El proyecto de construcción de un polígono industrial de 327.000 metros cuadrados en Pontecesures, impulsado por la Xunta de Galicia y que está en fase de exposición pública, está levantando un gran rechazo en la zona. La plataforma vecinal creada por medio centenar de vecinos de Redondo, así como partidos políticos, como PSdeG y BNG, e incluso ayuntamientos limítrofes como Valga, muestran su oposición a una instalación que se prevé construir sobre un humedal, afectando a la biodiversidad de la zona, pegado a las viviendas y muy próximo al Camino de Santiago y a la zona de la Red Natura 2000, según denuncian.
Los vecinos afectados remiten, entre otros, el informe de Augas de Galicia que afirma que el parque empresarial se pretende levantar sobre una zona húmeda como la de Tarroeira. También quieren conocer las características técnicas detalladas de la balsa filtrante con la que se tratarían los residuos líquidos del polígono y conocer quién se ocupará de su control y mantenimiento. Algunos partidos , como Valga Viva, piden datos sobre el impacto del aumento del tráfico en la N-550 y la carretera provincial que conectan Valga y Pontecesures a través de un estudio de la Demarcación de Carreteras del Estado, que tampoco aparece en la documentación del proyecto, aprobado inicialmente y sometido a exposición pública.
En cuanto al colectivo vecinal de Pontecesures afectado directamente por el proyecto, que congrega a cerca de un centenar de familias del lugar de Redondo y Tarroeira, se felicitan por el apoyo de vecinos de Valga que también cuentan con gran preocupación al estar el polígono lindando con sus viviendas. “Todos nosotros nos sentimos gravemente perjudicados por quedar nuestras viviendas adosadas a las naves, sin ningún tipo de separación pero consideramos que perjudicados somos todo Pontecesures y Valga en primera persona. Como afectados de manera secundaria se encuentran Catoira y Cuntis, puesto que tienen gran bolsa de terreno industrial vacío y el aumento de oferta minimizará la demanda general de dicho suelo, siendo de la misma comarca”, indican en una nota.
Explican que tras una primera revisión de la documentación del Proyecto con Aprobación Inicial del PIA Parque Empresarial de Pontecesures, “encontramos muchos temas objeto de alegación por contener errores o no ajustarse a la realidad”, explican adjuntando los informes.
Los vecinos se sienten abandonados y decepcionados con su gobierno por no posicionarse a favor de los afectados como ha hecho Valga. “Lamentamos de que el tripartito no tenga esas ganas de defender los intereses de sus vecinos y evitar que el futuro de Pontecesures se vea penalizado por un mal proyecto”. Solo esperamos que la visión del gobierno autonómico, y también popular, se encuentre del lado de la lógica, buscando el bien común en el aprovechamiento de los recursos tanto económicos como naturales, el respeto al medioambiente y el respeto a la calidad de vida de los vecinos”.
Por su parte, tanto el PSdeG como el BNG han presentado proposiciones no de ley en el Parlamento de Galicia, solicitando la aclaración de puntos críticos del proyecto, así como la paralización del mismo.
Alertan de la falta del informe de Augas de Galicia y la lista de actividades del parque, también de un dudoso sistema de depuración y de la presencia de especies animales protegidas. Aplauden a Bello Maneiro por defender en este asunto a los valgueses, que piden ayuda al colectivo movilizado
La cuenta atrás para la construcción de un polígono industrial de 326.000 metros cuadrados en Pontecesures avanzó de golpe esta semana con el anuncio del Instituto Galego da Vivenda e Solo (IGVS) del sometimiento a exposición pública de la aprobación inicial del proyecto. Un trámite que permitirá durante un mes la presentación de alegaciones en contra por parte de cualquier interesado que lo estime necesario. Un derecho que, ya han adelantado, ejercerán las alrededor de un centenar de familias del lugar de Redondo, limítrofe con la futura área fabril, que desde hace semanas se mantienen en pie de guerra frente a la iniciativa de la Xunta respaldada por el gobierno local encabezado por Juan Manuel Vidal Seage (PP). Tras un primer acercamiento a la documentación, el colectivo ha adelantado que prepara «unas alegaciones bien fundamentadas» sobre el expediente del proyecto del que, por primera vez, disponen de información detallada tras su obligada exposición pública. Con la documentación en la mano, estas son sus principales razones para rechazar el polígono.
INUNDACIONES
Un estudio que niega los flujos de agua en el terreno catalogados por el Estado
El colectivo vecinal de Cesures en contra de la construcción del parque empresarial en la zona de Tarroeira advierte de que «el equipo redactor del proyecto pretende quitarle importancia a la existencia de agua superficial y subterránea» en el terreno sobre el que se proyecta la dotación industrial. Así, señala, Xestur, ente de promoción de suelo empresarial de la Xunta, solicitó un estudio hidrológico del terreno sobre el que se ubicará el polígono, en el que «descataloga y resta importancia a todos los flujos de agua existentes —recogidos en los registros de la Demarcación Hidrográfica Galicia-Costa— sin la confirmación de Augas de Galicia» con lo que, alertan los ciudadanos del lugar de Redondo, «no está analizado el impacto que la construcción del polígono industrial tendrá sobre las poblaciones próximas de A Charca, A Devesa y Campaña», en el municipio de Valga.
