Lo que fue un gran susto que bien pudo haberse convertido en tragedia acabó finalmente limitándose a una «trastada» de un niño de solo once años que decidió abandonar su hogar, y que dejó una nota anunciando que se iba para no volver.
Finalmente hay que hablar de un final feliz, ya que el menor fue localizado seis horas después de su huida, parece que cuando estaba escondido en un monte, dicen que asustado y muy nervioso.
Sucedió en Pontecesures, donde se puso en marcha un espectacular dispositivo de búsqueda en el que participaron Guardia Civil, Policía Local, Protección Civil y Grupo de Emergencias Supramunicipal de Valga, además de familiares, vecinos, amigos e incluso piragüistas de Pontecesures y Catoira, ya que el menor es miembro del club de piragüismo local.
El joven abandonó su hogar en una bicicleta roja y blanca en la que fue visto por última vez antes del despliegue de emergencia citado a la altura del lugar de Carreiras, y más concretamente en la carretera que conduce al municipio de A Estrada.
Cuando los padres dieron la voz de alarma se puso en marcha el citado operativo con la intención de luchar contra reloj, pues el objetivo era dar con el paradero del niño a la mayor brevedad, y sobre todo antes de que cayera la noche.
Finalmente, cuando algunos empezaban a temerse lo peor y ya había oscurecido, alguien dijo haberlo visto cerca de la aldea de Trasande, y fue allí donde se concentraron todos los esfuerzos. Minutos después el joven apareció en el monte, asustado y visiblemente nervioso, por lo que se dio por anulada la intervención.
Faro de Vigo