Con el final de las obras en la plaza de Abastos, cogen ritmo las del centro de la lamprea.

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Las obras que desplazaron a las placeras de Pontecesures a una carpa montada de forma provisional a lado de su lugar de trabajo, la plaza de Abastos, finalizarán a finales de la semana que viene salvo que haya algún contratiempo. «Queda limpiar y poner todo en orden tras el revuelo de las obras», afirma el alcalde, Juan Manuel Vida Seage. Durante las últimas semanas, se cambió y alicató el suelo y se mejoró la iluminación, al tiempo que se uniformaron los puestos para lograr una homogeneización del espacio. Para realizar estas obras, fue necesario vaciar la plaza.

Sus trabajadores se encuentran estos días a escasos metros, a la espera de regresar a unas instalaciones modernizadas.

Con estos trabajos a punto de finalizar, se comenzaron los de la denominada segunda fase. Se trata de la creación del centro de interpretación de la lamprea, que se construirá el local anexo a la plaza de Abastos y que hasta el momento se estaba utilizando como trastero. «Se están cambiando los tabiques para darle una nueva distribución», explica el alcalde. El objetivo de este espacio es que sirva para comercializar la lamprea y para potenciarla. Para ello, habilitarán una exposición y documentación escrita y audiovisual, como vídeos sobre su captura o su ciclo vital. Quieren que esté listo el día 15.

Faro de Vigo

Renuevan las luminarias en viales de Pontecesures para ahorrar energía.

La empresa local Doselco suministra lámparas de bajo consumo para la Avenida de Arousa, Camiño do Regadío y Doctor Mosquera.

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La eficiencia energética se extiende por las calles y viales de Pontecesures con la renovación de las luminarias en varias zonas para reducir el consumo y, por tanto, ahorrar en costes. Son cuatro las actuaciones que acaba de aprobar la Xunta de Goberno Local, todas ellas subvencionadas por el Instituto Energético de Galicia (Inega) y cofinanciadas por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader). La Avenida de Arousa, la Pista do Regadío y dos tramos de la calle Doctor Mosquera, en Redondo, son las que contarán con iluminación renovada y más eficiente en lo que al gasto energético se refiere. La empresa local Doselco S.L. es la adjudicataria de los trabajos, que suman un presupuesto global superior a 43.000 euros, de los que el Concello de Pontecesures afronta únicamente 8.962.

Dos de los cuatro proyectos se centran en la calle Doctor Mosquera, dividida en dos tramos. El primero alcanza hasta la rotonda de la Plaza de Pontevedra y en él se invertirá la cantidad de 9.915 euros para la instalación de las nuevas luminarias. El tramo restante, hasta la glorieta de A Tarroeira, en las inmediaciones de la sala de fiestas Chanteclair, conlleva una inversión un poco mayor, llegando casi a los 12.300 euros. En cuanto a la Pista do Regadío, que atraviesa prácticamente todo el municipio desde el límite con Valga hasta la carretera de A Estrada, el suministro de nuevas lámparas para el alumbrado supone un desembolso de cerca de 8.000 euros.

La última actuación es la que se afecta a la Avenida de Arousa, el tramo cesureño de la carretera autonómica PO-548 entre la localidad de Ulla y Vilagarcía. En este vial es donde se contempla una mayor inversión, con 13.164 euros, y ya está en obras ya que la Xunta de Galicia acomete desde hace días mejoras en la canalización de servicios y ampliación de las aceras en aquellos tramos en los que no existían o eran deficientes, fundamentalmente en el margen izquierdo de la calzada donde apenas había pequeñas zonas para la circulación segura de los peatones. En el marco de este proyecto también se modificará el emplazamiento de las farolas del alumbrado público, hasta ahora localizadas en el margen derecho de la carretera y que pasan al lado izquierdo.

Faro de Vigo

La Diputación mejorará la señalización horizontal de la rúa dos Namorados de Porto.

En los municipios del Ullán, la Diputación acometerá la mejora de la señalización horizontal se acometerá en siete carreteras, tres de ellas en Valga, otras tantas en Catoira y una en Pontecesures, en concreto, en Porto (desde la plaza de los Valeiros hasta la intersección con la Charca). En Valga las obras se llevarán a cabo en viales de Martores, Baño y Forno-Cernadas, mientras que en Catoira serán las carreteras de San Salvador, las Torres de Oeste y Coaxe (Dimo) las que cuenten con pintura renovada.

El traslado de los placeros a una carpa anuncia la creación de la Casa da Lamprea.

Las obras, adjudicadas a Taboada y Ramos, incluyen la remodelación interior del mercado de abastos -El edificio comercial permanecerá cerrado y sin actividad durante tres semanas.

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Estado actual del edificio de la plaza de abastos de Pontecesures.

