Requián vuelve a ser imán de cientos de fieles.
Cientos de fieles volvieron a inundar ayer el santuario de los Milagros de Requián en el día grande de la romería, que se celebra invariablemente el 28 de agosto. Decenas de devotos llegaron a pie desde todos los puntos de la comarca. Entre ellos, varios miembros del gobierno estradense con el alcalde, José López, a la cabeza, que lleva varios años cumpliendo con el rito de la peregrinación. Tras la misa solemne, los fieles se disputaron las andas de la santa que, como es habitual, volvió a rodear el templo con el manto cargado de billetes y abrumada por una multitud deseosa de bendecir velas o pañuelos.
La Voz de Galicia
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