Padrón despidió al fundador del restaurante Gran Chaparral.

José Carlés Barreiro falleció en el hospital por coronavirus.

Fundador do restaurante Gran Chaparral

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Padrón despidió ayer a José Carlés Barreiro, de 85 años, fallecido por coronavirus en el Hospital de la Rosaleda. Viudo de María Victoria Cristobo Díaz, era vecino de Porta dos Mariños, en Pazos. Él y su mujer abrieron hace más de 50 años el Restaurante Gran Chaparral, hoy regentado por su hija, María Victoria Carlés, de 48 años. La pareja se casó y ya abrió el restaurante, primero en una casa más pequeña y, con el paso del tiempo, en el actual inmueble más grande, pegado a la carretera N-550. El establecimiento hostelero, actualmente cerrado por el estado de alerta, sirve menús del día, de lunes a viernes sobre todo para una clientela obrera, pero los fines de semana y sobre todo el domingo, es parada de numerosas familias, entre ellas muchas de Santiago, que eligen este local de Padrón para su comida dominical, especializada en callos, cocido y cordero.

Los fundadores eligieron el nombre del local por una serie de televisión de temática del oeste norteamericano centrada en el rancho El Gran Chaparral.

Hoy, la hija del fallecido ha querido recordarlo como un “home moi traballador”, camionero toda la vida de la empressa Maderas Magán de Pontecesures, al igual que su madre que atendía el café bar y restaurante. En el local, a José Carlés le gustaba mucho echar la partida de cartas con los clientes y, quizás, por ello, el establecimiento no cerraba ningún día de semana al año ha recordado hoy María Victoria Carlés, que tiene dos hermanos. su padre fue enterrado ayer en el cementerio paroquial de Iria, siguiendo las indicaciones sanitarias vigentes.

La Voz de Galicia

La falta de luz y de señales convierte en muy peligrosa una confluencia de vías en Padrón.

La Policía Local de Padrón advierte de la peligrosidad que entraña la confluencia de varias vías de alta capacidad a la salida de la autovía del Barbanza, una zona de «visibilidad reducida» de noche y los días de lluvia y oscuros debido a que la iluminación es nula y la señalización también.

Así, los conductores que salen de la autovía del Barbanza en dirección a la variante de Padrón (actualmente denominada N-550) o a la autopista AP-9 se encuentran con un tramo en el que hay una curva sin señalizar y, ante la falta de iluminación, algunos siguen de frente, invaden el carril contrario y hasta llegan a chocar contra el muro de protección, para acabar cayendo al canal. Afortunadamente, por ahora no se registró ningún accidente mortal, pero si está habiendo, de acuerdo con la Policía Local, numerosos incidentes en esta zona a causa de la falta de iluminación y de señalización. En uno de los últimos se vio implicada una familia con tres menores.

«De noite, aquí non se ve nada», confirma una conductora de Padrón. La falta de iluminación estaría fácil de solventar con la instalación de una palmera con varios focos de luz, que iluminasen hacia las vías que confluyen en la zona. Una de este estilo ya está colocada en el puente de Catoira, en la provincia de Pontevedra, pero no tiene uso porque ese punto tiene iluminación suficiente por otros medios, según explica la Policía Local. Por ello, se podría aprovechar esa para instalarla en el punto conflictivo de Padrón, en el que hay una pequeña zona verde en la que se podría colocar el poste.

También sería necesario mejorar el muro de protección de la carretera que, de acuerdo con la Policía Local de Padrón, «non cumpre as medidas reglamentarias de altura» de modo que no sirve de freno para los vehículos que siguen de frente y no dan la curva.

En cuanto a la señalización, la confluencia de vías ni siquiera tiene paneles direccionales luminosos, que advertirían a los conductores de la presencia de la curva. Otra señalización horizontal que podría ayudar es ampliar la mediana de la autovía hasta pasar la curva que conduce a la variante de Padrón y a la autopista. Para distinguir bien los carriles de circulación, también valdrían los pivotes verdes e incluso la pintura luminosa aunque, sin duda, la instalación de luces parece los más indicado para incrementar la seguridad en este tramo de gran tránsito diario. Tiempo atrás repintaron las líneas horizontales que, en algún punto, ya estaban borradas.

La Voz de Galicia

El Concello de Padrón mejora la seguridad del trazado del Camino en A Ponte.

El Camino Portugués a su paso por Padrón es un poco más seguro y bonito con dos pequeñas actuaciones del Concello. Más seguro nada más entrar en el municipio, al pasar el puente sobre el Ulla en el núcleo de A Ponte, donde el Ayuntamiento instaló meses atrás una bionda de hormigón que obliga a peregrinos y viandantes a cruzar la intersección de la vía que conduce a la empresa a Finsa por un paso de peatones situado a unos metros.

Hasta la colocación de la bionda, peregrinos y viandantes cruzaban la vía nada más concluir el paso del puente sobre el Ulla, en el cruce con la vía N-550, con el consiguiente peligro. El Concello colocó el muro de protección después de que el pleno de la corporación aprobase una propuesta del BNG de Padrón, que el año pasado alertó de que lo peregrinos estaban «cruzando a estrada para a Aduana polo punto máis perigoso, xusto na intersección coa vía N-550».

El grupo nacionalista ya propuso entonces «prolongar o murete de separación da beirarrúa e a estrada ata o paso de peóns para evitar esta situación de perigo», que es lo que acaba de hacer el Concello con la colocación de la bionda de hormigón.

