Mar de Santiago reajusta objetivos tras el relevo político en Catoira y Pontecesures.

Xoán Castaño, el alcalde de Catoira, en una imagen de archivo

Xoán Castaño, el alcalde de Catoira, en una imagen de archivo.

El nacionalista Xoán Castaño apuesta por continuar en el geodestino siempre que se modifiquen algunos de sus programas

Era una de las derivadas de las últimas elecciones municipales que seguían siendo una incógnita: ¿Seguiría vivo el geodestino Mar de Santiago tras el relevo en las alcaldías de Catoira y Pontecesures?. La respuesta parece ser un sí. El pasado martes, la localidad vikinga fue escenario de un encuentro de los alcaldes de las cuatro localidades que forman parte de este proyecto: además de Xoán Castaño y Maite Tocino, que ostentan las alcaldías nacionalistas catoirense y cesureña, en la cita estuvieron Gonzalo Durán y Bello Maneiro, los veteranos regidores populares de Vilanova y Valga. La reunión sirvió para, según el comunicado remitido a los medios por el gobierno de Castaño, «abordar os distintos proxectos e iniciativas que se levarán a cabo a través do xeodestino.

Explicó el regidor anfitrión que tanto él como el concejal de Cultura, Raúl Gómez Pato, expusieron en ese encuentro la necesidad de reajustar las líneas de actuación previstas en Catoira, y que reivindicaron «unha serie de partidas a maiores». Solucionada esa cuestión, Catoira sigue en el geodestino, aunque peleando por introducir cambios en el proyecto de As Torres, y abriendo nuevas vías tanto en la recuperación de los manantiales de aguas medicinales, como en la recuperación de la margen del río Ulla.

Por lo que respecta a As Torres, en febrero del año pasado se anunció una inyección de 300.000 euros de los fondos Next Generation para poner en valor el recinto a través de la ejecución de una constelación de pequeñas actuaciones. Sobre ese extremo hablarán hoy los responsables del concello con la Xunta para revisar esas actuaciones y negociar posibles cambios en las mismas.

«A nosa intención é situar a Catoira como destino turístico de primeiro nivel», señalan desde el gobierno local a través de un comunicado.

La Voz de Galicia

¿Quién era Ramón Diéguez Carlés?.

Ramón Diéguez Carlés nació y murió en Pontecesures, estuvo casado con María de la Paz Sierra Ramos y fue padre de José y Jorge Diéguez Sierra. Estudió Química y Farmacia en la Universidad de Santiago y trabajó en Madrid en el laboratorio del santiagués José Casares Gil, considerado uno de los más importantes farmacéuticos de España y precursor de la química en el país.

Así lo detallan en «obaixoulla.gal», donde añaden que fue propietario y director de la Cerámica Celta de Pontecesures desde 1926, cunado fusionó La Calera con Cerámica Artística Gallega.

Pero eso no es todo. Desde la asociación cultural Os Penoucos hacen constar que durante la República fue nombrado alcalde de Pontecesures, permaneciendo en el cargo desde el 25 de abril hasta el 5 de junio de 1931.

Falleció en septiembre de 1968 y pasó a formar parte de la historia de Pontecesures tanto por los motivos expuestos como por haber sido durante el franquismo, presidente de la S.D. Ulla.

Estas son solo algunas de las reflexiones que «obaixoulla.gal» expone al aludir a este empresario que se crió en una familia de pequeños comerciantes.

Faro de Vigo

Cien años de Caleras del Ulla, una de las empresas hitóricas a orillas del río.

Se cumplen cien años de una industria vinculada a Francisco Asorey, Castelao, Escuredo, Cerámica Celta y Sargadelos

Una foto de los años cincuenta en la que se aprecian Nestlé y el puerto en el que se cargaban y descargaban mercancías.

La asociación cultural Os Penoucos lanzaba en 2019 un ambicioso proyecto con el que mostrar, inventariar y tratar de preservar elementos patrimoniales, naturales y paisajísticos de los Ayuntamientos de Catoira, Dodro, Padrón, Pontecesures, Rianxo y Valga.

