Los presupuestos del Estado obvian a Arousa.

El proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado que el ministro Montoro presentó ayer en el Congreso de los Diputados sobrevuela los once municipios que componen la comarca de Arousa de tal forma que sus números constituyen un sorprendente ejemplo de ninguneo. Apenas un puñado de partidas de asignación directa figuran con nombres y apellidos en unas cuentas que, para colmo de males, difieren su inversión real a ejercicios venideros. Se anuncia, por ejemplo, la intervención en el yacimiento arqueológico del Mercado dos Mouros, en Valga, pero para el año en curso no se habilita un solo euro. Algo semejante sucede en el caso de la plaza de abastos y la lonja de Cambados, cuya reserva millonaria se prevé para el 2019 y el 2020, nunca para el 2018. Curiosa fórmula para tratarse de un año de marcado carácter electoral.

En puridad, los presupuestos apenas consignan para Arousa en el 2018 los cincuenta mil euros previstos para la variante de Pontecesures y Valga. Una magra cantidad que, obviamente, no servirá para ver avanzar una actuación de esta magnitud, que, según los cálculos del equipo de Montoro, recibirá diez veces más, medio millón de euros, al año siguiente. Resulta llamativo que, en estas circunstancias, aparezca reflejada en el documento la rehabilitación del firme de los cinco kilómetros de la N-640 que constituyen la travesía de Vilagarcía. Esto es, el tramo que media entre la rotonda de Baión y el centro de la capital arousana. Lo curioso del asunto es que las cuentas dan por hecho que se inició y se concluyó a lo largo del 2017, tal y como sucedió, por lo que no se comprende muy bien qué pinta en el proyecto de ley para este año. Podría pensarse que se trata de algún guiño desde el Ministerio de Fomento, deseoso de que el Concello de Vilagarcía asuma la titularidad de la vía. Una especie de referencia que espere una consignación futura, puesto que Ravella en ningún caso dará este paso sin que Fomento actúe a fondo sobre el la travesía. Sin embargo, el gobierno local que encabeza el socialista Alberto Varela no tiene constancia alguna de que el ministerio tenga intención de intervenir de nuevo en la recta de Rubiáns y su entorno. Es más, la idea de construir una rotonda de acceso al Hospital do Salnés, que en su día llegaron a prometer los populares Tomás Fole y Rafael Louzán, es poco menos que una quimera, de acuerdo con las últimas noticias que llegan desde Madrid.

Ni siquiera tiene demasiada suerte la puesta en valor de los 18 yacimientos galaicorromanos que la Diputación ha puesto en marcha y aguardan como agua de mayo la imprescindible contribución de Fomento. Según el proyecto de presupuestos, el departamento estatal apenas habilitará este año 456.240 euros para la veintena de proyectos de musealización entre los que se encuentran los del castro Alobre, en Vilagarcía, Igrexa Vella, en Valga, y Monte do Castro, en Ribadumia, así como A Lanzada. Con respecto a la vía verde que comunicará Vilagarcía con Caldas y Portas a través de una senda para caminantes y ciclistas, la participación del Estado está pendiente de un encuentro que el alcalde portense se comprometió a gestionar a través del vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y aún no se ha celebrado.

Así las cosas, y a la espera de que se concrete la participación de Arousa en las partidas de carácter genérico, se quedan en algún cajón un buen puñado de actuaciones que precisan de la cooperación y los dineros de la Administración central.

MINISTERIO DEL INTERIOR

La casa cuartel de la Guardia Civil. El eterno proyecto pendiente seguirá durmiendo el sueño de los justos. El Concello de Vilagarcía puso a disposición de Interior una parcela de 5.000 metros cuadrados en el entorno de O Piñeiriño. La obra incluso salió a licitación en el 2010, por un importe de 4,9 millones de euros, y estaba a punto de ser contratada cuando el Gobierno la paralizó, escudándose en la crisis y los recortes. Desde entonces se le ha intentado lavar la cara al maltrecho edificio, pero basta echar un vistazo a su parte posterior para comprobar que está de pena.

Ministerio de Fomento

Intermodalidad de la estación de ferrocarril y autobús. El presidente del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) recibió con interés la idea que el alcalde y la concejala de Urbanismo, Paola María, le plantearon en febrero. La reordenación de espacios, no obstante, todavía no se ha materializado.

La Voz de Galicia

Investigado por robar veinte pájaros adiestrados a su vecino y sorprendido cuando vendía seis.

Un vecino de Pontecesures con numerosos antecedentes penales por robo e incluso vinculado a una banda relacionada con el asalto a gasolineras fue detenido por la Guardia Civil como presunto autor del robo de una veintena de pájaros adiestrados que se encontraban en el interior de la vivienda de un vecino.

