La región del Cáucaso abandonará durante algo más de dos semanas su coletilla de zona caliente del planeta para atraer sobre sí los focos del mundo olímpico. Mañana en Azerbaiyán alumbrará una nueva cita con vocación de referente en el calendario de cualquier deportista que se precie en formar parte de la élite de su especialidad. Unos primeros Juegos Europeos que contarán con la participación de tres canoístas arousanos entre los 214 aspirantes a medalla con los que se desplaza la selección española para disputar los 19 deportes del programa de competición entre el 12 y el 28 de junio.
El grovense Tono Campos y el vilagarciano Diego Romero, en el C-2 1.000, y el padronés iniciado en el piragüismo de la mano del Náutico Pontecesures André Oliveira, en el C-1 1.000, parten hoy al mediodía de los aeropuertos de Vigo y A Coruña, respectivamente, con el domingo subrayado en rojo en sus agendas.
Los tres coincidían ayer en describir los Juegos Europeos como una cita secundaria, aunque notable, en sus planes para este 2015. Y no porque minusvaloren su relevancia curricular, sino porque ambos barcos arousanos han enfocado toda la temporada hacia la gran cita de agosto en augas de Milán. Un Campeonato del Mundo en el que se pondrán en juego el grueso de los pasaportes para los Juegos Olímpicos de Río 2016.
Campos y Romero conseguían el pasado sábado en el correspondiente selectivo de Verducido la plaza hispana para acudir a Milán. Con la tranquilidad que ello les da Tono comentaba ayer que «non fixemos preparación específica para estes Xogos, si para o selectivo, polo que chegamos mellor có Europeo de maio», en el que fueron décimos. «Hai que tentar meterse na final, e ver como estamos respecto ao resto».
Y es que a falta de más información, los arousanos esperan medirse en Bakú a la inmensa mayoría de la élite continental.
La situación de partida de André Oliveira es diferente, por cuanto él todavía tendrá que superar el 18 de julio el selectivo para hacerse con la plaza española en el C-1 1.000 del Mundial. Reservando pues «unha marcha» para el selectivo y Milán, el ex N. Pontecesures es fiel a su filosofía de «tentar mellorar sempre; na final do Europeo fun sétimo, así que aquí daría por bo rematar cando menos sexto».
Los arousanos buscarán en la mañana del domingo en Mingachevir, a 300 kilómetros de Bakú, la plaza para las finales del lunes.
Un viaje de casi 24 horas por aire y tierra
Tres vuelos les esperan a los tres arousanos. Desde Galicia a Madrid, de Madrid a Estambul, y a eso de las 00.45 horas del viernes de ahí al aeropuerto azerbaiyano de Ganja, a donde llegarán a primera hora de la mañana con unos 70 kilómetros más en bus por delante.
La Voz de Galicia