son tan afortunados en el juego como en los amores.
Todos ellos también repetirían la experiencia sin dudarlo. De hecho, los organizadores de La Gran Feria del Amor confirman que los solteros ya le han pedido una tercera edición en diciembre. No les parece esta mejor fecha, pero sí se celebrará. Entre las sugerencias que lanzan los participantes, está que en vez de una sean dos noches en un hotel, ya que así tendrían «más tiempo para conocer mejor a otras personas, convivir y compartir más experiencias».