Se conoce como «Obaixoulla.gal:Patrimonio, territorio e paisaxes», y se centra en hórreos, cruceros de piedra, fuentes, lavaderos, iglesias, capillas, molinos, antiguas industrias y todo tipo de elementos (hasta completar unos 3.000) con los que completa un álbum digital de indudable valor etnográfico.

Todos esos elementos aparecen documentados, clasificados y geolocalizados con mapas libres y lo mejor de todo es que ese catálogo digital está al alcance de todos enla web «obaixoulla.gal».

Una herramienta con la que redescubrir la historia del curso bajo del Ulla, y constatar, por ejemplo, que se cumplen cien años desde el nacimiento de Caleras del Ulla, una fábrica de cal que fue el germen de una marca que se hizo tan popular como Cerámica Celta.

Os Penoucos se encarga de recordar que fue en 1923 cuando Ramón Diéguez Carlés puso en marcha esa calera que se situaba en la zona de Porto, a orillas del Ulla y a escasos metros que, en 1939, ocuparía la fábrica de Nestlé.

Según el relato que refresca esta historia, la solicitud de licencia de construcción de la fábrica hacía alusión a la puesta en marcha de dos hornos, uno de cocción de baldosa y artículos análogos y otro para calcinar cuarzo pedernal y carbonato cálcico.

Esto lleva a Os Penoucos a aclarar que aquel proyecto de aquella calera del Ulla iba a ser el embrión de la futura Cerámica Celta.

No sin antes incidir en que «la materia prima era, posiblemente, de procedencia asturiana, y llegaba en naves que descargaban inicialmente en el puerto de Cesures» hasta que posteriormente se construyó un pequeño embarcadero de piedra más próximo a la fábrica y sus hornos.

Fue a instancia del propio promotor de la obra, que de este modo quería acelerar y facilitar la descarga de las piedras calcáreas y de los materiales necesarios en el proceso de calcinación.

Las mismas fuentes señalan que la cal producida «se utilizaba en la construcción y para abonar» los campos de cultivo, vendiéndose tanto allí mismo como en diferentes municipios del entorno y en las ciudades de Vigo y Pontevedra, a las que llegaba el producto por vía marítima.

El mismo medio de transporte que tanta importancia tuvo en los orígenes de Pontecesures y empleaba, en el mismo puerto, Nestlé, después de que en febrero de 1938 se constituyera Industria Lechera Peninsular S.A. (Ilepsa), y el 16 de agosto de 1939 inauguraba su planta de leche condensada.

A escasos metros de La Calera, la compañía láctea también se aprovechó de su estratégica sutuación a orillas del Ulla para cargar y descargar la madera necesaria para las calderas, la hojalata usada en los envases originales de la marca y los productos ya terminados.

Todo ello trasladado en viejos galeones de vela hacia o desde Vilagarcía de Arousa, «donde amarraban los buques de mayor tonelaje y se hacían los transbordos»

Asé se explica también en «obaixoulla.gal» al aludir en su catálogo digital a esa fábrica «pionera en la recogida de leche en el campo gallego» que desde 1978 produce en Pontecesures la popular marca «La Lechera», hasta entonces exclusiva en su factoría cántabra de La Penilla de Cayón.

Por cierto, que también en este caso hay que hablar de un aniversario (cuatro décadas), pues en 1983 la factoría cesureña se convirtió en la única de Nestlé España dedicada a producir leche condensada.

Pero volviendo al tema central de esta información, como es el funcionamiento, hace cien años, de Caleras del Ulla, y entrando en detalle en las características de esa construcción, «obaixoulla.gal». resalta también que los hornos de calcinación del cuarzo y cocción de baldosas son «unas construcciones troncopiramidales ejecutadas en piedra del país labrada».

Su interior «tiene una sección aproximadamente circular a modo de chimenea, con una capacidad de 50 a 60 metros cúbicos», completándose las instalaciones con dos galpones de planta baja, de 30 metros de largo por 10 metros de ancho.

En aquella misma época, aclaran Os Penoucos, ya estaba en funcionamiento la Cerámica de Campaña, en Valga y conocido con el paso del tiempo como Novo y Sierra.

