Teatro Chévere conmemora o día contra a violencia de xénero en Pontecesures.

O espectáculo de música e teatro I’ll be watching you: os roles de xénero nas cancións de amor, a cargo de la compañía de teatro Chévere, chegará a Pontecesures o vindeiro martes 6 de novembro. Dita representación serve para conmemorar o Día Internacional contra a Violencia de Xénero, 25 de novembro. Este acto está destinado a alumnos e alumnas de secundaria do CPI Pontecesures e terá lugar no Centro Social a partir das 11 da mañán.

Deste xeito, Chévere continúa a súa xira por diversos concellos de Galicia co apoio da Secretaría Xeral da Igualdade con este espectáculo dirixido especialmente a público xuvenil, que conta en escena con Patricia de Lorenzo e Manuel Cebrián.

I’ll be watching you é un proxecto pedagóxico, teatral, lúdico e musical do grupo Chévere, que analiza os valores que moitas veces se agochan detrás das baladas románticas, cuestionando os estereotipos ríxidos de home e muller que non contemplan outras opcións, a cosificación da muller, os celos como proba de amor, a connivencia coa violencia e o sentimento de propiedade sobre a outra persoa. Fala das relacións de igual a igual frente ás que non o son, da autoestima, da necesidade da reacción das propias mulleres para poñer fin á violencia de xénero.

Yeni é a vocalista e Dami o guitarrista dunha orquestra de pachanga. Veñen ofrecer o típico repertorio versioneando os éxitos do pop actual, esa música coñecida por todo o mundo e supostamente neutral, apolítica. Entre tema e tema, Yeni introduce o relato da súa propia experiencia vital como muller,facendo participar ao público dunha nova e crítica lectura dos valores que transmiten as cancións que canta.

 

 

Resposta á nota do goberno local sobre o reloxo da Plazuela.

Ante as acusacións do goberno local, quero manifestar o seguinte:

1. Non fun eu o encargado de mercar este reloxo en 1999, (recadación, trámites, empresas, etc..) nin tampouco o encargado de recibir ou coustodiar código algún. A do reloxo foi unha iniciativa (moi boa, por certo) de dous dos meus antigos compañeiros de corporación, os exconcelleiros socialistas Enrique José Herránz Grela e ?scar Gerpe Rodríguez. ¿Os códigos?, non os coñezo, pero pódenlle preguntar os integrantes do goberno, se acaso, á persoa que os lidera, o alcalde, Manuel Luis Álvarez Angueira. Presidia a corporación cando se mercou o reloxo en 1999 e logo de tantos anos no cargo pode ter algunha infomación.

2. Dende logo, en doce anos, o reloxo funcionou perfectamente, e tivo que chegar este goberno para que nos atopemos con esta desidia e incapacidade. ? o colmo ter un goberno que en catro meses non xestione o arranxo dunha avaría do reloxo da Plazuela.

3. Din que xa falaron co párroco sobre o arranxo. Tempo tiveron pero non sei de que falarían e que acordaron cando en catro meses non son quenes de solucionar esta cuestión.

En fin; que nos detallan un relato peliculero sobre chantaxes, libros e códigos, que non fai máis que amosar unha completa ineficacia que esta a provocar xa ata bromas entre os veciños. Haberá que tomalo con humor, e a ver se o reloxo alomenos funciona para o remate do ano.

Pontecesures, 17/09/12

Luis Ángel Sabariz Rolán
Concelleiro da ACP Pontecesures

La Casa de Rosalía.

Con frecuencia aparecen escritos a propósito de la compra de la Casa da Matanza, la vivienda que habitó Rosalía de Castro durante los últimos años de su vida. En unos se asegura que el Patronato Rosalía de Castro se creó expresamente para comprar la actual Casa Museo y en otros se mantiene que fue adquirida por suscripción popular.

Sin embargo, ninguna de esas presunciones es correcta. La realidad es que fueron dos compostelanos quienes adquirieron la casa de Rosalía en 1946 y la donaron posteriormente a todos los gallegos. Uno de aquellos dos hombres era José Mosquera Pérez, conocido por todos como O Vello dos contos. El otro se llamaba José Villar Granjel.

