Los pontecesureños aplauden la fiesta del churro y actividades como la cabalgata.

Vecinos, hosteleros y churreos de Pontecesures aplauden tanto la programación sociocultural desplegada en Navidad como la organización del día del patrón, San Julián, ya que esta importante efeméride se complementó con una exitosa Festa do Churro, en la que se repartieron unos 30.000.

“Nunca se vio tanta gente como en esta cabalgata de Reyes y esta fiesta del churro que está mucho mejor ahora que en el verano”, señalan los ciudadanos y hosteleros. Coinciden con los churreros y la alcaldesa, Maite Tocino, al resaltar que la degustación gratuita de churros y chocolate contribuyen “a engrandecer el San Julián”, por lo que se revitaliza la economía local y se genera “un gran ambiente festivo”. Visiblemente satisfecha, la regidora anuncia que el año que viene se repetirá la experiencia.

Faro de Vigo

La esquiva lamprea del Ulla llega a las redes de los valeiros y se despacha a más de 60 euros.

Tras la primera del año, que cayó hace días en una pesqueira de Herbón y se colocó a 100, ahora aparecen en Pontecesures

Una de las lampreas del Ulla adquiridas por Casa Barqueiro.

FARO DE VIGO ya había explicado la semana pasada que la primera lamprea en el Ulla cayó en una de las nasas colocadas en las pesqueiras de Herbón. Y que se vendió a 100 €.

Más concretamente en las construcciones que ya empleaban los romanos y que ahora explota un pescador tan experimentado como Antonio Caldelas, un viejo conocido de los lectores del decano de la prensa nacional.

Esta semana la lamprea también hace sonreir, aguas abajo, a los valeiros que operan en Pontecesures. Es decir los pescadores asociados a las cofradías de Rianxo y Carril que lanzan sus nasas butrón desde embarcación.

El lunes volvieron al agua para levantar esos aparejos las tripulaciones de cuatro de las planeadoras empleadas por este colectivo, los cuales los habían largado el viernes.

Y el resultado fue esperanzador, ya que tras una primera semana sin capturas, esta vez se pescaron al menos trece ejemplares, la mayoría colocados en el mercado a 60 € más IVA.

Al decir mercado, se alude a los restaurantes especializados a los que la lamprea del Ulla se vende directamente, los cuales esperan como agua de mayo la captura de este primitivo y cartilaginoso pez por parte de los valeiros.

Unos negocios que a veces pagan cantidades muy elevadas para disponer de este producto y poder satisfacer a sus clientes más exigentes.

El restaurante Casa Barqueiro de Negreira es uno de los establecimientos que se hicieron con uno de los ejemplares, como confirma Pepe Barreiro, el valeiro que suministró el producto.

El mismo pescador confirmó que también Casa Farrucán se llevó parte de las primeras lampreas.

Los valeiros esperan que a partir de ahora las capturas del Ulla vayan en aumento, e insisten en decir que “se espera un gran año”, aunque prefieren ser cautos, pues la misma esperanza tenían el año pasado y resultó ser nefasto para sus intereses.

Expectativas que también son elevadas en el caso de los titulares de las pesqueiras ubicadas aguas arriba, toda vez que “el río lleva mucho caudal y eso es bueno para que la lamprea pueda remontarlo” insiste Antonio Caldelas.

Faro de Vigo

Los valeiros cesureños capturan las primeras lampreas de la temporada en el río Ulla.

Los valeiros cesureños capturan las primeras lampreas de la temporada en el río Ulla
Dos embarcaciones faenando en el inicio de la campaña en el Ulla.

Tras una primera semana en blanco, los valeiros consiguieron las primeras capturas en la zona de Pontecesures. El río, caudaloso, presentaba unas buenas condiciones para la pesca de este escurridizo y cotizado pescado, pero el tiempo no acompañaba en el inicio de la campaña, especialmente por el mal tiempo, que hizo a varios valeiros atrasar su inicio de temporada en el río Ulla. Ahora, tras las primeras capturas, los pescadores esperan que mejoren las condiciones climáticas y que cambien las tornas para salvar la campaña.

La primera pieza, sin embargo, cayó el pasado viernes en las pesqueiras de Herbón, donde se capturó un ejemplar que superó el kilo de peso. Desde luego, las condiciones caudalosas del río benefician más a las pesqueiras, que aguardan que este año haya una buena campaña.

Diario de Arousa

Finou Concepción Rodríguez García.

Aos 56 anos de idade, finou hoxe esta veciña da Avda. de Vigo de Pontecesures, viúva de José María Martínez Caamaño. O velorio está instalado na sala 1 do Tanatorio Iria Flavia de Padrón. Mañá martes 9 de xaneiro, a partir das 16:30 horas, terá lugar o funeral na Igrexa de Pontecesures. De seguido, os restos mortais trasladaranse ao crematorio M. Sánchez de Rianxo para a súa incineración na intimidade familiar.

