«El timbal de lamprea es muy de Padrón y hay que conservarlo».

La vecina Guapecha Castaño es de las pocas personas que aún elabora la típica empanada de forma totalmente artesanal.

La lamprea es la protagonista estos días de los menús de la hostelería de Padrón, pero también lo es en el ámbito privado en el que hay grandes cocineras como la vecina Guapecha Castaño Solar, de 63 años. Es de las pocas personas que aún elabora de forma artesanal el timbal de lamprea, una empanada muy típica de Padrón. Su buen hacer ya fue reconocido por un jurado, con motivo de un concurso organizado por el Concello, en el que obtuvo el primer premio.

«Yo ya hacía la empanada de lamprea con mi madre; era a la única que quería en la cocina», cuenta Guapecha Castaño que, cada temporada, hace un buen número de timbales para la familia y amigos, siempre de forma desinteresada. «El timbal es muy típico de Padrón y ya lo hace muy poca gente de forma artesanal», subraya. Ello supone hacer todo a mano, incluida la masa, que suele ser más consistente de la normal para que aguante la salsa de la lamprea, que «se prepara en su sangre. Esa es la esencia de la lamprea: cocinada en su sangre», explica Guapecha Castaño. Ella cocina la masa y la lamprea al mismo tiempo, aunque explica que hay quien lo hace por separado.

«Hay que tener mano para hacerla y que salga tan bien; Guapecha es única haciendo el timbal», asegura su hermano Gonzalo. Todo empieza con la limpieza de la lamprea, que no es tarea fácil, pero a Guapecha hasta le gusta hacerlo, al modo que lo hacía su madre. A ella, además, le gustan, especialmente, los ejemplares capturados en el río Ulla en las pesqueiras de Carcacía.

Y para cocinar una buena lamprea hay algo básico, asegura la vecina: «cuanta más sangre suelte, mejor, porque es fundamental para hacer una buena salsa». Y para el timbal la clave está en que esa salsa, que se cocina en medio del pez casi enroscado, no se derrame y sea aguantada por la masa consistente. «No da mucho trabajo hacerla, o será que yo ya estoy acostumbrada que me sale casi sola», dice Guapecha, que también avisa: «como no espabilen para aprender, la receta se va conmigo», algo que corrobora su hermano. «A todos los Castaño nos gusta la lamprea, pero solo a ella se le da hacer el timbal», afirma Gonzalo.

Pese a prepararla tantas veces, a la cocinera no le aburre, pero dice que es un plato «de sabor muy fuerte, de comer dos o tres veces por temporada», algo que corrobora su hermano, que señala algo que es sabido de la lamprea: o te encanta o la detestas.

Guapecha Castaño reconoce que «solo tomo la que yo preparo, aunque sé que en los restaurante también se hace bien». También opina que, a este paso, la receta del timbal de lamprea se pierde y «sería una pena. Es bonito que la gente aprenda a hacerlo; hay que conservar el timbal de lamprea porque es muy de Padrón», señala la vecina.

La Voz de Galicia

El alcalde de Pontecesures tilda de “ridícula” la ayuda de la Deputación a los hosteleros y comerciantes.

El Ayuntamiento aporta 25.000 euros para complementar las ayudas del segundo Plan de Rescate de la Xunta.

El Concello de Pontecesures aportará 25.000 euros al segundo Plan de Rescate de la Xunta de Galicia para ayudar a los hosteleros, pymes y autónomos afectados por la tercera ola de la pandemia del coronavirus. La primera convocatoria de ayudas autonómicas repartió 48.000 euros en el municipio pontevedrés.

La Deputación de Pontevedra destinará otros 8.800 euros a Pontecesures. El alcalde cesureño, Juan Manuel Vidal Seage, ha tachado de “ridícula” la cantidad de dinero destinada por la administración provincial porque “hai que ter en conta todo o tecido comercial e hostaleiro” que tiene la localidad.

Nivel máximo de restricciones

El 21 de marzo es la festividad de San Lázaro que sirve de “pistoletazo de saída” para la Fiesta de la Lamprea del río Ulla que, por segundo año consecutivo, no se podrá celebrar por la covid-19. El regidor popular lamenta que este año tocará “estar pechados, xa chove sobre mollado, hai moitos veciños coa auga no pescozo, e a situación é prácticamente insostenible”.

Vidal Seage ha recibido este viernes a los hosteleros de Pontecesures que, desde hoy, vuelven a tener que cerrar sus establecimientos por la entrada en vigor de las medidas del nivel máximo de restricciones. El alcalde se ha comprometido a solicitar una reunión con la gerencia del Sergas para trasladarle que el sector está “sobrepasado y, en varios casos, en riesgo de tener que cerrar para siempre.

Solo 22 casos positivos detectados en la última semana en Compostela.

