La firma inicia las gestiones para ocupar la antigua fábrica de Novo y Sierra
Las naves ruinosas que asoman en la recta de Campaña (Valga) y que hasta hace tres años daban cobijo a la fabricación de ladrillo bajo la firma de Novo y Sierra podrían reconvertirse para dar paso a un nuevo proyecto industrial. Una empresa vinculada a la construcción de material militar se ha mostrado interesada por ocupar estos terrenos y en Valga han empezado a dar pasos para allanarle el camino.
El Concello está actuando de mediador con la intención de facilitar la instalación de nuevas empresas en el municipio y, con ello, generar puestos de trabajo. Al frente de estas gestiones están el alcalde José María Bello Maneiro y el concejal Román Castro quien ayer, en calidad de alcalde en funciones, confirmó que hay negociaciones en marcha, aunque prefirió no desvelar ni la identidad de la empresa ni otros detalles, a la espera de que se vayan concretando los compromisos.
Lo que ya existe es un acuerdo de la comunidad de montes de Campaña para ceder los terrenos que poseen en la antigua factoría de Novo y Sierra a la empresa interesada en esta ubicación. Se trata de los mismos terrenos que durante años estuvo ocupando la fábrica de ladrillo y por los que la comunidad estuvo cobrando una cantidad en concepto de alquiler.
Permuta
La cesión se hace con carácter de permuta de modo que, a cambio de los terrenos de Novo y Sierra, los vecinos se hacen con otra parcela situada al otro lado de la carretera.
Pero todavía queda mucho camino por recorrer antes de cerrar la operación, según explicaba ayer Román Castro. En el entramado de las negociaciones entran también los administradores judiciales de la desaparecida Novo y Sierra, pues esta industria entró en concurso de acreedores y sus bienes y sus deudas son ahora objeto de gestión por parte de la autoridad judicial.
Los terrenos en cuestión ocupan una superficie de 42.000 metros cuadrados, de los cuales 8.000 tienen carácter vecinal, y están calificados para usos industriales, según informó Román Castro. El concejal confirma que hubo otras empresas interesadas en esta parcela, pero los problemas que pesan sobre la gestión y la titularidad de la misma cerraron muchas puertas. Parece que la firma de material militar está dispuesta a salvar estos inconvenientes y sigue adelante con la operación.
LA VOZ DE GALICIA, 03/09/11