La peripecia de la compra ocurrió más o manos de este modo: O Vello dos Contos llevaba años ilusionado con la idea de convertir la antigua casa de Rosalía en un símbolo de nuestra cultura. Por eso cuando llegó a sus oídos la noticia de que su propietaria la había puesto a la venta, se apresuró a desplazarse hasta Padrón para interesarse por las condiciones de la operación.

Mosquera Pérez regresó a Santiago algo desencantado: la dueña valoraba el inmueble en 100.000 pesetas, una fortuna en aquel 1946, cuando todavía retumbaba el eco de los cañonazos de la guerra. Después de largas meditaciones, en lugar de rendirse, O Vello dos Contos decidió acudir a uno de sus amigos más íntimos, José Villar Granjel, quien disfrutaba de una situación económica lo bastante holgada como para hacer frente a semejante inversión.

Mosquera Pérez contó a Villar Granjel su intención de convertir la Casa da Matanza en un símbolo de galeguidade y fundar un Patronato compuesto por gallegos y gallegas ilustres que contribuyese a preservar la memoria de Rosalía.

Su amigo se entusiasmó tanto por el proyecto como el propio Mosquera y, a los pocos días, se trasladaron juntos a Padrón para tratar de llegar a un acuerdo con la propietaria de la casa.

Cuando supo que la intención de aquellos dos hombres era hacer de su vivienda un santuario de la cultura gallega, la dueña trató de reservarse un puesto como miembro del futuro Patronato y el derecho a sentarse, tanto ella como su hija, en la mesa de trabajo de Rosalía cuando les placiese. Con no poco esfuerzo, lograron hacerla desistir de aquellas pretensiones y apalabrar la compra de la casa en un precio de 85.000 pesetas.

José Villar Granjel satisfizo el importe íntegramente. Sin embargo, puesto que el empeño y la ilusión de O Vello dos Contos habían resultado tan determinantes para la adquisición de la vivienda como el capital del comerciante, decidieron escriturarla a nombre de los dos.

Así se lo contaba José Mosquera Pérez a Ramón Otero Pedrayo en una carta sellada el 10 de enero de 1947: «Villar Granjel aportou o capital íntegro, pro foi dexexo meu facer a merca de por mitá -e así se fixo- garantizando eu a miña parte co que hoxe teño ou poida ter mañá».

El caso es que la compraventa se rubricó finalmente en Padrón el 29 de diciembre de 1946 y que, inmediatamente después de la firma, Mosquera y Villar se dirigieron a la oficina de Correos con la intención de enviar un telegrama anunciando la buena noticia a los centros gallegos de la Habana, Nueva York, Río de Janeiro, Montevideo, Buenos Aires y Santiago de Chile.

El telegrama que dictaron decía así: «Mercada Casa de Rosalía para adicala, con axuda galegos todos, futuro santuario galeguidade. ¡Ei Terra! Forte aperta irmáns. Mosquera Perez-Villar Granjel». Sin embargo, después de una consulta por parte del empleado de correos, hubieron de modificar el texto, pues no se autorizaba la transmisión de mensajes escritos en idiomas diferentes del castellano, el inglés o el francés.

A su regreso a Santiago, José Mosquera se reunió con los señores Bouza, Carro, Pedret, Fraguas y Cordero Carrete para explicarles el propósito con el que habían adquirido la Casa da Matanza y encomendó al Sr. Bouza la redacción de los estatutos del futuro Patronato al que habrían de donarla.

El día 15 de noviembre de 1947 se constituyó el Patronato Rosalía de Castro en el Hotel Compostela de Santiago y catorce días mas tarde fallecía José Villar Granjel. En su testamento «legaba a la Fundación o Patronato Rosalía de Castro, si existiera oficialmente, la parte que le pertenecía de la casa de la Matanza de Padrón y, si no existiese ésta, la dejaba a su muy querido amigo D. José Mosquera Pérez». Este es el relato de cómo, gracias a la visión de O Vello dos Contos y a la aportación altruista de José Villar Granjel, la Casa de Rosalía de Castro fue comprada para disfrute de todos los gallegos.

