Teresa y cuarenta años de citas con los libros en Pontecesures.

La biblioteca municipal está de aniversario y para celebrarlo se celebró ayer un encuentro con escritores locales del que fue anfitriona la mujer que, desde el principio, guio a los lectores de la localidad

El 1 de abril de 1984 comenzaba a funcionar la biblioteca municipal de Pontecesures. Aquel mismo día se incorporó a su puesto de trabajo María Teresa Gil García. «Algún funcionario municipal xa colocara os libros, pero eu cando cheguei empecei de cero», cuenta. Hizo bien poniéndolo todo a su gusto: el pequeño edificio se iba a convertir en su centro de trabajo durante la friolera de cuarenta años. «Encántame o que fago», relata Teresa, que estudió para maestra pero acabó convertida en la bibliotecaria de Pontecesures. Ella fue, ayer, la anfitriona en un acto convocado para celebrar esos cuarenta años de libros y de dinamización cultural. Presidido por la alcaldesa, al evento estaba invitada toda la ciudadanía. Los discursos corrieron a cargo de la editora Andrea Jamardo y los escritores Cándido Duro, Fernando Rodríguez y María Vázquez. Sus nombres son sobradamente conocidos para quienes pasan por la biblioteca. «Sempre nos regalan exemplares dos seus libros para a nosa sección local», explica Teresa.

Ella ha visto pasar por la biblioteca a generaciones enteras de cesureños y cesureñas. En cuarenta años el mundo ha cambiado mucho, y esos cambios se han dejado notar, también, en este pequeño rincón junto al Ulla. «Cando empezou, a rapazada ao saír do colexio paraba aquí e facían fila para deixar os libros que xa leran e coller outros novos», recuerda. Habla con cierta nostalgia de aquellos años en los que los deberes de la escuela se resolvían en las mesas de la biblioteca. «Estábase moito aquí», cuenta Teresa. Ahora ya no es así. La gente acude junto a ella para entregar un libro y recoger otro. «E ás veces, cando lles mandan facer un traballo en grupo, a rapazada vén para aquí tamén». Pero no es lo habitual. Sin embargo, «temos novos usuarios, como a xente que ven usar os ordenadores. Tendemos a pensar que todo o mundo ten ordenador e Internet na casa, pero non é así», explica la responsable de esta casa de los libros, bien nutrida con más de 15.500 títulos.

Sería difícil mantenerlos todos bajo control si no fuese por los nuevos sistemas de organización y digitalización de las bibliotecas. «Agora unha persoa cun carné de calquera biblioteca pode utilizar todas as da rede pública de Galicia», cuenta Teresa, que parece encantada con haber dejado atrás, hace ya tantos años, las fichas de cartón en las que se registraba la información de cada tomo, sus venturosas idas y venidas.

Teresa presta una especial atención a estar al día en el campo de la novela y la literatura infantil: son, sin duda, los campos que más interés generan entre los 856 socios de la biblioteca. «Tamén temos lectores máis especializados», reconoce. Para los que no lo son y no tienen claro qué llevarse a casa, está ella, cargada de sugerencias. Eso sí: ser bibliotecaria en Pontecesures exige mucho más que saber de libros y mantener bajo control sus entradas y salidas. «Tes que estar ao tanto das cousas que pasan no Concello, porque a xente vén e pregunta de todo. E nestes últimos anos tamén fai falla saber da historia da vila, que ten moita, para poder contestar a todos os peregrinos que pasan por aquí». Y es que es en la biblioteca, entre libros e historias, donde se cuña ese carné que certifica que se han cubierto las etapas del Camino.

«Aquela idea de que a biblioteca ten que estar en silencio desapareceu», reflexiona Teresa, mientras hace un repaso mental por todo lo que han cambiado las cosas en los últimos cuarenta años. Ahora, este local funciona más bien como un punto de encuentro, como un espacio desde el que se intenta alimentar el amor por la lectura, que a fin de cuentas es el amor por la curiosidad, por el conocimiento, por la sabiduría. A lo largo de los años, Teresa ha organizado actividades que tenían como objetivo atraer a la rapazada hacia los libros, una tarea que se ha vuelto especialmente complicada desde la irrupción de alternativas con tanto tirón como los teléfonos móviles y las redes sociales.

