O Pirueiro navega el Ulla y el Sar con dos dornas en honor a Rosalía.

Subida marítima. O Piueiro con unos pocos privilegiados que pudieron seguir la travesía .

Es un año extraño y sometido a los protocolos y medidas que ha impuesto la crisis sanitaria, pero pese a ello la Fundación Rosalía de Castro de Padrón no ha querido dejar pasar la fecha en la que las gentes del mar rinden homenaje a la escritora. Así el viernes se celebró la Inchadiña Blanca Vela que en esta ocasión se ha visto limitada y ha tenido como gran protagonista al volanteiro de A Guarda, O Piueiro, una embarcación tradicional de vela que ha realizado este año acompañado por dos dornas la subida por los ríos Ulla y Sar.

La embarcación de A Guarda apoyada en su lema Eu son libre del manifiesto de Liereders y acompañada por las dornas navegó por los ríos hasta llegar al Espolón, en Padrón, sobre las 19.30 horas aproximadamente. Allí se homenajeó a Rosalía de Castro frente a su estatua, como siempre se ha hecho durante los años anteriores.

Hay que recordar que en el año 2013 se celebró por primera vez la Inchadiña Branca Vela, iniciativa creada con el fin de conmemorar el 150 aniversario de la publicación de la escritora Cantares gallegos, en los que la autora hace referencia a las dornas que subían al Ulla, por iniciativa de los defensores de la cultura marítima de la época. Concretamente esta era la estrofa en la que Rosalía habla de las embarcaciones. “¡Que inchadiña branca vela/ antre os millos corre soa/ misteriosa pura estrela! / Dille o vento en torno dela: Palomiña, ¡voa!, ¡voa”.

La travesía comenzaba habitualmente en la playa fluvial de Vilarello, en Cordeiro (Valga), y finalizaba en el Paseo del Espolón, en el municipio padronés.

Durante las ediciones pasadas de la Inchadiña, participó un gran número de embarcaciones tradicionales de toda la comunidad gallega, con llegadas desde la ría de Arousa y la ría de Vigo, botes de Ribadeo o lanchas xeiteiras, entre otras.

Pero este año, para evitar las grandes concentraciones y respetar las medidas de seguridad impuestas por la pandemia de la covid-19 el acto estuvo protagonizado únicamente por la embarcación O Pirueiro.

También y con motivo del homenaje anual que rinde el municipio de Padrón a Rosalía de Castro, eun día antes, el jueves, el fotógrafo Eduardo Rivo presentaba en el auditorio padronés su libro de fotografía Inchadiña Branca Vela. El acto, organizado por la Fundación Rosalía de Castro, de la mano de la Diputación de A Coruña, reunió al presidente de la Asociación Cultural Dorna de la Arousa, Salvador Allo; el alcalde de Padrón, Antonio Fernández Angeuira; el director de la fundación, Anxo Angueira y el propio autor de las ilustraciones, Eduardo Rivo. Además, los presentes pudieron disfrutar de una actuación musical protagonizada por el cantautor Secho.

La obra contiene más de cien imágenes sobre la fiesta de conmemoración a la escritora, desde su primera edición en el año 2013.

El autor de la publicación, Eduardo Rivo (Ourense, 1976), es un cirujano torácico y a la suma, fotógrafo autodidacta. Pertenece al grupo artístico gallego Galeoska y es miembro de la escuela tradicional Dorna da Illa da Arousa.

El Correo Gallego

Flores y velas por el pontecesureño fallecido en el Alvia.

Han pasado siete años desde la tragedia del Alvia, pero en Pontecesures no olvidan a su vecino muerto en el tren: Antonio Jamardo Villamarín. Hoy no se celebrará la tradicional concentración de homenaje, pero sí se invoca a los vecinos a que lleven flores o velas a la estación de ferrocarril.

La estación de tren de Pontecesures no acogerá esta tarde la concentración en homenaje a Antonio Jamardo Villamarín, como sucedió de forma ininterrumpida entre 2014 y 2019. La pandemia de coronavirus ha motivado que la impulsora del acto, Belén González Silva, haya rehusado este año convocar a sus vecinos al homenaje al pontecesureño fallecido en el accidente del tren Alvia del 24 de julio de 2013.