La incidencia acumulada a siete días que, desde hace unas semanas, es utilizada por la Xunta para analizar la evolución de la pandemia con más exactitud, sitúa a Santiago en uno de los dos niveles más bajos en cuanto a nuevos casos. Solo se han detectado 22 nuevos casos en la capital gallega en los últimos siete días. La cifra sube a 46 en el mapa de incidencia acumulada a 14 días para Compostela. En cuanto al global del área sanitaria, actualmente son 314 los casos activos. Habría que remontarse al pasado 24 de agosto para encontrar cifras similares, 329 en ese momento. Con estos datos, la incidencia media en Santiago y Barbanza se sitúa en 71 casos por cada 100.000 habitantes, la segunda área menos afectada de Galicia junto a Lugo. Otro dato que refleja la buena situación actual es el correspondiente a casos detectados por PCR en las últimas 24 horas en el área sanitaria, tan solo 15. También ha bajado en dos personas el número de hospitalizados en régimen regular, hasta los 39. En cuanto a los ingresados en críticos, se mantienen en datos similares, siete. Todos están ingresados en el CHUS, excepto una persona en el hospital do Barbanza. Vila de Cruces, Touro y O Pino son los que han presentado una peor evolución en los últimos siete días aunque siguen en niveles relativamente bajos de incidencia, inferiores a los 250 casos por cada 100.000 habitantes, la barrera en cuanto a un mayor salto de restricciones. De momento, todo el área sanitaria mantiene su hostelería abierta en interior y exterior, y la movilidad es total dentro del área, excepto Pontecesures, así como a otros concellos en similar situación.

El Correo Gallego

Sigue la mejoría: bajan a cinco los concellos en riesgo máximo y solo cuatro están en nivel alto.

La situación de la comunidad gallega en los que a incidencia de los municipios que la componen se refiere no deja de mejorar día tras día. Prueba de ellos son las continuas salidas de municipios de la zona de máximo riesgo por COVID. A Pobra do Brollón fue el último en salir de la lista de ayuntamientos en riesgo extremo, pese a que hasta las 00.00 horas del próximo martes tendrá que mantener su cierre total. Así, solo cinco de los seis ayuntamientos anunciados el martes por el Comité Clínico como zonas en riesgo máximo se mantendrán la próxima semana: A Mezquita, Boborás y Vilardevós, en Ourense; Pontecesures, en Pontevedra; y Paradela, en Lugo.

El Correo Gallego

Pontecesures, la fábrica donde Nestlé produce más de 60.000 toneladas de leche condensada,

La producción de esta factoría creció un 17 % en solo un año.

Nestlé tiene en Pontecesures una de sus fábricas más internacionales. Y es que el 70 % de la leche condensada que se produce en esta factoría se destina a la exportación. La planta, que es un centro de referencia para la compañía en las zonas de Europa, Oriente Medio y Norte de África, ha logrado este año batir todos sus récords de producción. Más de 60.000 toneladas han salido de ella durante el 2020, lo que supone un 17 % más que durante el período anterior.

El crecimiento viene dado por la apertura de nuevos mercados, como Australia, así como por el aumento del volumen producido en la factoría tanto para España como para otros destinos habituales, esto es, Oriente Medio y Europa, explican en la compañía. Este incremento en la producción ha llevado parejo la contratación de nuevo personal. Alrededor de 30 personas se han incorporado al centro productivo, con lo que la plantilla actual ya supera los 200 trabajadores.

Pero es que, además, el gigante alimentario no ha dejado de invertir en esta planta, que se nutre de la leche que producen las granjas situadas en un radio de 50 kilómetros. Durante el pasado año, la fábrica puso en funcionamiento dos nuevas líneas de llenado, que han supuesto una inversión de 1,9 millones de euros. Una de ellas está destinada a los grandes formatos para clientes industriales, que permite el llenado de envases de diferentes tamaños, de entre 2,5 y 1.000 litros. También está dotada de una tecnología que proporciona una mayor precisión y permite aumentar la vida útil del producto. Por su parte, la segunda línea, en la que se llenan los envases de un kilo y los de 740 gramos, se caracteriza por su velocidad y precisión, así como por el ahorro de energía y mantenimiento.

Leche veggie

Desde Nestlé recuerdan también que en esta factoría se empezó a producir el pasado año un nuevo producto que ha revolucionado los lineales de los supermercados: La Lechera Veggie. Se trata de la primera alternativa vegetal a la leche condensada, producida a base de avena, arroz y azúcar y está especialmente ideada para que los consumidores veganos, vegetarianos y flexitarianos puedan seguir disfrutando de postres caseros, manteniendo el sabor y al textura de siempre.

La factoría de Pontecesures es una de las más veteranas de la compañía en España. Aunque la planta se inauguró en 1939, tiene su origen en la constitución de Ilepsa (Industria Lechera Peninsular), empresa propiedad de Nestlé que se fundó el 1 de febrero de 1938. Fue el 16 de agosto de 1939 cuando salió de esta planta el primer bote de leche condensada que se produjo.

La Voz de Galicia