El PSdeG-PSOE de Valga cree que el PP local y el alcalde, José María Bello Maneiro, «miran para otro lado» y se «desentienden» de los problemas de los vecinos en plena crisis económica provocada por la pandemia del coronavirus».
Saca esta conclusión después de que los conservadores, con mayoría absoluta, rechazaran en pleno la moción socialista para trazar un «plan de reconstrucción», que sí fue arropada, aunque inútilmente, por el representante electo de Valga Viva.
María Ferreirós, la portavoz del PSOE, recuerda que su propuesta planteaba unir a los tres grupos políticos en «la creación de ayudas
económicas y sociales para paliar los daños del Covid-19 en empresas,
autónomos y familias, pero el gobierno del PP, como ya hizo en marzo
ante la creación de una mesa de seguimiento de la pandemia, se opuso a
nuestro plan de reconstrucción», alegando que ya trabaja en esa misma
dirección.
La socialista dice que para su grupo es «prioritario» que todos los valgueses «puedan salir de la crisis sin dejar a nadie atrás, que las familias puedan conciliar y que las empresas y autónomos se sientan apoyados económicamente y arropados por el Concello».
El asunto fue debatido en un pleno telemático celebrado el viernes.
Un pleno extraordinario celebrado de forma telemática
ha servido para aprobar de forma definitiva el plan parcial de suelo
urbanizable S-104, un documento que «ordea unha bolsa de solo industrial emprazada na zona de O Forno-A Torre» a fin de permitir «a ampliación das instalacións da empresa Extrugasa». Es esta, recuerda el gobierno municipal, «a maior industria de Valga tanto en superficie como en número de empregados, e un dos motores económicos de toda a comarca». Esta modificación urbanística contó con los votos a favor del gobierno municipal (PP) y del concejal de Valga Viva.
Según explica el ejecutivo que encabeza Bello Maneiro, «o
PXOM aprobado en 2010 xa clasificaba como solo urbanizable delimitado
de uso industrial esta bolsa de terreo, lindeira coas actuais
instalacións de Extrugasa, co obxectivo de posibilitar a súa expansión». Con este plan, «establécese
unha ordenación compatible coas necesidades da empresa, delimintado o
solo industrial así como un aparcadoiro, un novo sistema viario e
espazos libres e zonas verdes, que exercerán como pantalla visual e
acústica entre a actividade industrial e a zona residencial» más inmediata.
El alcalde, Bello Maneiro, explicó en el pleno que es obligación del Concello «favorecer e non poñer paus nas rodas» de las empresas que apuestan por la localidad. En ese sentido, insistió en que en estos momentos «Valga ten cero metros de terreo industrial público», por lo que en los últimos años «dúas empresas que estaban ubicadas aquí marcharon fóra do noso Concello». «Un concello sen un polígono empresarial non é un concello con futuro. Valga necesita un parque empresarial e vai telo para favorecer que os empresarios invistan no municipio e creen emprego», sentenció.
El PSOE se abstuvo. La aprobación de este plan parcial salió adelante con la mayoría absoluta del gobierno del PP y el voto a favor de Valga Viva. El PSOE se abstuvo. Su portavoz, María Ferreirós, explicaba ayer que la ampliación del área industrial “podería ser mellor plantexada, máis ambiciosa, máis sostible e con menor impacto sobre as familias que alí teñen vivendas e parcelas. Seguramente incluso con máis metros cuadrados de superficie ampliable que a que se acaba de aprobar”. La abstención de los socialistas se debe a que consideran que el plan “pode impactar de xeito negativo á zona do Forono, deixando a moitas vivendas nun contorno extremadamente cercano á área industrial”. Además, Ferreirós califica el desarrollo urbanístico de los últimos 25 años de “caótico” y “exemplo de mala xestión”. Esta es la primera de las cuatro ampliaciones planteadas.
El Concello solicita una subvención a la Diputación para celebrar el festival en junio.
Si consiguen la subvención solicitada a la Diputación de Pontevedra,
el Concello de Pontecesures viajará en el tiempo, veinte siglos atrás.
Lo hará para celebrar una fiesta «de la romanización», un evento con el
que el gobierno local pretende hacer «un guiño á historia da nosa
localidade». Podían haber escogido otros momentos históricos, pero han
optado por aquellos tiempos en los que los barcos romanos subían por el
Ulla, cuando la localidad era uno de los lugares cruzados por la Vía XIX
extendida por el imperio para mejorar las comunicaciones en la
Gallaecia.
