Seage triunfa tras una campaña «zafia e indecente, orquestada para desgastarme».

El alcalde conservador de Pontecesures se dispone a gobernar de nuevo en coalición con TeGa e IP -El PSOE marca ahora el rumbo al Bloque.

Juan Manuel Vidal Seage se convirtió en alcalde en mayo de 2016, a raíz de una moción de censura propiciada por su partido, el PP, con el respaldo de Terra Galega (TeGa) e Independientes de Pontecesures (IP).

Tras los resultados obtenidos el domingo podrá repetir en el cargo exactamente con los mismos socios; aunque con más poder, ya que tras quedarse a las puertas de la mayoría absoluta pasó de tres a cuatro concejales, mientras que TeGa e IP bajan, en cada caso, de dos ediles a uno.

Esto lo hace mostrarse satisfecho. Aunque con «un sentimiento encontrado», pues «por un lado está la satisfacción de seguir siendo la fuerza política más votada y haber incrementado el número de votos y de concejales», pero por otra parte está esa sensación de haber tenido cerca el éxito total.

De cualquier modo, su victoria cobra un peso importante porque se produjo «en un escenario tremendamente desfavorable para el actual equipo de gobierno, pues en estas últimas semanas hemos tenido que enfrentarnos a una indecente y zafia campaña electoral, perfectamente orquestada para desgastarme y favorecer mi caída, aunque finalmente no ha tenido el resultado que sus impulsores esperaban».

A pesar de todo «conseguimos mejorar los resultados, mientras que los demás partidos sufrieron un duro revés, pues aunque el PSOE tiene una tendencia victoriosa en España, aquí no consigue gobernar, y mientras el BNG mejora en Galicia, aquí pierde apoyos de manera muy llamativa».

Arremete así contra los grupos de la oposición, y muy especialmente contra el BNG de Cecilia Tarela, la gran perdedora del 26-M, pues la que fue alcaldesa ha propiciado que su grupo fuera superado como segunda fuerza por el PSOE de Roque Araújo.

Ahora «toca entablar conversaciones con los anteriores socios de gobierno a fin de reeditar ese equipo de gobierno que tan buenos resultados ha dado, distribuyendo competencias y áreas de gobierno», reflexiona un Vidal Seage, quien se muestra optimista ante la ratificación de esta alianza.

Será confirmada en próximos días, una vez reestructurado el reparto de funciones y responsabilidades dentro del tripartito «en aras de hacer un buen gobierno». Pero mientras tanto, «tenemos cosas pendientes y urgentes de las que ocuparnos, pues hay que definir ya las fiestas del Carmen y del Churro, que están a la vuelta de la esquina».

En definitiva, que el PP, representado por Juan Manuel Vidal Seage, Laura Villar Matos y José Ramón Cadilla Piñeiro, se dispone a gobernar en Pontecesures, tras haber logrado el domingo un total de 520 votos (31,52%), 79 más que hace cuatro años.

Lo hará junto a Ángel Souto, de TeGa, que obtuvo 197 papeletas (pierde 117 respecto a las elecciones de 2015) e Isabel Castro Barreiro, de IP, que consiguió 175 sufragios (130 menos).

En la oposición se queda el PSOE de Roque Araújo, Concepción Gómez y José María Carlés Muñiz. Como queda dicho se convierte en la segunda fuerza política, después de haber sido la quinta, y última, hace cuatro años. Pero subió de 269 a 434 sufragios, de ahí la escalada de posiciones.

También estará en la oposición el BNG, representado, de momento, por Cecilia Tarela Barreiro y Margarita Carolina García Castro. Este grupo consiguió 297 papeletas, es decir, 78 menos que en 2015.

Faro de Vigo

Bello: «Fue el mandato más duro a causa de la oposición rastrera que soportamos».

José María Bello Maneiro consiguió, después de 28 años como alcalde, una nueva mayoría absoluta. El líder del PP volvió a arrasar en Valga y conserva nueve de los trece ediles posibles. Está radiante por ello, pero también por haberse cargado políticamente a la portavoz socialista, María Ferreirós, quien tras sufrir un nuevo varapalo electoral el domingo ya anunció inmediatamente que da un paso atrás.

Ella es la responsable, en palabras de Bello Maneiro, de que el mandato que ahora termina fuera «el más duro que nos tocó vivir, y no por las complejidades en la gestión del Concello, sino por la posición rastrera y envenenada que tuvimos que soportar».

Lamenta así «la política de confrontación continúa, de odio y denuncias constantes en el juzgado intentando no solo hacer daño político a este equipo de gobierno, sino también desprestigiar personalmente a cuantos lo integramos».

Todo esto, insiste el conservador, fue fruto de la estrategia de la candidata del PSOE, que tras perder un concejal y quedarse con solo tres entiende que «los vecinos de Valga no valoraron nuestro trabajo, esfuerzo y ganas».

De ahí que anunciara que se aparta y que no sigue adelante con las demandas judiciales contra el regidor y su equipo. Aunque esto no es del todo así, pues «los socialistas no tienen nada que retirar, ya que su recurso contra los presupuestos de 2017 saben que no va a ninguna parte», espeta el líder del PP.

Y lo dice porque «la justicia ya desestimó otro recurso idéntico presentado por el Colexio de Secretarios e Interventores de Pontevedra (Cosital)».

