Los nacionalistas dicen que el «desgobierno» miente y rehace propuestas de los otros grupos.
Los nacionalistas de Pontecesures han emitido un crítico comunicado con el gobierno local si bien cargan las tintas contra el «tránsfuga» Luis Sabariz y la alcaldesa Maribel Caqstro.
Los nacionalistas aseguran que el equipo de «desgobierno» reformó la moción presentada por su grupo respecto a la retirada de los símbolos franquistas y relacionados con la guerra civil que figuran en la fachada de la iglesia parroquial.
En relación con la propuesta del tripartito acerca de la modificación del IBI, los nacionalistas expresan su preocupación por la postura del edil del PP, Randulfe «que intentó pasar desapercibido en cuestiones de impuestos, cuando hace dos años su principal promesa electoral era la bajada de impuestos para los vecinos».
El resto del pleno giró en torno a ruegos y preguntas relativas a la Festa da Lamprea, Feira do Automóbil, alumbrado público, tala de árboles en el centro de la localidad y la organización del carnaval, amén de otras preguntas sobre arreglos y propuestas de obras.
Aseguran que los mismos integrantes del gobierno del PP y Sabariz «pusieron en duda la procedencia de las lampreas de esta edición», Peo el BNG va más allá y asegura que «no eran siquiera gallegas».
Sobre la feria del automóvil señalan que en el pleno quedó constatada «la nula implicación del gobierno municipal», Se bsas en el informe que leyó la alcaldesa de las actuaciones de los organizadores de «Mirándolle os Dentes», se pusieron todo tipo de trabas con la única finalidad de que fracasara la feria.
Afirma el BNG quke el ayuntamiento no aportó «ni un euro» a la feria «y sólo se les ocurrió decir que ya pusieron a los municipales a trabajar esos días en los actos que se celebraron en la Plazuela con motivo de las Letras Gallegos».
Durante el pleno, los nacionalistas reiteraron su pregunta acerca de los permisos para colocar el alumbrado público en las calles centrales del pueblo.
A ello contestó Randulfe quien aseguró que se habían pedido permiso a los propietarios de todas las viviendas donde se encuentran las catenarias, «cuando en el BNG sabemos que ello es incierto».
Otro de los asuntos polémicos fue la tala de árboles junto al monumento al Coche de Puedra. Sabariz contestó a esa interpelación con un informe en el que se alega la senectud de los ejemplares por lo que se aconsejaba su sustitución por plantas nuevas. La decisión es criticada por varios sectores.