«Corría el año 1921, cuando el Concello de Valga concedía permiso al empresario vigués Manuel Posada Fernández, asociado a Manuel Otero Bárcenas, también de Vigo, para edificar una casa de labranza, destinada a cocer teja y ladrillo, contigua a un galpón para depósito de maquinaria en el lugar de A Torre en la parroquia de Campaña, matiza «obaixoulla.gal»

«Las primeras instalaciones se completarían en Gándara-Campaña con una finca de secado, un motor de gas pobre para el funcionamiento de la maquinaria para fabricar teja y ladrillo y con una oficina de dirección y administración» añade el proyecto.

Parece ser que la nueva empresa «ya figuraba registrada en 1922 como fábrica de ladrillos, aunque sin finalizar las obras», y en 1923 sus propietarios cederían la industria a «la mercantil pontecesureña Escuredo y Cía, constituída por Eugenio Escuredo Lastra, asociado a los empresarios José Novo Núñez, Salvador Sierra Trasande y José Sierra Martínez, socios de la compañía Novo y Sierra, dedicada al comercio de ultramarinos y coloniales a gran escala, principalmente con América».

La relación de Novo y Sierra con Caleras del Ulla se debe a queen 1925, «apenas dos años después de abrir la Cerámica de Campaña, el empresario Eugenio Escuredo puso en funcionamiento en el lugar de O Cantiño (en el llamado Camiño de San Xulián) un taller de cerámica artística inspirado en el modelo que había conocido en Sargadelos, y al que iba a llamar Cerámica Artística Gallega».

«Obaixoulla.gal» continùa el relato diciendo que «contrató a un artesano portugués y entró en contacto con el artista Francisco Asorey, que realizó los diseños de los primeros moldes que salieron de esta cerámica: Os tesouros, Pórtico da Gloria, A Naiciña y el Sepulcro del Apóstol.

Lasa primeras producciones llegaron a venderse en Inglaterra, Cuba y Argentina. Pero «la calidad del barro empleado era baja para este tipo de cerámica».

Razón por la cual, una vez surgidas las primera dificultades, «Escuredo abandonó la experiencia y en 1927 vendió los moldes de las figurar al industrial Ramón Diéguez Carlés que trasladó la producción de taller de cerámica a las instalaciones de la calera del Ulla, fundando allí en este año la Cerámica Celta.

Una llamativa historia que no termina ahí, sino que llevó a Ramón Diéguez, «preocupado por la calidad» de la materia prima y sacando partido a su preparación, decidió emplear el barro de sus minas de feldespato de Valga e introducir la tcnica del vidriado en las piezas que había heredado de Cerámica Artística Gallega «dándoles un nuevo impulso»,

En el catálogo de Os Penoucos relatan que «además de seguir contando con la colaboración de Asorey, contrató a un artesano de Buño»

Y apostillan que «el médico Víctor García García-Lozano, un gran entusiasta de la cerámica, introdujo a su colega Alfonso Daniel Rodríguez Castelao en el taller» siendo el insigne artista rianxeiro el que más se interesó por la cerámica de Diéguez y el que más influyó en ella, «preparando numerosos diseños y bocetos que servirían de guía para la realización de piezas como A Cabuxiña, inspirada en una obra del alemán Willy Züguel».

Por si no fuera suficiente, «Francisco Asorey, José María Acuña, Carlos Maside, Santiago Bonone, Carlos Sobrino, Manuel Torres y Carlos Bóveda aportaron también sus diseños a Cerámica Celta»

Industria en la que «se elaboró durante casi 40 años una artesanía ligada a la naturaleza que se llegó a conocer como la Universidad Plástica de Galicia. El taller artístico funcionó entre 1927 y 1963».

En definitiva, que con una herramienta como «obaixoulla.gal» es posible saber más sobre la historia de Pontecesures, Valga, Catoira y demás localidades a partir de todo tipo de elementos que forman parte del recuerdo, incluídas viejas fábricas como Caleras del Ulla.

Faro de Vigo

Comentario de Seijas sobre a traxectoria do finado «Pasarín».

