Hallan en Cortegada el cadáver del catoirense que desapareció en las Torres del Oeste hace una semana.

Después de más de una semana desaparecido, el cuerpo de José Iglesias Laceira apareció ayer sin vida en las inmediaciones de la isla carrilexa de Cortegada, en una zona próxima a Punta Batel. Un vecino del municipio que trabajaba en las cercanías dio la voz de alarma a los servicios de emergencia que no tardaron en identificar al cadáver como perteneciente al hombre de Catoira de 56 años que en la última semana movilizó a los servicios de emergencia de la comarca.

El juez de guardia se desplazó de inmediato a Cortegada donde, sobre las dos y media de la tarde, ordenó el levantamiento de cadáver. A continuación, los servicios de emergencia trasladaron al fallecido al muelle de Cavadelo, en Vilagarcía, donde fue recogido por el coche fúnebre.

Antecedentes > José Iglesias Laceira fue visto con vida por última vez el pasado viernes día 1. La aparición de un paraguas, con su cartera dentro, colgado en uno de los pantalanes situados junto a las Torres del Oeste hicieron sospechar a la familia y a los servicios de emergencia que el hombre se podría haber caído al Ulla.

Lo cierto es que los servicios de emergencia como Protección Civil y los GEAS de la Guardia Civil de A Coruña rastrearon sin éxito el cauce del río, al igual que amigos y familiares del desaparecido que peinaron por completo la zona que rodea a las Torres del Oeste.

Incluso los buzos se afanaron durante horas a rastrear el fondo del río sin encontrar rastro de José Iglesias.

El hecho de que las pertenencias del catoirense, casado y con dos hijos, estuviesen cuidadosamente depositadas en el pantalán hacen sospechar las causas que pudieron motivar la desaparición del hombre.

Poco tiempo después de su falta, los vecinos y familiares de José Iglesias argumentaban que este tenía problemas de movilidad, lo que le hacía difícil que se hubiese desplazado lejos de su recorrido habitual. Las mimas fuentes destacaban que el hombre conocía a la perfección los parajes del entorno, ya que llevaba residiendo en Catoira más de 20 años desde que contrayó matrimonio con una vecina de la localidad.

Dispositivos > Los servicios de emergencia de la comarca del Ulla y los efectivos de los GEAS de la Guardia Civil de A Coruña desplegaron durante varios días un amplio dispositivo de búsqueda que tenía como finalidad prioritaria encontrar el cadáver de José Iglesias. Inicialmente, la labor de las fuerzas de seguridad se vio dificultada por las malas condiciones meteorológicas que azotaron la costa gallega durante el fin de semana en el que desapareció el catoirense. Al final fue un vilagarciano el que encontró el cuerpo sin vida en la isla de Cortegada.

Ya pocos días después de iniciada la búsqueda, el jefe del GEAS aclaraba que «pudo haberle dado un espasmo al caer al agua y se le bloqueó la glotis impidiendo que entrase agua en los pulmones, por lo que el cuerpo flotaría y pudiero arrastralos las mareas más fácilmente». El responsable de los buzos ya reconocía entonces que «cada vez hay menos esperanza y lo más probable es que esté río abajo, hacia Cortegada», unas previsiones que, finalmente, se cumplieron.

DIARIO DE AROUSA, 10/02/08