El K-4 en el que formaban las arousanas se quedó a un segundo del título en 500.
Cesureña y grovense saborean su medalla en Minsk.
El Campeonato del Mundo de la categoría Sub-23 ha servido para confirmar nuevamente la importancia del piragüismo arousano. En Minsk, Camila Morison y Natalia García Naveiro se subieron al podio de la final del K-4 en la distancia de los 500 metros.
Completando la tripulación junto a las vascas Sara Ouzande y Begoña Lazkano, la final completada por el barco español se quedó muy cerca de alcanzar el título de campeonas de mundo. La diferencia respecto al barco alemán fue únicamente de 1 segundo y 5 centésimas.
Además, Camila Morison todavía está en condiciones de volver de Bielorrusia con una medalla de oro colgada al cuello. A las 15.40 de hoy disputará la final del K-2 500 junto a la palista balear Alicia Heredia. Por si fuera poco, las esperanzas son aún mayores tras su holgada clasificación en la clasificatoria del pasado jueves. Lo que le ha valido para incluirla al barco de la cesureña en la nómina de barcos candidatos al título.
Además, la plata de Camila Morison se une a una destacada serie de éxitos internacionales como el bronce en los Juegos Olímpicos de la Juventud en China y un tercer puesto más en el Europeo júnior de 2014, logrando la plata en 2015 en la misma categoría también en el K-2.
Ángel Barreiro, presidente del Náutico Pontecesures, se refirió a Camila, «estamos ante una de las mejores kayakistas internacionales y esto teniendo en cuenta que solo tiene 19 años. Es un enorme ejemplo de compromiso, trabajo, esfuerzo y sencillez».
Faro de Vigo