En otro punto del Camino Portugués entre Pazos y A Escravitude, el Ayuntamiento también realizó una obra que, en este caso, embellece el trazado, al mejorar el tramo entre Cambelas y Tarrío con un pavimento empedrado, que algunos ven excesivo pero que, en este caso, realza una zona del recorrido jacobeo ya de por sí hermosa. El Concello decidió utilizar piedra, precisamente, por ser un tramo del Camino Portugués.

El gobierno local tiene previsto continuar con la mejora del trazado hasta pasar el núcleo de Tarrío hacia Vilar, en A Escravitude, para lo que tiene un proyecto ya redactado y otro en previsión, según explicó ayer el concejal de Obras, José Ramón Pardo. En este caso también habrá zonas en las que se optará por hormigonado.

El cruce en las proximidades de la rotonda de Pazos es ahora el punto más peligroso

Resuelto el problema de seguridad para los peregrinos en el lugar de A Ponte, Padrón aún tiene más puntos que resultan peligrosos para los peregrinos y, sin duda, el cruce en las proximidades de la rotonda del hotel Scala en Pazos es el más grave de todos. Lo es pese a que el Concello solicitó hace tiempo que se adopten medidas para garantizar el cruce seguro de los peregrinos y vecinos en este punto próximo a la rotonda y, más concretamente, en la carretera AC-301 de enlace entre Padrón y Rois.

Llegados a la altura de la glorieta de la vía N-550, los caminantes siguen por la acera hasta la vía AC-301, donde se ven obligados a cruzarla sin ningún tipo de señalización para seguir su camino por el aparcadero del hotel.

Un segundo punto del Camino Portugués mejorable en cuanto a seguridad está en A Picaraña, en el cruce de la vía N-550 después de la rotonda. Los caminantes deben cruzar por un paso que no está regulado por semáforo.

La Voz de Galicia

El Concello de Padrón quiere anular todos los contenedores de basura subterráneos.

Ya retiró tres de las instalaciones y está pendiente de suprimir otras tantas: junto a la biblioteca, plazuela Cela y Murgadán.

El Concello de Padrón quiere anular todos los contenedores subterráneos de basura, a causa del alto coste de mantenimiento de los mismos. Tres de las seis instalaciones para el depósito de residuos ya están suprimidas y quedan pendientes otras tres: junto a la biblioteca, en la plazuela Camilo José Cela y en la calle Murgadán.

Así, están anulados y retirados los contenedores subterráneos que había situados junto al parque infantil, en la Rúa Longa; los de la vía N-550 en la avenida de Compostela y los de la plaza Ramón Tojo. En esta última, el Concello repuso, en su lugar, las losas de piedra de la plaza mientras que en la zona junto al parque instaló un banco decorativo y en la N-550 también repuso el firme.

Para anular y retirar los contenedores subterráneos de la calle Murgadán, en los que ya hay un aviso de que dejarán de funcionar en breve, el Concello construyó una base de cemento para crear una isla de recipientes en superficie de lado del río Sar, cerca de la pasarela peatonal que comunica la zona de O Bordel y la de A Barca.

Esta ubicación no gusta a muchos. A unos porque consideran que está «lonxe» de donde están los contenedores subterráneos en los que actualmente depositan la basura y a otros por estar situada de lado del río, de modo que aseguran que hay posibilidad de que los residuos acaben en el cauce. En cuanto a los situados en la plazuela Camilo José Cela, el Ayuntamiento busca una ubicación para los contenedores de superficie, que, un tiempo, estuvieron en el Paseo del Espolón.

Mientras no se anulan del todo en estas tres últimas ubicaciones, los contenedores de superficie están situados delante de los subterráneos, aunque ya hay alguno de estos últimos precintados y no se puede depositar la basura. De acuerdo con el Ayuntamiento, las instalaciones de los contenedores subterráneos dieron siempre problemas, de modo que su mantenimiento y reparación suponía un alto coste, salvo en el período que estuvieron en garantía, del año 2009 al 2011.

La Voz de Galicia

Los peregrinos siguen cruzando una vía en Pazos, en Padrón, sin ningún tipo de seguridad,

No hay paso de peatones pero una señal oficial del Camino, colocada recientemente, indica a los peregrinos que tienen que cruzar la carretera a la altura de la rotonda de Pazos, en el municipio de Padrón, en un tramo con gran volumen de tráfico. El Concello solicitó hace tiempo -por primera vez en enero del 2016- el pintado de ese paso de cebra, una vez que por este punto cruzan todos los peregrinos ya que está dentro de la última etapa del Camino Portugués.

De acuerdo con el alcalde, siguen esperando una contestación a esa solicitud. Entretanto, los caminantes se exponen a un atropello al cruzar sin ningún tipo de seguridad, al tiempo que los coches tienen que frenar y detenerse al encontrar al peregrino en el medio de la vía sin ninguna señalización previa, algo que se vuelve más peligroso en las horas en las que hay menos luz, como por las mañanas, cuando los caminantes salen casi de noche para recorrer el itinerario, tal y como destaca un conductor que habitualmente circula por ese punto.

Este es, sin duda, el tramo más peligroso a su paso por el municipio y, pese a ello, parece que por ahora nadie lo remediará. En su día, desde el Concello explicaron que en este punto hay una pequeña discordancia sobre la titularidad del terreno, una vez que la vía por la que cruzan es la nueva de enlace con Rois y, por tanto, de titularidad de la Xunta, aunque el Ministerio de Fomento sostiene que está dentro del área de influencia de la rotonda situada en la N-550 y, por tanto, es competencia estatal. Pero una cuestión como la titularidad de la vía no puede estar por encima de la seguridad de los peregrinos.

La Voz de Galicia