TRATAMIENTO DE RESIDUOS
Confirman la balsa filtrante como sistema de depuración
Sistema Urbano de Drenaje Sostenible (SUDS). Esta es la solución que la Xunta tiene prevista para el tratamiento de los residuos generados por las empresas que se instalen en el polígono cesureño. El mismo que ya habían encontrado los vecinos movilizados en el borrador del proyecto. Nada se sabría de quién se ocupará del control y mantenimiento de la balsa filtrante, situada en la zona verde que ocupará el costado oeste del parque empresarial, lindando con la zona médica, escolar y deportiva de Baño (Valga) y con numerosas viviendas con pozos de agua para consumo propio y plantaciones para autoconsumo. «Tenemos serias dudas de que este sistema funcione» señalan desde el colectivo cesureño.
ACTIVIDADES INDUSTRIALES
Ni una letra sobre qué tipo de empresas se instalarán
Los vecinos que verán levantar el parque empresarial de Pontecesures a las puertas de sus viviendas no han encontrado en la documentación del proyecto referencia alguna a qué tipo de empresas irá destinado. Sí una referencia a que «se flexibiliza la oferta de suelo empresarial, con una tendencia si bien a las parcelas de gran tamaño», cuestión que choca al colectivo, por cuanto, indica, «la gran mayoría de las empresas locales son de pequeño o mediano tamaño». Además, dicen desde la plataforma vecinal: «Se confirma que las viviendas de Pontecesures son las grandes perjudicadas, puesto que se verán engullidas por un gran polígono industrial sin espacio de separación».
OTRAS ALTERNATIVAS
Grandes cantidades de suelo industrial disponibles en concellos de la comarca
«El Instituto Galego de Vivenda e Solo debería estudiar por qué existe gran cantidad de suelo industrial disponible en los polígonos de Catoira, a 9 kilómetros de Pontecesures, de Cuntis, a 12 kilómetros, pertenecientes a la misma comarca, o Rianxo, a 17 kilómetros o 15 minutos en coche», y, aún con ello, apuntan los vecinos del lugar de Redondo, pretender levantar un nuevo polígono en un terreno al que, añaden, la Xunta habría dado una puntuación de 0 en materia de condiciones geotécnicas para la construcción por el suelo no compacto y húmedo de la zona escogida.
MEDIO AMBIENTE
Cinco especies animales protegidas y zona de recuperación de una de ellas
La documentación del proyecto para la aprobación del plan del polígono de Cesures reconoce, informan los vecinos en contra, que el terreno elegido «Se incluye dentro del Plan de Recuperación de la escribenta das canaveiras—emberiza schoeniclus, una especia de pájaro—, la cual está en peligro de extinción». Además, el terreno figura dentro del Plan de Gestión del Lobo y en el entorno de implantación del polígono existen tres especies de anfibios, un pez continental y el ave mencionada «protegidas bajo normativas autonómicas y estatales». También se ignoraría la presencia de dos hábitats vegetales.
FALTA DE INFORMES OFICIALES
Augas de Galicia, Consellería de Medio Ambiente y Dirección General de Carreteras
Los vecinos exigen que Augas de Galicia redacte su informe sectorial de autorización, aún pendiente, critican que la Xunta emplease el método simplificado para la Evaluación Ambiental Estratégica del proyecto y reclaman que desde la Dirección General de Carreteras del Ministerio de Transportes se estudie el impacto que el aumento de tráfico tras la apertura del polígono tendrá en la N-550.
Aplauso a Bello Maneiro por defender en este asunto a los valgueses, que piden ayuda al colectivo movilizado
«Nos alegramos de que el alcalde Bello Maneiro se haya posicionado como defensor de los intereses de los vecinos de Valga y no dude en luchar y alegar contra el proyecto». Así reaccionaron los afectados cesureños a la información con la que La Voz hacía pública la oposición del Concello de Valga a parte del plan del polígono vecino. En paralelo, el colectivo manifiesta: «Lamentamos que el tripartito que gobierna Pontecesures no tenga esas ganas de defender los intereses de sus vecinos» con ambos concellos con alcaldes del PP; partido que también dirige la Xunta, de la que confía acabe posicionándose «del lado de la lógica».
Las familias cesureñas afectadas cuentan que vecinos de Valga lindantes les han pedido reunirse con ellos preocupados por el posible agravamiento de sus problemas con las inundaciones y accidentes de tráfico con el futuro polígono.
Tras confirmar seis casos positivos de contagio por Covid-19, el gobierno tripartito de Pontecesures ha decidido incrementar las medidas de desinfección y limpieza a lo largo y ancho del municipio, no sin antes apelar a la responsabilidad del conjunto de la ciudadanía para cumplir los consejos y restricciones de las autoridades sanitarias.