El individuo en cuestión estaba siendo investigado por los agentes de la Guardia Civil de Vilagarcía en base a las pruebas o indicios obtenidos en la inspección de la vivienda asaltada, a la que el ladrón de pájaros accedió tras forzar una de las ventanas.

La detención se produjo cuando el presunto autor de los hechos fue sorprendido en una conocida pajarería del municipio vecino de Padrón tratando de vender seis de los pájaros.

Hay que decir que el botín estaba valorado en unos seiscientos euros, ya que se trata de ejemplares adiestrados para participar en competiciones de canto y/o belleza.

Una vez practicada la detención y completada la investigación, tanto los pájaros -salvo tres que habían muerto ya- como las jaulas que habían sido robados fueron devueltos a su propietario, al tiempo que se tramitaron las oportunas diligencias judiciales en Caldas de Reis.

En términos coloquiales o campechanos puede decirse que el autor de estos hechos también es «un buen pájaro».

Así lo deja patente la Guardia Civil cuando señala que está ligado a otras actividades delictivas destacadas.

A modo de ejemplo se le vincula con «un robo cometido en el año 2014 en una vivienda situada en una céntrica calle de Pontecesures y con otro que tuvo lugar en diciembre de 2016 en un establecimiento de hostelería del Concello de Valga, de donde se había llevado la recaudación de la máquina del tabaco y varios décimos de lotería».

«Operación Pitillo»

Pero eso no es todo. La benemérita resalta que el detenido «tiene un amplio historial de antecedentes delictivos contra la propiedad» y que en noviembre del año pasado «fue detenido en el marco de la operación ‘Pitillo’, como uno de los integrantes de la banda que se dedicaba al robo en gasolineras».

A aquel grupo criminal organizado -fueron cinco los detenidos- se le atribuyó la comisión de, al menos, nueve robos con fuerza en gasolineras durante los meses previos en distintas localidades de las provincias de Pontevedra y A Coruña, fundamentalmente en las comarcas de Caldas y O Salnés.

Como se explicaba en noviembre, todos los hechos investigados fueron robos cometidos durante la noche y en estaciones de servicio cerradas al público.

En la práctica totalidad de los casos accedían al interior del establecimiento violentando o rompiendo la puerta con un mazo y el objetivo prioritario era la sustracción de las máquinas expendedoras de tabaco.

Faro de Vigo

Detienen a un vecino de Pontecesures por robar veinte pájaros en una casa.

El hombre cuenta con numerosos antecedentes

La Guardia Civil ha detenido a un vecino de Pontecesures por el presunto robo de una veintena de pájaros y varias jaulas que habría sustraído en una vivienda próxima a su domicilio. Los animales eran de distintas especies y estaban adiestrados para competición, por lo que están valorados en algo más de 600 euros.

Una minuciosa inspección ocular de la vivienda del ahora acusado permitió al equipo de investigación de Vilagarcía acceder a su interior, tras forzar unas de las ventanas. Eso llevó a establecer una línea de investigación sobre esa persona, que concluyó cuando la sorprendieron vendiendo a los animales que había sustraído en una pajarería de Padrón. Al ser detenido, hizo entrega voluntaria de los jaulas y las aves, excepto de tres que habrían fallecido.

A raíz de esta detención, el equipo de investigación, que contó con la colaboración de efectivos del puesto de Caldas, pudo vincular a este persona con la autoría de otros dos robos. Uno de ellos fue cometido en el 2014 en una vivienda de Pontecesures y, el otro, en diciembre del 2016 en un establecimiento de hostelería de Valga. En este último se habían llevado la recaudación de la máquina de tabaco y varios décimos de lotería. El detenido tiene un amplio historial de antecedentes y hace unos meses ya había sido arrestado como integrante de una banda que se dedicaba al robo en gasolineras.

La Voz de Galicia

El PSOE Ulla-Umia constituye su coordinadora comarcal.

Los secretarios y secretarias generales de las agrupaciones socialistas de la zona Ulla-Umia se reunieron para constituir la coordinadora comarcal del PSOE. Está integrada por los secretarios generales del PSOE en Caldas, A Estrada, Barro, Campo Lameiro, Cuntis, Moraña, Pontecesures, Portas y Valga, Por aclamación se decidió que el coordinador de este grupo sea Manuel González.

Faro de Vigo

Los huesos hallados en Pontecesures eran de Lilia Miguéns, desaparecida en 2015.

La autopsia confirma que los restos pertenecen a la septuagenaria, que habría muerto el día de su desaparición por causas naturales -Fueron entregados hace días a la familia. Apenas había dudas, pero la autopsia y los análisis de ADN practicados lo han confirmado: los restos mortales encontrados en agosto de 2017 en un monte de Porto, en el Ayuntamiento de Pontecesures, pertenecían a Lilia Miguéns Iglesias, una mujer que había desaparecido dos veranos antes, a la edad de 79 años.

