El Concello de Padrón y la Fundación Camilo José Cela acaban de firmar el convenio anual por el que el Ayuntamiento aporta 19.200 euros a la entidad cultural de Iria-Flavia. Para ello, el alcalde de Padrón y la gerente de la fundación, Covadonga Rodríguez, mantuvieron una reunión, en la que también hablaron de la posibilidad de que el Ayuntamiento asuma la gestión del Museo Ferrocarrilero John Trulock, cerrado al público por decisión del patronato de la fundación en diciembre del 2012.
Para saber si puede o no hacerse cargo del museo, el gobierno local padronés pidió un presupuesto de los gastos que conlleva, presupuesto que asciende a unos 8.000 euros anuales, según explicó ayer el alcalde de Padrón, Antonio Fernández Angueira, sin contar el gasto en personal.
En esa cantidad se incluye la factura de luz de las instalaciones de la casa número ocho del conjunto de los canónigos, sede del museo; teléfono, alarma, limpieza, calefacción, mantenimiento del jardín, seguridad de las dependencias, incluido seguro de responsabilidad civil y de las colecciones que alberga el museo.
Esa cifra sería asumible por el Concello pero, según dijo ayer el regidor, la «maior dificultade» está en la disponibilidad de personal que se encargue de las visitas a las instalaciones culturales, añadió Antonio Fernández. Desde un principio, el gobierno local siempre dijo que, de asumir el Concello la gestión del museo, recurriría a personal propio para la reapertura.
No obstante, a día de hoy, el Ayuntamiento no dispone de empleados para dicha tarea, al tiempo que tampoco puede contratar debido a las restricciones marcadas en el plan de ajuste.
Por ello, el gobierno local está «buscando unha solución» para poder hacerse cargo del museo y reabrirlo al público, tal y como explicó ayer el alcalde. Este aseguró en su día que lo que no puede asumir el Ayuntamiento es el coste de la restauración de las locomotoras que tiene cedidas el museo para su exposición, como la mítica Sarita, la Sestao o dos máquinas más.
Su estado de conservación es lamentable, con óxido, a la vista de las últimas fotografías que trascendieron de las máquinas, que evidencian el deterioro del paso del tiempo pero, quizá, también de la falta de un mantenimiento adecuado.
El Patronato de la Fundación Cela decidió cerrar el Museo Ferrocarrilero para primar las visitas al resto de las instalaciones de sede de Iria-Flavia. Ante la indignación que causó en Padrón el cierre, el alcalde se reunió con el conselleiro de Cultura, con el que acordó la posibilidad de que el Concello asuma la gestión. Para ello, previamente, la casa de los canónigos de Iria en la que está el museo, la número ocho, deberá ser cedida por la Xunta al Ayuntamiento, a través de un convenio.
La Voz de Galicia