El alcalde, Juan Manuel Vidal Seage, confirma la existencia de esos seis casos que dieron positivo en las pruebas realizadas y aclara que «todos ellos se encuentran en fase de seguimiento domiciliario por parte de sus respectivos médicos de Atención Primaria». Al igual que hace hincapié en que ninguno de los afectados está ingresado en el hospital.
El ejecutivo local aprovecha para recordar las medidas de prevención y seguridad de obligado cumplimiento, tales como el uso de la máscara facial en todo momento, «aunque se pueda garantizar la distancia de seguridad interpersonal de 1,5 metros, y siendo necesario que cubra desde el tabique nasal hasta el mentón, incluidos».
Como también resalta que los locales de hostelería y restauración «deberán cerrar antes de la una de la madrugada, sin que esté permitido el acceso de cliente desde medianoche».
Con estos casos confirmados en Pontecesures puede decirse que siguen extendiéndose los contagios en el territorio del Ullán, donde también se han dado otros tanto en Catoira como en Valga.
El gobierno
tripartito de Pontecesures se dispone a mejorar las redes de saneamiento
y abastecimiento de la localidad. Lo hace con cargo al Plan Concellos de la Diputación y con una inversión prevista de casi 34.000 euros que se destinará a calles como Carlos Maside y Ullán.
En
el gobierno de Juan Manuel Vidal Seage indican que la primera de ellas
tiene una red de saneamiento que presenta problemas de capacidad,
mientras en el abastecimiento de Rúa Ullán se producen constantes
roturas.
También va a actuarse sobre la calle Borobó,. en el cruce con Camiño Infesta, donde se registran también importantes roturas «y es necesario iniciar un ramal de pluviales». Asimismo, en la avenida de Vigo -cruce con Rúa Ullán- van a corregirse las roturas en la tubería de abastecimiento que suelen inundar la zona baja de un edificio.
La elaboración del documento en el anterior gobierno PSOE-BNG había contribuído a forjar la moción de censura que dio el poder al PP.
Juan Manuel Vidal Seage, el alcalde conservador de Pontecesures, al frente de un gobierno tripartito de seis integrantes, libró y ganó el lunes la que puede considerarse su primera gran batalla desde que, a mediados del apsado mandato, tomó las riendas de este municipio ribereño.
Y es que el primer edil y su equipo consiguieron sacar adelante la RPT, precisamente el documento que contribuyó a derrocar al anterior gobierno PSOE-BNG madiante la moción de censura que dio el bastón de mando al popular.
Fue, el del lunes, uno de esos plenos importantes que tratan cuestiones de calado y que, para bien o para mal, pueden marcar el futuro de una localidad.
Sabedor de la importancia de la sesión, el alcalde no oculta su «enorme satisfacción» tras sacar adelante la RPT. Lo hizo con los votos favorables de su gobierno, la abstención de la oposición y, «lo más importante, con el visto bueno de las centrales sindicales y el respaldo de la inmensa mayoría de los trabajadores de ahí que lo considere un paso importante fundamental para garantizar una mejor organización del Concello».
Esa «mejor organización» a la que alude «irá en beneficio tanto de los trabajadores como del conjunto de vecinos, así como de este gobierno y de los que estén por venir, ya que se genera estabilidad en la plantilla formada por 27 personas».
Explica igualmente que «el informe de Secretaría fue completamente distinto «al emitido ante la RPT que panteaba el anterior gobierno PSOE-BNG. Y lo fue porque, a diferencia de la suya, nuestra propuesta es asumible puesto que planteamos 60.000 € menos de incremento salarial que el anterior gobierno.»
Además, «el contexto de estabilidad financiera es ahora muy diferente al de 2016, cuando las decisiones adoptadas por el PSOE y el BNG acabaron costándoles el gobierno».
El PSOE de Pontecesures denuncia la «dejadez y desidia» del gobierno tripartito de la localidad, ya que cree que esas son las razones por las que este Concello perdió más de 18.500 euros.
Los socialistas hablan, más concretamente, de 18.550.47 euros correspondientes al Plan Concellos
2017 de la Diputación de Pontevedra. Y explican que es dinero
«procedente de las bajas introducidas en las adjudicaciones de la obra
de reurbanización de un tramo de la calle Paxareira, por valor de 12.140
euros, y de reurbanización de un tramo de Infesta, que costó 21.830
euros».
Esto
supone «un total de 33.970,73 euros, de los cuales el gobierno
reinvirtió 15.420,26, destinados a la reforma del parque de Grobas».
Pero el ejecutivo local «fue incapaz de ejecutar y justificar alguna
otra obra en la que invertir los 18.550 euros restantes, por lo que ese
dinero se perdió definitivamente», lamentan los socialistas.
Terminan diciendo que «es una nueva muestra de que este gobierno sale muy caro, pues a lo que cobra se suma el hecho de que no hace nada y, además, pierde subvenciones por falta de trabajo y mala gestión, como en este caso».