Miguel García fue juzgado ayer por el accidente de tren que causó la muerte a tres personas.
El maquinista del tren que causó el accidente ferroviario que costó la vida a tres vecinos de Valga en el paso a nivel de Campaña reconoció ayer que cometió un error durante la conducción, al no percatarse de que las señales le advertían de que había un fallo de seguridad en el cruce. El acusado, Miguel García López, pidió perdón porque ??nunca fue mi intención hacer daño a esas familias?, que presenciaron entre el público, visiblemente emocionados y con lágrimas en los ojos por momentos, el juicio celebrado en el Juzado de lo Penal de Pontevedra. También el conductor del ferrocarril se mostró afectado en su declaración y, al finalizar la vista oral, salió de la sala entre lágrimas.
Antes había explicado que, al pasar el convoy sobre el pedal direccional que debe activar la bajada de las barreras, creyó percibir que la señal luminosa de la vía ??era blanca?, lo que indicaría que el paso estaba protegido. ??Creí verla así, pero a día de hoy, tras leer los informes, pude comprobar que no, que la señal debía estar apagada?. Esto significa que el cruce está desprotegido, al igual que si la señal mostrase una luz amarilla intermitente, por lo que la cabina recibió una advertencia sobre anomalías en el sistema de seguridad. Esta alerta, que es tanto luminosa, en el panel de conducción, como sonora, con un pitido prolongado, hubiera provocado una detención inmediata del tren si no se hubiese desconectado pulsando un botón. ??Yo di por sentado que la señal estaba blanca y, sin darme cuenta, de forma instintiva, le di al pulsador. No recuerdo un pitido largo, sólo oí uno muy corto y, mecánicamente, le di al botón, convencido de que el paso estaba protegido?. Ese fue, en sus propias palabras, ??el error más grande de mi vida?.
Aquel día, sobre las 13:04 horas del mediodía, el paso a nivel no estaba protegido porque se había producido una avería, según reconocieron los peritos de Renfe, ADIF y el Ministerio de Fomento, así como el encargado de las instalaciones de seguridad de la vía. El tren que había pasado antes no había activado el sistema de rearme y las barreras se quedaron bajadas durante diez minutos. Entró entonces en funcionamiento un sistema complementario de seguridad, que acciona un primer temporizador durante tres minutos y un segundo de siete. Durante este último período la señalización vertical de la vía se enciende con luz amarilla en aspa intermitente, que implica obligación de detenerse. Transcurrido ese tiempo, la señal se apagó, las barreras de Campaña volvieron a subirse y los coches comenzaron a pasar, hasta que el tren arrolló al Renault Laguna en el que viajaban José García Bejo, Jesús Martínez Senín y Roberto Martínez Ríos, que fallecieron en el acto a consecuencia del brutal impacto. En ese momento el ferrocarril circulaba a 99 kilómetros por hora.
??Si me hubiese dado cuenta? de que el paso a nivel estaba desprotegido ??tendría que haber parado. Así lo he hecho toda mi vida?, manifestó Miguel García, con 37 años de experiencia como maquinista. ??Si hubiese visto la señal en aspa, iría con la disposición de parar, pero lo que es triste es que la señal apagada no corrigiese mi fallo, que podía haberlo hecho?, añade. Y es que el acusado cree que, además de su ??fallo humano?, que reconoce, también hubo otros factores que influyeron puesto que ??no había visibilidad en el paso a nivel?, debido a la maleza y a la caseta. ??Si la hubiera yo vería que iba a cruzar un coche y me hubiera dado tiempo a frenar con urgencia. A medida que me acercaba al paso no vi nada?, y cuando se produjo el accidente dijo: ??¡un coche?? ¿Cómo es posible esto??. Entonces frenó, pero ya era tarde. Bajó a socorrer a los ocupantes del turismo, aunque ya habían fallecido.
En la vista prestó declaración el interventor del tren, Juan Carlos Manzanares, que realizó gran parte de aquel trayecto en la cabina, la que acudió para comprobar que el maquinista estaba bien tras producirse un fallo en el dispositivo de detección de ??hombre muerto?. Aseguró que el conductor ??iba atento a la circulación, en silencio? y que no le oyó ningún comentario sobre el estado de las señales. ??Aquello el accidente fue inesperado, el paso tenía que estar cerrado?, aseguró.
Prueba pericial > Los peritos de Renfe, ADIF y Fomento declararon conjuntamente y coincidieron en que la señal de paso a nivel en la vía ??no podía estar blanca?, sino que seguramente estaría apagada, indicando paso desprotegido. La conclusión de sus informes basados en los datos extraídos de las cajas negras del tren y de la caseta del paso a nivel es que ??la señal ASFA lo dio a conocer a la cabina y el conductor accionó el pulsador, desactivando el freno de emergencia. El maquinista tenía que haber reducido la velocidad y parar antes del paso a nivel para comprobar que no hay obstáculos?.
La Fiscalía solicitó para el maquinista tres años de prisión por tres delitos por imprudencia profesional grave, así como su inhabilitación para el ejercicio de la profesión por cinco años. Para las familias reclamó más de 550.000 euros en indemnizaciones, de las que debe responder subsidiariamente Renfe. La fiscal considera acreditado que ??el accidente se produjo por una negligencia del acusado, que ignoró la señal e incumplió el reglamento de circulación?. Tras escuchar las declaraciones, especialmente las de los peritos, concluye que, ??si no hubiera fallo humano, el accidente no se habría producido?.
DIARIO DE AROUSA, 24/06/10