Morreu o fotógrafo, natural de Cordeiro (Valga), Francisco Buceta Gómez «Pasarín» ós 101 anos….Se a Costa Morte tivo a Ramón Caamaño ou a Terra de Montes a Virgilio Vietez, para deixar para a posterioridade a cotidinianidade e os acontecementos marcantes destas terras, nos no Ullán temos a figura de Pasarín, testemuño de toda segunda metade do século XX..as súas miticas imaxes de coñecidos veciños por dispares causas,que senon fora por el, nin foto terian das cheas do Ulla en Cesures, da romaria Vikinga de Catoira, das festas, do traballo…de todo…as fotos súas fotos eran a autencidade natural total.

Ten milleiros e milleiros de fotos que son parte imprescindible, que non o digo por dicir, da nosa historia. Eu sempre recordo a Pasarin, como se ve nesta imaxe que fixo Martina Miser de «La Voz de Galicia», facendo as súas longas camiñantas diarias, coa cámara colgada, pasar por Cesures, por Redondo…e sempre preparado para retratar o que fora…

Aínda recordo que a miña primeira gravadora, que me regalara a miña nai, a estrenei (ou foi a segunda vez de uso) para facer unha reportaxe en Radio Valga, no 2000, sobre unha exposición sobre fotos de Pasarin que organizara unha efemera asociación cultural que houbera en Porto (xa non me acordo do nome completo) da que formaba parte o poeta Cándido Duro «Canducho», ó que entrevistara para que me falara deste persoeiro e das exposicións….Polo tanto a Historia en imaxes de Valga,Padrón,Catoira,Cesures da segunda metade do século XX non se entende sen el,asi coma de Vilagarcia de Arousa..ademais de tódalas cousas que el sabia das xentes da zona.

Tamén botara moitos anos embarcado na mercante e foi acomodador no cine agardemos que se poida conservar o seu legado e que ogallá se busque unha maneira de unha institución ben responsable as teña ou que polo menos poidera conservar copias para ser acceso publico ou para investigadores.O seu corpo foi velado no Tanatorio Arosa e o seu funeral celebrouse en Santa Baia de Arealonga (Vilagarcia) o pasado martes. O noso pésame os seus familiares e amigos. Descanse en Paz.

Daniel Seijas Llerena

Todos lebramos a «Pasarín» en Pontecesures e dende logo, merece un recoñecemento institucional e un nome dunha rúa. Sen dúbida.

El modelo del CRA de Valga triunfa y las escuelas rurales vuelven a ganar alumnado.

El conjunto de unitarias roza ya las 90 plazas ocupadas

El Centro Rural Agrupado de Valga inicia este lunes el curso con un nuevo aumento de matrícula. Lejos de la situación en la que se encuentran otros CRA, el de esta localidad del Baixo Ulla ha vuelto a ver crecer el número de inscripciones: hay 89 estudiantes, frente a 84 el curso pasado. De esas matrículas, 25 se corresponden con nuevas incorporaciones.

El CEA de Valga tiene sedes en Chenlo, Xanza, Vilarello, Ferreirós, Forno y Campaña. «En catro das seis escolas rozamos a ratio máxima que é de vinte alumnos», indica la nueva directora del centro, Antía Piñeiro. Se confirma, pues, que «gozamos de moi boa saúde, e é unha sorte porque non abunda nestes tempos nas escolas rurais, xa que a maioría están pelexando por manter a cifra de seis nenos para non pechar».

A las aulas de Valga, que se ha convertido en modelo de innovación educativa para escuelas rurales de toda España, llegan estudiantes procedentes de ayuntamientos como Santiago, Catoira, Padrón, Meis, Cuntis, Caldas, Pontecesures o Rois, «entre outros». Su método de trabajo, basado en proyectos, ambientes de aprendizaje y una enseñanza personalizada e individualizada, convence a las familias.

La Voz de Galicia

Os partidos do torneo de baloncesto 3×3 estanse a xogar no pavillón de Pontecesures.

Por mor da choiva, os partidos deste torneo organizado polo C.B. Río Ulla e que se celebran durante todo o día de hoxe, estanse a xogar no pavillón de Pontecesures.