El mercadillo y el San Xulián son algunos de los temas que centran la atención de gobierno local y oposición.
Va a ser cierto eso de que las redes sociales lo están cambiando todo. Si es que no lo han cambiado ya. Al menos, si hablamos de comunicación. Los debates se han trasladado de la calle a Twitter. De los plenos a Facebook. La opinión, las quejas, los dardos o lo que cuadre llegan así de forma directa a su receptor. O, mejor, receptores: el objetivo acostumbra a ser que alcancen a cuantas más personas mejor. En esta comunicación paralela se han sumergido las fuerzas políticas de Pontecesures, que mantienen estos días muy activas sus redes para valorar lo que se está haciendo desde el Concello. Lo que se está haciendo bien, si hablamos del gobierno local; lo que se está haciendo mal, si es la oposición quien escribe.
Los puntos de discordia son variados. La programación de Navidad es una de las cuestiones que PSOE y BNG coinciden en calificar como la peor de los últimos años. Si los socialistas aseguran que «parecía imposible organizar as festas do Nadal deste ano peor que as do ano pasado, pero, unha vez máis, o goberno de Pontecesures volveunos a sorprender»; los nacionalistas hablan de programación navideña «por dicir algo». Lamentan, así, que se suspendiesen actividades como talleres y cine «sen que fosen trocadas por outras novas».
La valoración sobre los preparativos de la festividad del San Xulián no es mucho mejor. La principal crítica: la falta de acompañamiento musical a la procesión que desfiló hasta la iglesia parroquial. Las quejas van más allá. Desde el PSOE piden disculpas por llegar tarde a la misa porque «na notificación enviada polo Concello figuraba outra hora». Fiestas al margen, el cambio en la ubicación del mercadillo mensual y los cortes de luz en la calle Ullán ocupan buena parte de las críticas. Unas críticas de las que el alcalde, Juan Manuel Vidal Seage, no tardó en defender la gestión del equipo que capitanea.
La respuesta
Punto a punto, Vidal Seage responde también en la redes a los comentarios y concluye que «neste absurdo ó que nos teñen xa acostumados os portavoces da oposición, é como veñen afirmando coa mesma elocuencia unha cousa… e ó pouco a contraria». Los distintos puntos de vista quedan así sobre los tablones de perfil para quienes quieran recogerlos. Dichas las cosas al ciudadano, al vecino, queda otra parte imprescindible que no se puede conseguir a través de las redes sociales: consensuar y acercar posturas para que no existan tales discrepancias.
La Voz de Galicia