Los comerciantes gallegos empiezan a cambiar sus hábitos y mantienen en los escaparates mercancía de las campañas anteriores para «relanzar» las ventas.
Los comerciantes gallegos han comenzado a reaacionar ante este cambio en la climatología de Galicia, en la que los inviernos son cada vez más suaves y la temporada de verano se extiende. De hecho, hoy en día, superado el ecuador de octubre, mes por costumbre antes lluvioso y frío, ya es frecuente encontrarse escaparates donde la ropa de verano o «entretiempo» comparte protagonismo con la mercancía más propia del otoño-invierno. «Es que el propio cliente te lo pide. Prefiere comprarse unos shorts o una camisa de verano antes de un abrigo de piel para el frío», sostiene Antonio Amor, presidente de la Asociación de Comerciantes Zona Obelisco de A Coruña.