La empresa Taboada y Ramos dará comienzo esta semana a las obras de mejora de la plaza de abastos de Pontecesures y la habilitación de la Casa da Lamprea, un centro de interpretación centrado en esta especie piscícola con el que el Concello quiere iniciar la transformación de la zona portuaria y conseguir que la villa vuelva a mirar al Ulla. Los preparativos para los trabajos ya están en marcha y entre ayer y hoy se acomete el montaje de una carpa a la que, durante aproximadamente tres semanas, trasladarán su actividad la media docena de concesionarios que venden en la plaza. El Concello se encargará de facilitarles conexiones de agua y electricidad, de manera que la mudanza suponga el menor impacto posible en la actividad comercial. El gobierno local, con el alcalde Juan Manuel Vidal Seage a la cabeza, se reunió el viernes con los placeros para consensuar su reubicación . “Son conscientes de que las obras ayudarán a mejora mucho el aspecto del mercado y supondrán un impulso” para estas instalaciones, apunta el regidor cesureño.

Las obras engloban un doble proyecto, por un lado, la remodelación del mercado y por otro la creación del centro interpretativo y escaparate de promoción de la lamprea, ambos con financiación de la Xunta de Galicia. El primero supondrá la homogeneización interior de la plaza, con cambios en su distribución, renovación del pavimento y de las paredes y dotación de nueva iluminación. Estos trabajos están encaminados a conseguir el distintivo de “mercado excelente” en el que no solo se realice actividad comercial, sino que “sea un espacio con más contenido, en el que se realice un intercambio cultural” e incluso se puedan degustar los productos que se ofertan. De ahí que el proyecto incluya la apertura de una cafetería y una pérgola exterior, imprimiéndole carácter de área de esparcimiento. “Es una oportunidad única para revitalizar la vida del mercado, apostando claramente por transformarlo en un punto de venta especializado en el que destaquen los productos locales”, avanzaba hace semanas Vidal Seage. En fechas próximas las vendedoras recibirán un curso de formación y contarán, también, en esta nueva etapa con uniforme.

La Casa da Lamprea, por su parte, ocupará la parte posterior del mismo edificio, una zona bastante degradada, y realizará una doble función, explica el alcalde. Será lugar de pesaje y facturación de los valeiros que participen en la campaña de pesca de este pez en el Ulla y también funcionará como escaparate en el que promocionar la conocida por algunos como “dama del Ulla”. Se calcula que los trabajos mantendrán cerrada la plaza de abastos durante unas tres semanas, tiempo en el que la compraventa de productos se desarrollará bajo la carpa provisional ubicada también en la zona portuaria.

La Casa da Lamprea está presupuestada en cerca de 70.000 euros, alcanzando los 150.000 al añadir el coste de la mejora interior de la plaza. La administración municipal aportará 24.000 euros, liberados el pasado mes de septiembre mediante una modificación de crédito, y el resto correrá a cargo de varios departamentos de la Xunta, entre ellos Turismo de Galicia.

Faro de Vigo

La peatonalización del casco histórico de Padrón divide a vecinos y comercio.

La medida suscita opiniones encontradas sobre sus beneficios e inconvenientes.

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El acuerdo y consenso que hubo en los siete grupos políticos del Concello para decidir la peatonalización de todas las calles y plazas de la zona histórica de Padrón contrasta con la diferencia de opiniones que hay a pie de calle entre comerciantes, hosteleros y vecinos de las vías afectadas: rúa Real, Santo Domingo, Dolores, Murgadán, Corredoira da Barca y las plazas Rodríguez Cobián, y la conocida como la das Galiñas.

La división de opiniones se palpa ya entre el comercio y la hostelería consultada de la calle con más número de negocios, la Real. Los que están a favor de la peatonalización consideran que «todo son vantaxes» y hablan de que beneficiará la actividad comercial de los establecimientos, tal y como sostienen también los grupos políticos del Concello.

Lo ven así porque creen que hay alternativas de estacionamiento para compensar las 80 plazas que se pierden en las vías peatonalizadas. Aunque, especifican, esos espacios «non están a beira da porta, como pretenden moitos condutores». Además, hay quien apunta que en la Rúa Real hay peligro por la velocidad a la que a veces pasan los coches, ya que «non se pode poñer un pé fóra do portal».

Por ello, consideran que, sin tráfico, todo serán comodidades, «sen ter que preocuparse dos coches nin ter que apartar deles». Otro comerciante añade que, a nivel de clientes, no perjudicará nada porque estos «xa non poden pasar nin aparcar nestas rúas».

Para algunos, esta segunda fase de peatonalización del casco histórico ya se debió hacer junto con la primera, en la etapa del gobierno de Jesús Villamor. Sin circulación y sin vehículos, alguno de los negocios que están a favor propone que el Concello instale bancos, farolas y árboles para humanizar más esta zona céntrica de la villa.