La biblioteca cesureña, que trabaja codo con codo con el colegio, organiza talleres, cuenta cuentos, teatrillos… Y organiza, también, actos de presentación de libros y muchas cosas más, siempre con las letras, las palabras y la inteligencia en el centro de todo.

Los libros de la escuela Vicente Moure

Entre los muchos libros que forman el catálogo de la biblioteca municipal de Pontecesures hay un grupo de ellos que destaca: son los que componían la biblioteca de la escuela Vicente Moure, un edificio que se demolió cuando se construyó la carretera nacional que parte Pontecesures por la mitad. Durante muchos años, los tomos que se encontraban en aquel espacio anduvieron a tumbos por el pueblo, unos años almacenados en el Concello, otros siendo enviados al colegio… Hasta que, por fin, encontraron su sitio en la biblioteca municipal. «Para nós son un orgullo», cuenta Teresa. Ella está muy orgullosa de la historia de su pueblo. Y por eso, en este mes de abril —el último de su vida laboral— se han organizado varias actividades para dar a conocer la figura de Manuel Otero Acevedo, pionero de la neurocirugía.

La Voz de Galicia

Manuela Eiras se suma al club de las centenarias de Valga celebrando su día con una gran fiesta familiar.

Nela de Catalina sopló las velas con el alcalde, Bello Maneiro, a quién crió como a un hijo más.

Manuela Eiras se suma al club de las centenarias de Valga celebrando su día con una gran fiesta familiar
Manuela acompañada de su familia y el alcalde Bello Maneiro.

Valga suma una nueva centenaria. Manuela Eiras Castiñeiras, vecina de Ferreirós, en Cordeiro, celebró este domingo un siglo de vida y lo hizo rodeada de su extensa familia y acompañada, también, por el alcalde, José María Bello Maneiro, que acudieron a felicitarla y a agasajaron con un ramo de flores, dulces y una placa”. Nela de Catalina trabajó toda su vida en el campo y en casa, sacando adelante a su familia. Tuvo nueve hijos, uno de ellos ya fallecido, y cuenta con catorce nietos y dieciocho bisnetos. Pero la celebración del centenario reunió en total a unas setenta personas, buena parte llegados desde Madrid a donde emigraron la mayoría de sus hijos. Se juntaron todos en una comida que fue una gran fiesta con porque este no es un aniversario cualquiera, sino “un día moi especial”, señaló Ana María Ferro, la hija pequeña. 

También el alcalde se agradó con este día, pues “celebrar un centenario sempre é unha alegría, pero o caso da señora Nela é moi especial”. Y es que tal y como Corroboró Nela, a Bello Maneiro “crieino eu aquí, cos meus fillos”. Todos quedaron emplazados para volver a celebrar el próximo año: “Quero vervos a todos aquí para celebrar os 101”, les dijo el regidor, y que Manuela “siga tal e como está”, deseó Maneiro. 

ManuelaEiras100 3

Nela sigue todos los días su rutina. Se levanta sobre las diez de la mañana y, después de asearse, enciende la televisión para ver la misa. Después llega el tiempo de los deberes. Porque para mantener su mente activa, hace tareas de escritura con cuadernos escolares. Y cuando finaliza, le pregunta a su hija: “Saliume ben?”. Por la tarde echa una siesta, merienda y, sobre las ocho, ve para la cama a ver otro poco la tele. Le encantan las novelas y el Luar, pero también los programas sobre política. 

Manuela Eiras es la quinta mujer más lonjeva de Valga, después de María Tarrío, de Eiras de 101 años, y de Manuela Duro, de Casal de Eirigo, Concepción Jamardo, de O Sixto, y de Dolores Benilde Castaño Bandín, de Laxes, las tres con 100 estupendos años.

Diario de Arousa

Valga convoca unha nova edición do Ferro Couselo.

Os traballos poden presentarse ata o día 25 de abril nas dúas modalidades habituais

OConcello de Valga ven de convocar un ano máis unha nova edición do premio Xesús Ferro Couselo, un certame que cumpre vinte e cinco anos promovendo a cultura e a investigación e homenaxeando a esta insigne figura da cultura galega e Fillo Predilecto do municipio.

Os traballos poden presentarse ata o día 25 de abril nas dúas modalidades habituais. Á primeira, dotada con 4.000 euros, poden concorrer traballos de investigación de ámbito galego, dentro das especialidades de etnografía, paleografía, numismática, arqueoloxía, historia e historia da arte. As obras deben estar escritas en galego, ser inéditas e que non teñan obtido ningún premio anteriormente. A extensión mínima será de 50 folios e a máxima de 300.

