El gobierno
tripartito de Pontecesures se dispone a mejorar las redes de saneamiento
y abastecimiento de la localidad. Lo hace con cargo al Plan Concellos de la Diputación y con una inversión prevista de casi 34.000 euros que se destinará a calles como Carlos Maside y Ullán.
En
el gobierno de Juan Manuel Vidal Seage indican que la primera de ellas
tiene una red de saneamiento que presenta problemas de capacidad,
mientras en el abastecimiento de Rúa Ullán se producen constantes
roturas.
También va a actuarse sobre la calle Borobó,. en el cruce con Camiño Infesta, donde se registran también importantes roturas «y es necesario iniciar un ramal de pluviales». Asimismo, en la avenida de Vigo -cruce con Rúa Ullán- van a corregirse las roturas en la tubería de abastecimiento que suelen inundar la zona baja de un edificio.
Padrón y Pontecesures, municipios limítrofes entre
las provincias de A Coruña y Pontevedra, están pendientes del
levantamiento de restricciones para que sus vecinos puedan moverse
libremente de un lado a otro del puente sobre el río Ulla, como hacen de
toda la vida. Son muchos los de Pontecesures, e incluso Valga, que se
desplazan a la capital del Sar a realizar gestiones, desde comprar en
los establecimientos comerciales locales hasta ir al banco, dentista o
notario, entre muchas otras. Y también desde Padrón se mueven al otro
lado del río para hacer compras en la localidad de Cesures.
Cuando quede sin efecto esa restricción de moverse entre provincias, sea primero o no entre municipios limítrofes, «vai ser un alivio moi grande», según opina María del Carmen Magán Pérez, vecina de 47 años de la aldea de Infesta, en Pontecesures. «Non ten ningún sentido o que está pasando», añade. «Eu podo ir a Tui, pero non podo ir a Pazos, en Padrón, que está ao lado, a ver a meu pai», lamenta.
Controles policiales
En
su caso, habitualmente se desplaza a Padrón a comprar en la plaza de
abastos y en tiendas del pueblo, pero también va al dentista y al
fisioterapeuta. «Pese a estar todo a un paso, non podo ir nin a comprar nin a ver a familiares»,
cuenta. Lo mismo le pasa y le seguirá pasando a su hermano mientras no
se levante la restricción de moverse entre provincias. Él reside en Rois
y, en todo este tiempo, no pudo ir a Cesures a ver a su madre, con la
que reside María del Carmen Magán.
«Está mal feito e será un alivio que o cambien», asegura la vecina de Pontecesures, que está deseando poder ir a Padrón sin problemas, como muchos otros vecinos.
En
su caso, también acaba de acompañar a su hijo a recoger sus
pertenencias en la residencia universitaria de A Coruña, ciudad en la
que estudia, para lo que se movió con un justificante.
La vecina también está yendo con su madre una vez al mes a una consulta médica en Santiago, pero siempre con justificante e «así vas máis tranquila»,
dice María del Carmen Magán, que recuerda que levantar la prohibición
de cambiar de provincia en municipios limítrofes será necesario para que
los jóvenes de Pontecesures y Valga que estudian en Padrón puedan
acudir mañana al instituto, en el caso de los cursos que están
autorizados.
Durante el tiempo de prohibición de cambiar de
provincia, el puente de Cesures está siendo objeto de controles
policiales, en los que se está parando a conductores y preguntándoles el
motivo del desplazamiento.
El BNG pidió en Madrid que esa limitación de movimientos se levantara ya en municipios limítrofes de distintas provincias, algo que también tiene solicitado el Concello de Padrón.
Aos 92 anos de idade, finou o veciño de Infesta José Manuel Castro Amoedo, casado con Manuela Barreiro Castiñeiras e pai da excaldesa, Maribel Castro Barreiro.
O velorio está instalado no Tanatorio Iria Flavia de Padrón. Maña luns 24 de febreiro. ás 17 horas, terá lugar o funeral na Igrexa de Pontecesures. De seguido os restos mortais recibirán sepultura no Cemiterio Parroquial de San Xulián.
El PSOE de Pontecesures denuncia la «dejadez y desidia» del gobierno tripartito de la localidad, ya que cree que esas son las razones por las que este Concello perdió más de 18.500 euros.
Los socialistas hablan, más concretamente, de 18.550.47 euros correspondientes al Plan Concellos
2017 de la Diputación de Pontevedra. Y explican que es dinero
«procedente de las bajas introducidas en las adjudicaciones de la obra
de reurbanización de un tramo de la calle Paxareira, por valor de 12.140
euros, y de reurbanización de un tramo de Infesta, que costó 21.830
euros».
Esto
supone «un total de 33.970,73 euros, de los cuales el gobierno
reinvirtió 15.420,26, destinados a la reforma del parque de Grobas».
Pero el ejecutivo local «fue incapaz de ejecutar y justificar alguna
otra obra en la que invertir los 18.550 euros restantes, por lo que ese
dinero se perdió definitivamente», lamentan los socialistas.
Terminan diciendo que «es una nueva muestra de que este gobierno sale muy caro, pues a lo que cobra se suma el hecho de que no hace nada y, además, pierde subvenciones por falta de trabajo y mala gestión, como en este caso».