Mención especial merece la plaza Rodríguez Cobián, junto a la iglesia, donde siempre hay muchos vehículos estacionados. El titular de un negocio señala que, con coches, «sempre é un follón, sobre todo cando hai misas e enterros», sin contar que los peregrinos deben sortear los vehículos para, por ejemplo, fotografiar el templo, cuenta este afectado.

Por su parte, los vecinos y negocios consultados que están en contra de la peatonalización creen que «no beneficia en nada al comercio» y que perjudica, en cambio, a los clientes, ya que los residentes que aparcan hasta ahora en la calle pasarán a ocupar plazas en otros espacios, como el Campo del Souto, lamentan. Y esas plazas quedarán «de menos» para los que vienen a Padrón a comprar, añaden.

Además, vecinos sin plaza de garaje en el edificio se preguntan dónde irán a aparcar a partir del 1 de enero, sobre todo los domingos, jornada en la que las leiras-párking cedidas al Ayuntamiento son de pago. Una familia propone que el Concello habilite un espacio para los residentes afectados por la peatonalización.

Otro de los inconvenientes es el horario de carga y descarga, según cuenta un repartidor. Señala que no es el más adecuado, ya que buena parte del comercio de Padrón abre a las 10 de la mañana y solo queda una hora para realizar la entrega de los paquetes.

Carga y descarga.

Este sector demanda, al igual que varios comercios, un horario de carga y descarga por las tardes. De hecho, según explica un repartidor, por la mañana reciben los paquetes de Madrid, mientras que Barcelona y el sur de España los envían por la tarde, con lo que tienen que quedar sin repartir hasta el día siguiente.

En otras calles afectadas, hay quien señala que Padrón no tiene tantos habitantes como para peatonalizar todo el casco histórico. Añade algún consultado que «cerrar o pobo» no es la mejor opción para una villa que «vive da xente dos arredores», a la que le hay que dar servicios, como plazas de aparcamiento.

La división era previsible y, como señala más de una persona entrevistada, «todo será cuestión de adaptarse». En cualquier caso, todos los afectados podrán presentar alegaciones a la modificación de la ordenanza que conlleva la peatonalización, para lo que tendrán un mes desde su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).

La Voz de Galicia

Padrón aprueba la peatonalización de todas las calles y plazas del casco viejo.

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Padrón da el paso definitivo para la peatonalización de todo el casco histórico, en concreto, de la zona comprendida entre la carretera N-550 y la avenida de Castelao, junto al Espolón. Por decisión unánime de los grupos, el pleno del Concello aprobó ayer una modificación de la ordenanza general de circulación y uso de la vía pública que conlleva que, desde el 1 de enero del próximo año, «non se pode estacionar nin circular no casco histórico da vila», según informó la corporación en una nota conjunta.

Las únicas excepciones serán las zonas de carga y descarga, para lo que se mantiene el actual horario (de lunes a sábado, de ocho a once de la mañana), así como los servicios especiales, como emergencias, Policía Local o recogida de basura, entre otros, además de los propietarios o inquilinos para uso de garajes, siempre con vehículos que no superen los 3.500 kilos de peso. Estos propietarios deberán solicitar una tarjeta de circulación, en la que se les especificarán las calles por las que podrán circular para acceder a sus plazas. Por cada propietario, el Concello solo autorizará un máximo de tres coches.

El objetivo de la peatonalización es «dinamizar o casco urbano, ao mesmo tempo que se humaniza e se protexe o patrimonio histórico, ademais de promover o comercio local», de acuerdo con la decisión de la corporación municipal. De este modo, a las calles ya cerradas al tráfico y a la circulación se sumarán la Rúa Real, la de Santo Domingo y la plaza Rodríguez Cobián (junto a la iglesia). También habrá algún cambio en la circulación en calles para la carga y descarga.

En el pleno extraordinario de ayer, los grupos políticos dejaron claro que se trata de una propuesta conjunta y consensuada de todos ellos, de modo que fue aprobada por unanimidad. Todos aseguraron que redundará en beneficio del pueblo y, en especial, en la calidad de vida de los que residen en la zona histórica, así como en la actividad del comercio local. Precisamente, dinamizar la vida del pequeño comercio y humanizar el casco histórico son las principales razones que llevaron a los siete partidos políticos a llegar a un acuerdo.

Pero, según lo pactado ayer, la peatonalización requiere de una segunda medida: buscar zonas alternativas para estacionamiento, ya que en las calles y plazuelas cerradas al tráfico se perderán unas 80 plazas. Asimismo, la corporación estudia la posibilidad de crear zonas azules, con tiempo limitado de estacionamiento. De todo ello ya empezaron ayer a hablar todos los grupos políticos, una vez remató el pleno.

No obstante, sería necesaria una medida más para dinamizar la vida y actividad del casco histórico y ponerlo en valor, que pasa por impulsar de manera firme la rehabilitación de los inmuebles en ruina, que son unos cuantos.

La Voz de Galicia