Los vínculos de Pontecesures con Roma existen,
aunque sean un tanto oscuros. Para explicar el nombre del pueblo, por
ejemplo, se manejan dos teorías. Una, la del punte del césar, según la
cual el puente interprovincial fue construido por orden del emperador
César Augusto, en el siglo primero. Hay quien descarta esa hipótesis al
asegurar que el puente no fue levantado hasta la edad media. Hay, aún,
una segunda explicación para el origen del topónimo que la relaciona
directamente con el poder romano. Provendría de «censuris», por ser el
lugar en el que se realizaban los empadronamientos o censos en época
romana. Sea cual sea el origen de su nombre, Pontecesures tuvo un pasado
romano. Y es que el río Ulla fue una de las vías utilizadas por los
latinos para extender su cultura por la costa de Galicia.
«A nosa intención era facer esa celebración asociada á Festa da Lamprea, pero non pode ser, así que a plantexamos para o mes de xuño», argumenta el alcalde, Juan Manuel Vidal Seage (PP). Su intención es, con esta celebración, recordar el pasado de Pontecesures como el «crisol de culturas que foi durante moito tempo», al mismo tiempo que enriquecer el calendario de actos capaces de atraer turistas y visitantes a una localidad que quiere hacer de esta actividad uno de sus pilares económicos.
La elaboración del documento en el anterior gobierno PSOE-BNG había contribuído a forjar la moción de censura que dio el poder al PP.
Juan Manuel Vidal Seage, el alcalde conservador de Pontecesures, al frente de un gobierno tripartito de seis integrantes, libró y ganó el lunes la que puede considerarse su primera gran batalla desde que, a mediados del apsado mandato, tomó las riendas de este municipio ribereño.
Y es que el primer edil y su equipo consiguieron sacar adelante la RPT, precisamente el documento que contribuyó a derrocar al anterior gobierno PSOE-BNG madiante la moción de censura que dio el bastón de mando al popular.
Fue, el del lunes, uno de esos plenos importantes que tratan cuestiones de calado y que, para bien o para mal, pueden marcar el futuro de una localidad.
Sabedor de la importancia de la sesión, el alcalde no oculta su «enorme satisfacción» tras sacar adelante la RPT. Lo hizo con los votos favorables de su gobierno, la abstención de la oposición y, «lo más importante, con el visto bueno de las centrales sindicales y el respaldo de la inmensa mayoría de los trabajadores de ahí que lo considere un paso importante fundamental para garantizar una mejor organización del Concello».
Esa «mejor organización» a la que alude «irá en beneficio tanto de los trabajadores como del conjunto de vecinos, así como de este gobierno y de los que estén por venir, ya que se genera estabilidad en la plantilla formada por 27 personas».
Explica igualmente que «el informe de Secretaría fue completamente distinto «al emitido ante la RPT que panteaba el anterior gobierno PSOE-BNG. Y lo fue porque, a diferencia de la suya, nuestra propuesta es asumible puesto que planteamos 60.000 € menos de incremento salarial que el anterior gobierno.»
Además, «el contexto de estabilidad financiera es ahora muy diferente al de 2016, cuando las decisiones adoptadas por el PSOE y el BNG acabaron costándoles el gobierno».
Seage seguirá los pasos del alcalde de Vilagarcía y rescindirá el contrato a la firma que humanizaba la zona portuaria.
La empresa Nexia Infraestructuras ha cambiado de titulares. La firma
ha sido vendida y, aunque sus nuevos responsables afirman que «la
intención es seguir con la actividad y que las obras que se están
realizando sigan su curso», lo cierto es que de momento se están
centrando en «analizar la situación de la empresa para poder fijar la
estrategia» futura. Y esas no son buenas noticias para los municipios de
Vilagarcía y Pontecesures. Los dos tienen tratos con una firma que les
ha generado considerables problemas.
