El Concello organiza el próximo viernes un homenaje por el 50 aniversario de su muerte.
Como Agustina Otero Iglesias muy pocos la conocen. Para el mundo fue Carolina Otero, la Bella, una mujer que marcó tendencia en Europa durante la Belle ?poque; una dama que arrasó el París de principios del siglo XX con sus artes de bailarina, cantante, actriz y cortesana. Su leyenda se forjó entre las luces de la capital francesa, pero su historia había comenzado a escribirse muy lejos de allí. Arrancó en Valga, su tierra natal. El municipio que el próximo viernes le rendirá un homenaje con motivo del cincuenta aniversario de su fallecimiento en Niza.
Con motivo de tal efemérides, el recién inaugurado Museo da Historia de Valga -en el que, por cierto, la Otero tiene reservado un puesto de honor- servirá de marco para un acto sencillo. Arrancará a las siete de la tarde con una ofrenda floral. Tras ella, se celebrará una charla coloquio en la que Antonio Garrido, profesor de la Universidade de Santiago, reflexionará sobre Carolina Otero y los tiempos que le tocó vivir.
Con la conferencia no acaba el homenaje: los ganadores del primer concurso escolar «La Bella Otero, un retazo da historia de Valga», recogerán sus premios. Y a partir de ahí sonará la música. Las pandereteiras de Xanza, del ANPA del Ferro Couselo y As Chirimbolas do Pino caldearán el ambiente para dejar paso a María Chenlo y la banda de música de Valga, que serán los encargados de poner el broche de oro a una celebración con la que el municipio valgués quiere rendir homenaje a la más internacional de sus vecinas.
La Voz de Galicia