Descanse en paz.

Pontecesures merendó unos 30.000 churros en la fiesta del patrón.

La Plazuela se llenó de gente para celebrar San Xulián

Pontecesures merendó este domingo a lo grande. Entre 28.000 y 30.000 churros se sirvieron en la Festa do Churro que se celebró esta tarde por el día del patrón, según los datos facilitados por la alcaldesa, Maite Tocino, que no dejó de acudir a una fiesta a la que parece haberle sentado bien el invierno. En ediciones anteriores se ralizaba en verano, pero el gobierno local consideró oportuno moverla en el calendario, y parece que acertó. La Plazuela se llenó de gente para disfrutar de la fritura dulce salida de diez puestos, de la chocolatada, también gentiliza del Concello, y para disfrutar de la música del dúo Nueva Era.

Por la mañana actuaron los grupos  Algueirada y Xarandeira  y se celebró misa con la Coral polifónica A Barcarola. 

La Voz de Galicia

Dos templos que están a la vista y otros dos escondidos en Padrón.

Las iglesias de Iria Flavia y A Escravitude son los principales referentes en esta ruta con mucho patrimonio e historia.

Padrón tiene tres templos en su casco urbano: dos en su corazón (la parroquial de Santiago, con el pedrón, y el pequeño de la Orden Tercera) y otro en su límite (el del magnífico convento del Carmen, que a su vez esconde la capilla de Santa Teresa). Pero en sus cercanías fueron erguidos varios más que, desde luego, se merecen una visita.

El más humilde de todos ellos se encuentra en la salida hacia Pontecesures, a la izquierda, en esa recta ahora mucho más diáfana desde que se derribaron unos edificios que afeaban el conjunto. Es José Manuel Garrido, el gran conocedor (y valedor) de Padrón, a quien siempre hay que preguntar cuando se trata de la historia de la localidad, quien explica: «Se trata de la capilla de la Virgen de los Dolores, en A Ponte, pero no es antigua, qué va, fue inaugurada en el 2002».

En realidad, es la materialización del deseo de una mujer, Rosa Cortiñas, poetisa quien estuvo trabajando muchos años en Estados Unidos. Esta sencilla construcción, pequeña, «fue puesta al servicio de todos sus vecinos», en palabras de Garrido. La mujer aseguraba haber tenido una visita de la Virgen de los Dolores, según informaba este periódico con motivo de la inauguración del edificio, y por ello decidió levantar la capilla.

Pero los dos pesos pesados se encuentran yendo a Santiago por la carretera nacional, y uno y otro son bien conocidos: Iria Flavia y A Escravitude. Ante ambos pasa el Camino Portugués a Compostela.

Iria Flavia son palabras mayores no solo por su arquitectura, con fuerte presencia del arte románico, sino por su historia. En su cementerio estuvo enterrada durante seis años Rosalía de Castro antes del traslado al Panteón dos Galegos Ilustres. Además, fue, si no la capital de Galicia, sí el gran centro de poder en los siglos VIII y IX, hasta que el descubrimiento de la tumba del apóstol Santiago en el bosque Libredón (donde hoy se halla la catedral) le hizo perder la relevancia que ganaba el poblado que iba creciendo en torno al cuerpo de uno de los doce seguidores de Cristo. En cualquier caso, se impone ver el magnífico museo al aire libre que conforman los sepulcros antropomorfos datados en el siglo VI y que se extiende al lado del templo. Por cierto, si la visita coincide con el repique de campanas, la recomendación no puede ser más que quedarse quieto y escuchar. Una maravilla.

Cristóbal Ramírez

A Escravitude no tiene nada que ver con eso. Bien al contrario, es muy posterior. De hecho, la iglesia vieja no es esa, sino otra románica: la de Cruces, unos metros más adelante por el Camino Portugués. Un párroco de Cruces del siglo XVI había colocado mera cuestión de fervoroso agradecimiento por un favor— una imagen de la Virgen con su hijo en una fuente de la cual sigue manando agua, y ahí paró un hombre enfermo de hidropesía, quien bebió y a las 72 horas estaba curado. La tradición asegura que ese hombre exclamó (¿En gallego o en castellano? Muy probablemente, en gallego, aunque haya pervivido la frase en español) «Gracias, Virgen, que me libraste de la esclavitud de mi mal». Y de ahí el nombre que adquirió un santuario que se remató en 1886 y que fue levantado con donaciones populares.

A Escravitude tapa un poco a Cruces, y no resulta justo marcharse sin ver esta. Ahí llamarán la atención el ábside rectangular románico, uno de los elementos que quedan de la obra erguida a principios del siglo XII o principios del XIII; la colección de canecillos que soportan el alero del tejando y la sacristía de 1618. Un buen punto final a la excursión.

La Voz de Galicia