Denuncia que una pediatra no atendió a su hijo «por haber ido a más médicos».

Una madre denuncia que en octubre la sustituta de la pediatra de su hijo se negó a atender al pequeño en el centro médico de Santiago, pese a que «en el PAC de Valga me indicaron que lo llevara a su pediatra»

Eva Rodríguez Vigo denunció que el pasado mes de octubre la sustituta de la pediatra de su hijo se negó a atender al pequeño en el centro médico de Santiago, pese a que «en el PAC de Valga me indicaron que lo llevara a su pediatra».

La mujer, que puso el 21 de octubre una denuncia en el servicio de atención al paciente, explicó que, por razones personales, está residiendo temporalmente en Padrón y «por ello al ponerse el niño malo, lo llevé al PAC de guardia en Valga. Me dieron Dalsy y Apiretal y me recomendaron, al no ser pediatras, que lo llevara al suyo». La denuncia no ha sido contestada de momento por el Sergas.

El niño, de 16 meses, «seguía con fiebre alta, otitis y estaba muy fatigado, unos síntomas que unos meses antes provocaron que tuviera que estar ingresado», por lo que «estábamos muy preocupados». Al demorarse varios días la cita para su facultativo, en el propio ambulatorio «nos dijeron que fuéramos para ser atendidos de urgencia»; sin embargo, al llegar allí, «la pediatra, ya con el niño medio desnudo, comenzó a increparme, diciendo que me dedicaba a pasearlo por los médicos, que no era una urgencia y que tenía mucha cara». Según la madre, la doctora «no me dejó vestir al niño en la consulta y me echó». La única explicación para no atender al menor fue «que había ido a más médicos», pero «el niño estaba mal y no sabía qué hacer. No podía darle la medicación del inhalador que nos dieron hace meses».

La Voz de Galicia

Padrón, Rois y Dodro reclaman que la Guardia Civil aumente la seguridad en la comarca.

A raíz de los últimos robos ocurridos en Padrón, dos en una empresa (el más reciente en el polígono de Pazos), además de una vivienda y un bar, el Ayuntamiento padronés, junto con los de Rois y Dodro, han iniciado conversaciones con la Delegación del Gobierno en Galicia para demandar un incremento de la seguridad, así como del horario de apertura y vigilancia del cuartel comarcal de la Guardia Civil, según informa el alcalde de Padrón, Antonio Fernández.

Para ello, los regidores quieren reunirse con el delegado del Gobierno, Santiago Villanueva. A mayores, el Concello de Padrón convocará una junta extraordinaria de seguridad, todo ello apoyado en un informe de la Policía Local.

El incremento de la seguridad en Padrón y comarca es una demanda que está en la calle desde hace tiempo, a la vista no solo de los robos que, a menudo, se producen por rachas de tiempo, sino por otros hechos. Hace años que el cuartel de la Guardia Civil de Padrón abre solo por las mañanas aunque, por ejemplo, la semana anterior estuvo cerrado dos jornadas matinales.

Y el lunes pasado la Guardia Civil no disponía de patrulla por la mañana por lo que tuvo que tirar de la Policía Local para atender un incidente en una empresa y trasladar al detenido al cuartel.

Además, hace tiempo que Padrón no tiene patrulla de la Guardia Civil propia todas las tardes y noches, sino que tienen que acudir de otros puestos como Rianxo, Porto do Son o Noia, un hecho que muchos padroneses y convecinos de Rois y Dodro lamentan y denuncian. Sin patrulla de Padrón propia, los más perjudicados son los municipios de Rois y Dodro, puesto que no tienen Policía Local, como sucede en Padrón y, por tanto, quedan «desasistidos». Conscientes de ello, los tres alcaldes iniciaron conjuntamente gestiones con la Delegación del Gobierno y, en el caso de Padrón, atendiendo además una moción aprobada hace un año para que se aumente la seguridad.

La Voz de Galicia

Los apóstoles de la FP alemana.

