El Concello cesureño valora la parcela en 90.600 euros. Bello Maneiro tiene un mes para alegar y, de momento, no desvela su estrategia
Como cabía esperar a la vista de los antecedentes, la reunión celebrada este miércoles entre los alcaldes de Valga y Pontecesures para abordar la situación del terreno que los primeros poseen en plena zona portuaria del municipio vecino acabó sin acuerdo. Por tanto, el Concello de Pontecesures sigue adelante con el expediente de expropiación porque no les han dejado otra opción, argumenta la alcaldesa, Maite Tocino (BNG).
La regidora lleva diez meses —tuvo otras dos reuniones en enero y en junio para hablar del tema con su homólogo Bello Maneiro— tratando de llegar a una solución consensuada entre las dos partes. En Cesures quieren incorporar la parcela en cuestión a su patrimonio municipal alegando que lo contrario es anacrónico y poco operativo, dado que carecen de competencias sobre ella. Se trata de 1.200 metros cuadrados calificados como zona verde que se han convertido en un «páramo», en palabras de Maite Tocino, y ella quiere convertir en un aparcamiento público con capacidad para unos 35 vehículos. Pero mientras siga perteneciendo a Valga tiene las manos atadas para actuar y la alcaldesa ha dicho basta: «Os tempos cambiaron, ese terreo é vital para nós».
El Concello de Valga tiene ahora un mes por delante para alegar y presentar una hoja de aprecio en relación a un terreno que en Pontecesures valoran en 90.600 euros. Bello Maneiro declinó hacer valoraciones a la salida de la reunión y, por tanto, se desconoce la estrategia que va a seguir respecto a este asunto. Sí habló el sábado a través de un comunicado en el acusaba al concello vecino de «querer pasar por enriba da historia», un comunicado que Maite Tocino calificó hoy de «desafortunado» en la medida en que se hizo previamente a la reunión de esta mañana, un encuentro, por cierto, que se convocó bajo la mediación del BNG de Valga.
La Voz de Galicia