Los vehículos no pueden realizar el giro a la izquierda en A Escravitude.
Desde Padrón, los vehículos no pueden acceder a las empresas debido a la línea continua.
Desde hace dos años, aproximadamente, la señalización horizontal de la carretera Nacional 550 a su paso por el lugar de Loureiro, en A Escravitude, en el municipio de Padrón, está condicionando la actividad diaria de varias empresas situadas en este punto, cuyos vehículos, en su mayoría pesados, como los de una firma de grúas y transportes u otra de piensos, se ven obligados a circular varios kilómetros en dirección a Santiago para regresar y acceder a las instalaciones de las firmas, una vez que no pueden hacer un giro a la izquierda al existir línea continua.
El organismo Demarcación de Carreteras del Estado en Galicia acaba, precisamente, de arreglar el firme de esta vía, renovando la señalización horizontal, pero en este punto de A Escravitude vuelve a ser una línea continua, al parecer motivada por el intenso tráfico de la carretera. A mayores, el tramo en el que se ubican las empresas coincide con el final de un carril lento, que supone el único punto en el que se puede adelantar desde Padrón y que lleva al organismo de Carreteras a no querer autorizar que los vehículos se puedan detener en la vía para realizar el giro a la izquierda, según explica el portavoz de la firma de grúas y transportes, Manuel Vidal Seage.
De acuerdo con cálculos de esta empresa, a diario salen y entran solo de sus instalaciones en torno a un centenar de vehículos, desde grúas a camiones, que para regresar desde Padrón no pueden cruzar la línea continua y se ven obligados a recorrer entre 8 y 9 kilómetros más para ir a la glorieta de Casalonga, en el municipio vecino de Teo, y realizar el cambio de sentido. A ellos hay que sumar, además, varios camiones más de la empresa de piensos.
Glorieta
Hay otra glorieta situada antes de ese punto de Teo, la que construyeron hace poco tiempo por las obras del AVE en la pista que, desde el santuario, conduce a Rois pero que no permite el giro a los camiones, según explican los afectados. Por ello, ese desplazamiento extra de unas cien máquinas al día, de veinte kilómetros de ida y vuelta desde la glorieta de Teo, supone un gasto a mayores al mes de más de 2.000 euros en gasoil, según el portavoz de la firma.
Para tratar de buscar una solución a la problemática de tener línea continua en los accesos a las empresas, en su día hubo una propuesta para construir en este punto de A Escravitude una rotonda pero, a día de hoy, las firmas instaladas en la zona ven más factible habilitar un tercer carril en este tramo de la N-550, para aquellos vehículos que quieren apartar y girar a la izquierda.
Para ello, sería necesario ocupar terreno a los lados de la vía para ganar espacio y dar cabida a ese tercer carril pero esto, en principio, no sería un problema porque, por ejemplo, la firma de grúas asegura que «sería a primeira en cedelo», según cuenta Manuel Vidal. La opción del tercer carril sería, además, menos costosa. La solución está en manos de Fomento, que, según los afectados, no puede consentir por más tiempo esta situación.
La Voz de Galicia