Doce jóvenes que rozan la veintena son los primeros alumnos de la zona que probarán un modelo formativo en el que participan las empresas.

alumga

Cristina tiene una mirada directa y un camino bien trazado. O eso parece. Esta joven de Valga, estudiante del Ciclo Superior de Estructuras Metálicas en la modalidad dual, es la única mujer en un «mundo de homes». Todos sus compañeros son chicos. Y ahí se acaban las diferencias. Por que, por lo demás, todos rozan la veintena, unos por arriba y otros por abajo. Y todos, como Cristina, han visto en la nueva oferta formativa lanzada por el instituto valgués una puerta de entrada al mercado laboral. «Eu fixen Automoción, pero non atopei traballo. Cando me enterei desta posibilidade pareceume moi boa idea». Y aquí está Cristina, en el amplio taller del instituto, con su funda de trabajo, su visera protectora, sus guantes, y su gesto de decisión.

No es la primera vez que es la única chica de la clase. Ya cuando estudiaba en Santiago se vio rodeada de varones. «E non tiven ningún problema», aclara rápido, para desdramatizar. Igual que demostró que destripar motores es cosa de mujeres, ahora se adentra en el mundo de las construcciones metálicas dispuesta a dar el do de pecho, «a demostrar que sirvo para isto» y a hacerse un hueco en la empresa por la que ha sido seleccinada para recibir la mitad de su formación, convertida en una estudiante-trabajadora. «Eu quero aproveitar esta oportunidade», sentencia. Y lo mismo dicen sus compañeros de clase.

La mayoría son chavales formados. Unos son bachilleres, otros ya han hecho algún ciclo formativo. Todos traen conocimientos en la mochila «e moita seriedade na forma de actuar», según explica uno de sus profesores, Antón Castro. «O principal é que saben o que queren e que están mentalizados. Queren traballar, ven que teñen posibilidades de conseguir un emprego, e están moi centrados», asegura este docente, que agradece no tener que estar permanentemente reclamando atención. «Ao contrario. Como todos teñen coñecementos previos dunha cousa ou doutra, axúdanse moito, explícanse as cousas que non entenden…».

Antón Castro dará clase a este grupo de pioneros de la llamada FP alemana hasta principios del año que viene. Después, los estudiantes cambiarán las aulas y el taller del instituto por las empresas en las que compaginarán formación, trabajo y un sueldo. Una bolsa de empleo de 350 euros que, explican los alumnos, «é outra das cousas que fai interesante» la oferta formativa que este año ha convocado en Valga a estudiantes llegados de varios puntos de Galicia.

De lejos
Algunos vienen de lejos, como Iván, un chaval de 20 años que vive en Salceda de Caselas. Otros de más cerca, como otro Iván, de 18 años y natural de Cuntis. Para él, el ciclo tiene un valor añadido. «Nesta zona hai moitas empresas que se dedican a isto. Eu vou formarme nunha delas durante dous anos, e penso que iso me vai beneficiar: vou estar mellor preparado que calquera outro para quedar nesa empresa, e vou saber adaptarme mellor a calquera outra», reflexiona.

Ángel, que es de Ribadumia, también está satisfecho con su entrada en la modalidad dual del Ciclo Superior de Construccións Metálicas. ?l, con sus 26 años de edad, es de los más veteranos de la clase. Y la verdad es que tiene una experiencia de la que sus compañeros carecen: la de darse de bruces una y otra vez con el mercado laboral. Y no es que no esté formado: tiene el título de Bachiller y dos ciclos profesionales. Estaba haciendo un curso en el INEM y trabajando en la vendimia cuando supo que en Valga había una puerta a la que llamar. «Por moitos estudios que teñas, se non tes prácticas non te van coller en ningún sitio», dice con la voz de la experiencia. Los períodos de prácticas que contemplan los ciclos de FP no son suficientes: «Un mes é moi pouco tempo, non é nada. Dous anos, como imos facer nós agora, xa é outra cousa», señala.

El director del instituto de Valga, Roberto Barral, asiente con la cabeza a medida que los alumnos van exponiendo sus esperanzas, sus planes. A su juicio, el modelo de la FP Dual está lleno de ventajas y de posibilidades para los estudiantes. Por eso el centro decidió apostar por la llamada formación profesional alemana, aunque ello haya supuesto tener que fijar las clases en horario de tarde, incorporar dos nuevos profesores al centro, y pelear para conseguir ampliar el servicio de subalternos para acoplarlo a las nuevas necesidades horarias.