En Vilagarcía, el rosario de
despropósitos en los que acabaron envueltas las obras de humanización de
la calle Vázquez Leis, en Vilaxoán, llevaron a que, en el mes de
diciembre, Ravella tomase una decisión rotunda: rescindir el contrato
con la adjudicataria, que se había comprometido a tener la calle lista
el 21 de junio. Seis meses después de vencido el plazo, quedaba el 20 %
del proyecto por ejecutar. La intención de Ravella era que la empresa
que había quedado en segundo lugar en el concurso de adjudicación
terminase la actuación, pero Nexia presentó una serie de alegaciones
contra la decisión del Concello de apartarla. Ahora, los servicios
jurídicos están mirando el caso con detalle, para argumentar
concienzudamente su respuesta por si esta llegase a los tribunales. El
asunto es que, entre unas cosas y otras, la venta de la empresa no viene
más que a complicar un poco más el panorama. Y este es, de por sí,
desesperanzador para los vecinos de Vilaxoán, donde la primera calle que
iba a ser humanizada se ha convertido en una vía perennemente en obras.
A la orilla del río
En
Pontecesures también arrastran problemas con Nexia Infraestructuras, a
quien encomendaron en su día la humanización de la obra portuaria. Los
trabajos también han sufrido numerosos retrasos, pero en algunos
ocasiones debidos al Concello. Así lo reconoce el alcalde Juan Vidal
Seage (PP): se modificó el proyecto para recolocar el monumento de
Manolo Paz y para incluir una obra para eliminar un vertido al río
procedente de la plaza de abastos. A todo ello hay que sumar los
problemas propios de la empresa, que hace un tiempo parecían estar
resueltos. «Pero hai uns días levaron a maquinaria toda e marcharon», sin dar más explicaciones. Después de eso, el Concello tuvo noticia de la venta de la empresa constructora.
«Nestes momentos estamos buscando a forma de solucionar isto, os pasos que temos que dar», señala Seage, que considera que lo primero será rescindir el contrato con la firma. «Temos
que ver se facemos como Vilagarcía, adxudicándoa á segunda empresa do
concurso, ou se sacamos de novo a contratación a parte que queda por
facer».
Seage recuerda que los trabajos deberían haber quedado listos a mediados del año pasado. «Agora, moito me temo que non estean rematados nin para a Festa da Lamprea, o que nos vai condicionar moito», argumenta el regidor del Baixo Ulla.
Cuando las obras se demoran tanto que desesperan a los vecinos
Hay
calles en las que las obras parecen ser interminables. De ello podrían
hablar largo y tendido los vecinos de la rúa Cervantes, en Carril, que
llevan casi un año con la vía levantada. La dureza de la piedra con la
que se encontraron los obreros de la empresa que está realizando los
trabajos provocó un retraso que llevó al Concello a conceder una
prórroga de dos meses que vence ya, en cuestión de días. Ravella confía
en que los trabajos estén listos para entonces, según confirmaba ayer el
Concello de Vilagarcía.
Pero de vicisitudes y retrasos pueden hablar
también los vecinos de la grovense Alexandre Bóveda. Allí los trabajos
comenzaron a finales del mes de octubre, cuando la empresa Marconsa se
puso manos a la obra. Para sorpresa de muchos, el proyecto parece estar a
estas alturas parado. Y es que, en realidad, lo está. Así lo confirmó
ayer el alcalde, el socialista Jose Cacabelos, quien indicó que se ha
modificado el proyecto inicial para proceder a una mayor ampliación de
aceras, una medida para la que ha sido preciso llegar a acuerdos con los
propietarios. «Tenemos que formalizar el acuerdo y seguimos con las
obras», dice el regidor meco.
El retraso de estos trabajos no está gustando demasiado a vecinos, comerciantes y usuarios de esa vía de comunicación, un hecho que no ha pasado desapercibido a los grupos de la oposición grovense. Esquerda Unida, que está haciendo un minucioso seguimiento a este proyecto, considera que las obras se han realizado sin una mínima planificación, y que todas las modificaciones que se han ido introduciendo en el proyecto acaban dilatando los plazos de una forma exasperante para quienes tienen que convivir con los trabajos a la puerta de su casa. Además, desde EU consideran que este proyecto adolece de las mismas carencias que otras actuaciones desarrolladas en la localidad, sin estar integrado en un plan global de reordenación de la villa que asegure la viabilidad de los cambios introducidos.
El PP de Valga ha pedido al PSOE local que «reflexione». Los populares han criticado con dureza la estrategia mantenida hasta ahora por los socialistas de María Ferreirós, a quienes acusan de judicializar la vida municipal, además de «berrar, insultar e descalificar ao goberno local». «Debería presoucparse algo máis a señora Ferrierós de que os organismos nos que goberna o seu partido axuden máis aos seus veciños en proxectos coma o CODI, o Edificio Administrativo..Tamén debería centrar o seu interese en que non se desmantele o cuartel da Garda Civil»