Vivía en el lugar de A Devesa, en la parroquia de Campaña (Concello de Valga) y había sido vista por última vez en junio de 2015 cerca de río Ulla, en el Ayuntamiento de Padrón, situándose todos los lugares citados hasta aquí en un reducido radio de acción. Los huesos de la septuagenaria recuperados para la autopsia -el cráneo, costillas y diversas partes de las piernas y manos-, fueron entregados hace un par de semanas a su familia, que hace días ofició una misa en su memoria en la iglesia de Pontecesures.

Al parecer no se encontraron signos de violencia y se cree que Lilia Miguéns falleció el mismo día de su desaparición, y en ese preciso lugar -el monte de Porto-, por causas naturales.

Esto permite cerrar el caso que se tramitaba desde el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Caldas de Reis, y que había llevado a las fuerzas de seguridad a investigar a diversos familiares y allegados de la víctima.

De este modo puede concluirse que Lilia Miguéns Iglesias falleció a escasos quinientos metros de su casa y que su cuerpo permaneció tirado en el monte de Porto un par de años, por lo que sufrió las consecuencias no solo del proceso de descomposición natural, sino también de la presencia de animales en la zona arbolada.

Esto último hizo que los huesos que permanecían en el lugar -ya no estaban todos-, acabaran parcialmente cubiertos por la maleza y desperdigados.

Como se explicó en agosto pasado fueron encontrados, junto a la ropa y las gafas de la víctima, tras declararse en aquel monte de Porto un incendio forestal, presuntamente intencionado.

Al día siguiente acudieron al lugar el alcalde, José Manuel Vidal Seage, y el jefe de Protección Civil. Querían inspeccionar la zona para determinar el alcance de los daños causados por el fuego, y lo que se toparon fueron los restos óseos de un ser humano, lo cual encendió todas las alarmas.

«Vi que en el suelo había lo que me parecía un fémur; al principio dudé de si sería humano, pero más adelante vi otro, y también una tibia, y a unos diez metros estaba la calavera, por lo que ya no me quedó duda alguna», declaraba el regidor pontecesureño tras aquella primera inspección ocular.

También confirmaba que los huesos habían sido esparcidos por los animales y aclaraba que «eran los restos óseos de una mujer; aparentemente de avanzada edad, a juzgar por el estado de su dentadura y las ropas que permanecían esparcidas por el suelo».

Esto llevaba a Vidal Seage a manifestar que los vecinos, «perplejos» ante el macabro hallazgo, «creen que se trata de aquella mujer que desapareció hace un par de años».

Se refería a Lilia Miguéns, y esa fue también la primera hipótesis manejada y la línea de investigación abierta por la Guardia Civil, que como ahora confirma la autopsia estaba en lo cierto.

Solo quedaba confirmarlo con pruebas como las de ADN, ya que los huesos recogidos en el lugar por la Policía Judicial para su traslado al Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Pontevedra estaban «totalmente limpios».

Cabe apuntar que si bien esos restos estaban en una zona arbolada, no se trata de un espacio alejado del núcleo poblacional o de difícil acceso, sino que es un pequeño monte rodeado de viviendas -e incluso un campo de fútbol muy frecuentado- que Lilia Miguéns conocía bien.

En su momento, cuando en verano de 2015 se denunció su desaparición, se puso en marcha un operativo de búsqueda por los alrededores, y lógicamente también por esa zona arbolada, aunque como es evidente no dio resultado.

Faro de ?Vigo

La buscaron por tierra, mar y aire.

Tras saberse de la desaparición de Lilia Miguéns, el 26 de junio de 2015 efectivos de Protección Civil de varios municipios, Guardia Civil, buzos, una unidad canina y un helicóptero ponían en marcha un operativo de búsqueda que se centró inicialmente en la zona de Lestido (Padrón), ya que un vecino aseguró haber visto a la mujer en ese lugar a eso de las 19.00 horas. Se la buscó por tierra, con ayuda de unidad canina, y en el agua, tanto en el río Ulla como en uno de sus afluentes, el Sar, en este caso con apoyo de una lancha y buzos de la Guardia Civil. Como se dijo entonces Protección Civil de Valga, Pontecesures, Caldas y Padrón participaban en el peinado de las inmediaciones del río y de las proximidades de la vivienda en la que residía Lilia Miguéns desde unos años antes, cuando había regresado al domicilio familiar desde Lugo, donde tiene un piso. Aquella búsqueda continuó en días posteriores, pero nunca más se supo de la septuagenaria hasta dos años después, cuando gracias a un incendio forestal fueron descubiertos sus huesos a solo 500 metros de su vivienda.

Faro de Vigo