A final de curso se sabrá si el esfuerzo ha valido la pena.

nueva oferta educativa el ciclo superior de construccións metálicas dual

Pese a su juventud, los alumnos llegan con títulos previos en sus mochilas

Todos confían en hacerse un hueco en las fábricas a las que van a incorporar

Una fórmula que permite adecuar el aprendizaje a la realidad de cada sector productivo
Este año, la formación que los estudiantes recibirán en el instituto de Valga se prolongará hasta la primavera. Será en abril o mayo -las fechas no están aún cerradas- cuando se trasladen a las cinco empresas en las que se formarán de la mejor de las formas posibles: con la práctica.

No ha costado demasiado trabajo encontrar empresarios del sector del metal interesados en formar parte de este proyecto. En primer lugar, porque en Valga y su entorno abundan las empresas dedicadas a este sector. En segundo término, porque son firmas acostumbradas a debatir e incidir sobre cuestiones formativas. ¿Acaso es una casualidad que en el Instituto de Valga se impartan dos ciclos -el medio de Calderería, el superior de Construccións Metálicas- tan vinculados a la economía del metal? Pues no, no lo es. Es fruto de la coordinación de la comunidad educativa, las empresas y el Concello.

Ahora, con la implantación de la modalidad de FP Dual, empresarios como Juan Castaño (ODL) esperan ver superado uno de los problemas con los que, asegura, se encuentra muy a menudo. «Paréceme unha cousa interesante para tratar de formar xente que poida quedar despois na empresa. Ás veces chégannos rapaces que teñen moita teoría e moita carreira, pero que o primeiro ano non saben facer moitas cousas».

El Ciclo Superior de Construccións Metálicas Dual de Valga es el único de esta clase que se imparte en Galicia. En este territorio existen cinco proyectos experimientales similares al que se desarrolla en el Baixo Ulla, vinculados a sectores como la hostelería, dependencia, electromecánica y química industrial.

La Voz de Galicia

Tres caballos sueltos sorprenden a usuarios de la autopista en Padrón.

A galope, tres caballos (dos machos y una hembra) de un vecino de Herbón, en Padrón, estrenaron la semana con aventura peligrosa pero, afortunadamente, sin consecuencias para ellos ni para los conductores de la autopista. Los tres animales enfilaron a primera hora de la mañana de ayer la AP-9 en dirección Santiago, a la que accedieron por el peaje de Padrón tras escapársele al dueño, que los había puesto a pastar en una finca, sobre las nueve de la mañana.

La parcela se sitúa cerca de la rotonda de la variante de Padrón, que los caballos tomaron para dirigirse hacia la autopista. El propio vecino de Herbón fue detrás de ellos y el primero lo capturó enseguida, a la altura del viaducto de Manzanillo, en la zona de A Picaraña, mientras que los otros dos los detuvieron en el peaje de Teo, después de recorrer unos 15 kilómetros.

Pese a la presencia de los animales en la vía, no hubo que lamentar incidentes. Según contó ayer el propietario de los mismos, fue la hembra Lusi la primera que escapó y, tras ella, los dos machos. El propietario movilizó dos vehículos para retirar los animales y traerlos de vuelta a casa.

Uno de ellos tenía unas heridas leves de rozar en el asfalto y otro estaba deshidratado, por la carrera a galope. Los tres animales dieron bien la mano, tanto a su dueño como a las otras personas que los pararon en el peaje de Teo. El propietario de los caballos desconoce por qué los animales rompieron su rutina diaria para darse un paseo por el asfalto, eso sí, demostrando la fama de inteligentes que tienen los caballos, ya que accedieron a la autopista por la entrada principal de Padrón, en este caso el peaje. La hembra lo hizo después de saltar la barrera y los machos pasaron de lado, ante el asombro del personal de cabina.

La Guardia Civil de Tráfico se desplazó hasta la autopista ya que, por la presencia de los animales, hubo retenciones de coches y tráfico lento. Entre los conductores, mucha sorpresa y algunos acompañantes sacaron fotografías y hasta algún vídeo. Tráfico también tomó los datos del vecino de Herbón y de los tres animales que se le escaparaon.

De vuelta en casa, los caballos volvieron a la finca a pacer como cualquier otro día, pero un poco más cansados tras la aventura.

La Voz de Galicia