Notorio malestar de los pescadores por la situación que atraviesa el río Ulla.

Le hicieron llegar un escrito al presidente de la Xunta y al conselleiro de Medio Ambiente ·· «Estamos hartos de que nos ninguneen, de que no se nos tenga en cuenta», denuncian

Más de doscientos pescadores, pertenecientes a distintas agrupaciones, avalan el escrito que fechas atrás hicieron llegar al conselleiro de Medio Ambiente, Manuel Vázquez, y al presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, en donde manifiestan su más enérgica repulsa por la situación que atraviesa el río Ulla, en general, y su cultura salmonera, en particular, en los últimos años.

Y es que el colectivo se pregunta una y otra vez «el por qué los pescadores vemos lesionados sistemáticamente nuestros derechos sin que se nos den las explicaciones oportunas».

También les gustaría saber «si esta política es del conocimiento de la Presidencia y de la Consellería correspondiente, pues estamos en manos de un grupo de personas sin la más mínima capacidad de negociación, que toman medidas absurdas y que no consensúan absolutamente nada con los colectivos a los que afectan».

Y como ejemplo contrastado de la realidad de la situación, así dice el comunicado, «baste comentar la provocadora contestación de menosprecio de un técnico de la Dirección Xeral de Conservación da Natureza a un grupo de pescadores: ¿Quién les prohíbe pescar en los prados?».

El colectivo de pescadores del río Ulla manifiesta en el escrito que «estamos hartos de que nos ninguneen, de que no se nos tenga en cuenta y se nos trate con desdén, por ello exigimos de la administración que prescinda de estos personajes y ponga en su lugar a personas comprometidas, con aptitud y actitud negociadora, competentes e inteligentes, que acudan a los foros decididos a buscar soluciones y puntos de encuentro y, sobre todo, personas que sepan escuchar y atender nuestros argumentos».

A petición de la directiva de la Sociedad de Pescadores Río Ulla de A Estrada, un grupo representativo del colectivo mantuvo varias reuniones con el director de Conservación da Natureza y otros responsables de la Consellería de Medio Ambiente. Sus reivindicaciones no sólo no fueron atendidas, es que ni siquiera fueron oídas, dicen en la carta.

Falta de transparencia

Son muchas las incógnitas que plantean sobre el emblemático río y que desconocen por la falta total de transparencia de la administración. Y ponen ejemplos:

* El proyecto del Río Liñares, puesto en marcha en 1.993, con el decidido apoyo de la Sociedad Pescadores Río Ulla, del que aún estamos esperando explicaciones de su fracaso.
* Número de salmones capturados en Ximonde.
* Número de ejemplares fallecidos por causas naturales y/o manipulación defectuosa.
* Tramos vedados en las presas de los tres cotos con distancia diferentes a dichas presas.
* Se construyó una costosa escala en el coto de Couso, innecesaria, ya que para que los peces remontaran dicha presa bastaba con tener abiertas las compuertas existentes en la misma desde tiempo. Desde esa construcción, el mal llamado ahora Coto de Couso no da ni la primera satisfacción a los pescadores (ni salmones ni reos). Un desastre. Véase expedición de permisos.
* Por si fuera poco, una vez cometido el error de la construcción innecesaria y entendemos que costosa escala, debió de dotarse de un contador de peces.
* La piscifactoría, donación al parecer de Fenosa, en el río Vea, afluente del Ulla por su margen izquierdo, parece ser que no se va a poner a funcionar, bien por la escasa calidad de las aguas (contaminación), o por causas que desconocemos y de las que no se dieron explicaciones. Lo que sí es cierto es que no funciona.
* Abandono de las posturas en los cotos, llenos de maleza, algunos puestos de cemento rotos y con accesos lamentables. Nos preguntamos: ¿ Tienen acceso a los puestos de pesca las personas con minusvalías físicas?
* Gran cantidad de hierba en los cotos de Sinde y Couso, dentro del río, que hace impracticable la pesca.

No nos convencen en absoluto las tallas mínimas de la trucha aprobadas en 2006, y además, que sean distintas en diferentes tramos del mismo río.

El colectivo reclama justicia e invita al consenso

El colectivo está abierto a buscar soluciones. «Reclamamos justicia para esta protesta colectiva y renovamos nuestra invitación al consenso y a la celebración de las reuniones pertinentes a fin de poner remedio a los múltiples problemas que afectan a la cuenca del Ulla: recuperación de los cotos, tramos libres, organización por lotes, creación de cotos de pesca sin muerte, adecuación del cupo de capturas, respuesta a las sueltas descontroladas del embalse de Portodemouros; contaminación, furtivismo, concursos y guardería, entre otros».

TIERRAS DE SANTIAGO, 23/10/07