No está de más, de vez en cuando, refrescar un poco la memoria.

Por Manuel Villar
EL CORREO GALLEGO, 10/06/12

Archivan la denuncia de una edila del BNG contra Sabariz por perseguirla.

El juzgado acordó el sobreseimiento de la causa abierta a raíz de una denuncia presentada por Cecilia Tarela.

El juzgado número 2 de Caldas ha ordenado el «sobreseimiento provisional y el archivo» de proceso abierto a raíz de una denuncia presentada por Cecilia Tarela, concejala del BNG de Pontecesures contra Luis Sabariz, edil de ACP en el mismo ayuntamiento. Según esa denuncia formulada en el mes de febrero, Sabariz habría seguido a la nacionalista hasta su domicilio, situado en Padrón.
El relato de Tarela, sin embargo, no fue refrendado por las pruebas. «Al no resultar debidamente justificada la perpetración del dellito, procede acordar el sobreseimiento provisional y el archivo de la mismas», dice el auto dicado por el juzgado nº 2 de Caldas.
Luis Ángel Sabariz Rolán, el acusado en este aso, dijo ayer preferir «ni hacer valoraciones de este asunto tan desagradable». «Cada uno que saque sus propias conclusiones sobre la actuación de la señora Tarela contra este concejal», argumenta Sabariz.
Recuerda que Tarela formuló una denuncia el 22 de febrero en el cuartel de la Guardia Civil de Valga, en la que narraba que Sabariz la había perseguido desde Pontecesures a Padrón y que no era la primera vez que esto ocurría. Esa denuncia por «coacciones» no tuvo ningún eco en los organismos judiciales que instruyó diligencias previas para, tras ello, archivar la causa. La denunciante, por su parte, tampoco insistió más en el asunto; no presentó recurso contra esta decisión, por lo que la resolución es firme.

LA VOZ DE GALICIA, 02/06/12

Sobre la Fundación Camilo José Cela.

Cuando un cronista dedica un relato con magia, solo tiene que poner en marcha su imaginación; si la exposición trata de una opinión, goza de libertad individual de expresión; pero no se puede confundir al lector difundiendo una crónica engañosa sobre un tema que está en los juzgados.

Por tal razón, quiero sanear fielmente la mala observación del señor Castro, dejándose llevar por suposiciones.

Como denunciante de las presuntas irregularidades que, desde hace años, asolan la magna Fundación CJC, doy fe de que existen documentos fidedignos y razones contundentes por las que la sede iriense padece decadencia moral y económica.

El gran legado del nobel Camilo José Cela gozó desde el principio de todo el apoyo económico, político y cultural de alto rango. Tras el fallecimiento del fundador, postergando el artículo 13 de los estatutos de la sede, nombraron a Marina Castaño presidenta de la fundación, por la que no pasa ni de visita. Eso sin mencionar los trasiegos denunciados.

Desde el año 2002 no se volvieron a difundir las ediciones de los cursos de verano, que tanta relevancia le daban a la obra celiana y a la localidad padronesa. Decayeron las visitas y la revista Extramundi; mientras la nómina del exgerente, crecía demesuradamente. Por todo ello, defenderemos unánimes el legado de Cela, dejando que los jueces digan la última palabra.

Por Lola Ramos. * Fundadora presidenta de la Asociación Padrón Lírico D.C.

El Premio Cela recae en un relato procedente de Perú.

El perseguidor, de Javier Alejandro Mariscal Crevoisier, es el título del relato ganador del vigésimo segundo Premio Literario Camilo José Cela de Narrativa, fallado días atrás en el Concello de Padrón. El premio tiene una dotación económica de 1.500 euros, junto con una estatuilla del escritor padronés y un diploma acreditativo.
Para conceder el galardón por unanimidad, el jurado del certamen valoró «a orixinalidade e valentía da proposta, o tratamento da enunciación narrativa e a súa complexidade temática», asentada «nun exercicio de intertextualidade que pon en xogo a participación do lector».
A esta edición del certamen se presentaron un total de 172 relatos, procedentes de diversos países. De hecho, el ganador es de origen peruano.

LA VOZ DE GALICIA, 27/12/11