«Debido a la crisis por el Covid-19, consideramos que no debemos reunirnos, pero eso no significa que olvidemos», plantea en su página de Facebook, medio a través del cual fue haciendo las convocatorias año tras año, desde el primer aniversario del trágico accidente.

Por ello, y para no olvidar, la pontecesureña anima a todos los vecinos y allegados a acudir a la estación ferroviaria de Pontecesures y a depositar en su andén una flor o una vela encendida por la memoria de Antonio Jamardo Villamarín. No habrá concentración, de modo que podrán ir a la hora que cada uno quiera o pueda. La familia, por su parte, participará en una misa de aniversario pensada únicamente para los parientes.

Jamardo viajaba con su novia en el Alvia accidentado en la víspera del Apóstol de 2013. Iban a acudir a una boda, pero el vuelco del tren costó la vida al hombre, que trabajaba en Madrid como agente comercial de una empresa arousana.

En el primer aniversario del fatal accidente, González convocó una concentración de homenaje, a la que año tras año acudieron docenas de vecinos y miembros de la corporación municipal. La pontecesureña insiste en que seguirá convocando el acto, «mientras la familia no me diga que pare, que ya no hace falta», pero asume que tarde o temprano ese momento puede llegar, «porque esto supone remover recuerdos que son muy duros».

Belén González Silva defiende la validez del homenaje, aunque sea a pequeña escala, «para que la familia de Antonio Jamardo vea que no está sola». «Lo peor de todo esto es que han pasado siete años y que seguimos igual. Los vagones siguen en la explanada de Grúas Estación y seguimos sin saber de quien fue la culpa de lo que pasó».

Faro de Vigo

Correos incorpora Pontecesures a la red de envío de pimientos y cebollas.

Correos ha puesto en marcha en diferentes puntos de España una campaña especial con el propósito de facilitar a los productores el envío de pimientos y cebollas por paquetería a cualquier punto de la Península.

A los vecinos interesados se les ofrecen «precios reducidos respecto a la tarifa estándar y la posibilidad de no tener que acudir a la oficina postal para efectuar la entrega, ya que «los propios carteros rurales irán recogiendo los paquetes con el producto».

Dado que se trata de productos alimentarios, Correos compromete una entrega «urgente y efectiva», utilizando como embalaje «el conocido como ‘paq premium caja mediana’, con unas medidas de 39 centímetros por 28, por 19».

Solo se pide a los productores que sequen bien los pimientos y cebollas antes de colocarlos en la caja. El servicio permite que el cliente elija el lugar de entrega e incluye notificaciones SMS y de correo electrónico para el destinatario.

Faro de Vigo

Carlos Herrera en la Pulpería Rial.

El periodista, junto al juez Vázquez Taín, en la Pulpería Rial de Padrón.

El pasado miércoles, con la entrada del mes de julio, también se reabrió oficialmente el Camino de Santiago, con la apertura de la Catedral. El periodista Carlos Herrera es uno de los que ha aprovechado para hacer una Ruta que ya conoce, y realizar diferentes paradas con amigos, según él mismo ha ido compartiedo en las redes sociales, en su particular Diario de un peregrino. El locutor de la Cadena Cope repite experiencia después de caminar el verano pasado por la ruta norte que lleva a Santiago. Para este año, ha elegido el Camino Portugués y ha ido contando sus impresiones en cada etapa. Herrera ha ido bordeando la costa desde A Guardia, el punto inicial de su ruta. Después, ha continuado las etapas por la provincia de Pontevedra hacia Santiago. Le hemos visto disfrutando de una puesta de sol en Baiona, donde continuó el Camino hacia Vigo, o comiendo bogavante en la localidad pontevedresa de Porto dos Barcos o en el restaurante Casa Román, de Pontevedra. También tuvo tiempo para hacer una parada en Caldas de Reis y volvió a disfrutar de la gastronomía gallega en Padrón. Allí, en la última parada antes de llegar a Santiago, comió en el Asador O Pazo y también visitó la Pulpería Rial acompañado del juez gallego José Antonio Vázquez Taín. Ayer por la tarde inmortalizaba la llegada a su destino con una fotografía delante de la Catedral, como todos los turistas que pisan al final la plaza del Obradoiro.

El Correo Gallego