Na segunda modalidade convócase unha bolsa de estudos para proxectos centrados en estudos históricos, etnográficos ou sobre persoeiros do municipio de Valga. Os participantes deben presentar un guión razoado no que detallen os obxectivos que pretenden acadar co traballo, a metodoloxía a empregar e as distintas fases de realización. Esta bolsa está dotada con 3.000 euros. O 25 % desta cantidade entregarase unha vez fallado o premio e o 75 % restante ao remate do traballo.

Os participantes en calquera das dúas modalidades deben dirixir os seus traballos ao Rexistro de Entrada do Concello de Valga entregando cinco copias tamaño A4, con fonte Arial tipo 12 e interliñado simple. É imprescindible presentar os traballos baixo un lema, que tamén figurará no exterior da plica na que se incluirán o nome e apelidos do autor, enderezo e teléfono. Os gañadores daranse a coñecer a finais do mes de xullo, no aniversario do nacemento de Ferro Couselo.

O xurado

O xurado estará constituído por catro especialistas no campo da investigación designados pola comisión de Cultura do Concello, que se reservará para si a presidencia e a secretaría. Se o considera pertinente, o xurado poderá dividir o premio, concedéndollo como máximo a dúas obras. Tamén poderá declarar deserto o certame se os traballos non acadan a calidade desexable.

As obras premiadas quedarán en poder do Concello de Valga, que se reserva o dereito de publicación.

La Voz de Galicia

Lleno en el convento del Carmen de Padrón para celebrar el 15 aniversario de la Orquesta Gaos.

Interpretaron una selección de canciones gallegas de siempre

La actuación de la Orquesta Gaos abarrotó el convento

La actuación de la Orquesta Gaos abarrotó el convento.

Más de 400 personas disfrutaron del concierto Galicia nas veas con el que la Orquesta Gaos, dirigida por Fernando Briones, inició la celebración de su 15 aniversario.

El público, entre el que se encontraban el alcalde padronés Anxo Arca y la teniente de alcalde Chus Campos, aplaudió con entusiasmo la selección de canciones gallegas de siempre orquestadas por Juan Durán e interpretadas por el Coro Gaos, la soprano Vanessa Goikoetxea y el barítono Borja Quiza.

En un convento del Carmen abarrotado sonaron piezas como «Lela», «Negra sombra», «Lonxe da terriña», «Rosa de abril» o la cantata «Cantiga Finisterrae», que fue escrita para celebrar el cambio de milenio sobre textos de Miguel Anxo Fernán-Vello.

La Orquesta Gaos fue fundada para aglutinar el talento de los jóvenes intérpretes de los principales conservatorios de Galicia.

El concierto se incluía en la programación cultural de otoño, que este sábado llevó a Padrón a los actores Manuel Manquiña y Ángela Andrada con la obra Todo nunha noite.

El Correo Gallego

Vilagarcía rememora el 150 aniversario del ferrocarril con una exposición en el Gato Negro.

La muestra, que se inauguró con un coloquio a cargo de Carlos Abellán, se trasladará a continuación a Catoira

Hace 150 años, un ferrocarril recorrió por primera vez una línea regular en Galicia. Lo hizo desde la estación de Cornes, entonces perteneciente al extinto Concello de Conxo, para concluir su histórico viaje en Carril, que todavía poseía su propio Ayuntamiento. Aquel momento une para siempre a Santiago y a Vilagarcía, depositarios ambos de un legado que ayer sumó un lazo más, con la inauguración de la excelente exposición que acoge la sociedad Gato Negro, conformada por paneles repletos de fotografías irrepetibles y textos que las explican con rigor.

La apertura de la muestra, que concluyó con un coloquio a cargo de su comisario, Carlos Abellán, presidente de la Asociación Compostelana de Amigos do Ferrocarril, despertó un notable interés, a la vista del público que no quiso perderse la cita. Allí estuvieron, por ejemplo, los alcaldes de Vilagarcía, Alberto Varela, y Catoira, Xoán Castaño, municipio que también toca el legendario trazado por el que Rosalía de Castro hizo su último viaje en vida, y que recibirá la exposición, de carácter itinerante, en cuanto deje la capital arousana, donde acaba de ser reinaugurado el Museo do Ferrocarril.

La Voz de Galicia