Además, la denuncia contra las Comisiones de Coordinación «ya fue archivada por la Audiencia Provincial en una sentencia que es firme», añade el alcalde valgués.

Considera que «lo que deberían hacer los socialistas es explicar por qué uno de los ediles del PSOE votó a favor de estas comisiones en un pleno y después las denunció en el juzgado; o por qué en los últimos cuatro años se encargaron de difundir mentiras y falsedades, llegando incluso a extremos impresentables como intentar adoctrinar a los niños».

Al hilo de esto, explica Bello Maneiro que «se dieron casos en los que hijos de concejales del PP tuvieron que escuchar de sus compañeros de colegio que sus padres eran unos ladrones y robaban en el Concello».

Todo esto parece explicar el enfado del alcalde, convencido de que «la candidata socialista tenía que haberse retirado ya antes de las elecciones, dado el fracaso estrepitoso de su estrategia y después de que los jueves se encargaran de dejar al descubierto sus mentiras y su política de odio permanente».

Pero «es hora de aparcar la política y dejarla a un lado para centrarnos, como siempre hicimos, en la gestión», declara el primer edil.

Lo hace al tiempo que destaca su nueva victoria electoral, festejada el domingo con el lanzamiento de fuegos artificiales porque los vecinos «hablaron alto y dejaron claro que no les gusta esa forma de hacer política basada en la mentira y la descalificación permanente».

Se muestra orgulloso por el trabajo realizado por su equipo y «todos aquellos que colaboraron y nos apoyaron» , al igual que agradece que los ciudadanos confíen «abrumadoramente» en su proyecto.

Una labor de gobierno que en los próximos cuatro años se caracterizará por «más trabajo» y por una «lucha permanente» para que las diferentes administraciones públicas «respondan como se merecen los vecinos del Concello, pues aún quedan cosas por hacer, proyectos que sacar adelante e ideas para seguir mejorando la calidad de vida de los valgueses».

De lo que se trata, y termina, es de seguir trabajando, pues «mientras en otros municipios perderán semanas tratando de negociar acuerdos y pactos, gracias a la mayoría absoluta para nosotros hoy (por ayer) es un día más y estamos al pie del cañón trabajando como cualquier otro día, tratando de resolver los problemas de los vecinos».

Faro de Vigo

Hacen un llamamiento para que cesen las pintadas en la estación de Pontecesures.

Comienzan los trabajos de reparación del techo de la marquesina.

Lo usuarios del tren en Pontecesures, y especialmente Luis Sabariz Rolán, el exconcejal que desde hace años reivindica todo tipo de mejoras para el apeadero de la localidad, hacen un llamamiento a la colaboración ciudadana para que cesen las pintadas en el edificio.
El propio Sabariz señala que fueron eliminadas no hace mucho, con el pintado exterior del inmueble, pero solo unos días después los gamberros volvieron a embadurnarla, como sucedió en la estación de Catoira. Ayer se pintaron nuevamente las paredes del edificio pontecesureño, por lo que Sabariz muestra su deseo de que no sea atacado otra vez.

Reparación de la marquesina 

El exedil y portavoz de la comisión en defensa del tren de cercanías aprovecha para indicar que comenzaron los trabajos de reparación del tejado de la marquesina que se colocó hace unos meses, y por la que caía agua al andén principal.
Sabariz se lo comunicó al Administrador de Infraestructuras ferroviarias (ADIF), proponiéndole diferentes soluciones para acabar con esa filtración de agua. «Y esos trabajos han empezado ayer, para satisfacción de todos», explica.

Iluminación

También detalla que «en los próximos días van a mejorar la iluminación en la entrada a los andenes desde la Praza do Coche de Pedra o desde el Camiño da Portiña», por lo que «ahora quedamos a la espera de que nos instalen nuevos bancos y papeleras en los andenes, ya que se trata de mobiliario muy necesario».

Faro de Vigo

Destrozan con un mazo el radar de velocidad de Setecoros (Valga).

¿Qué hace un radar de los empleados para controlar la velocidad en las carreteras con un mazo dentro? Pues esta es una pregunta que se hacen muchos en el Concello de Valga cuando observan el estado en que quedó uno de esos aparatos de medición, en la parroquia de Setecoros.

El autor del destrozo empleó el mazo para destrozar la cámara del radar, y ya fuera por las prisas, o quizás por olvido, lo cierto es que se fue del lugar dejando el mazo dentro.

Hay en el lugar quien sospecha que a algún conductor no le debió agradar en exceso alguna multa por exceso de velocidad en esa zona, y quizás por eso la habría emprendido a golpes contra el, para muchos, temido artilugio.

El radar en cuestión se encuentra en el lugar de Cernadas (Valga), cerca de la intersección con un vial que avanza hacia Cuntis y controla la velocidad en la carretera Nacional 550, concretamente en uno de los puntos más conflictivos para la circulación en este vial que avanza desde Pontecesures hacia Caldas de Reis y Pontevedra.

Faro de Vigo

Vecinos de Pontecesures reclaman que se ponga freno a los vertidos de aguas fecales en el río Ulla.

Vecinos residentes en San Xulián de Pontecesures denuncian que, «históricamente, hay vertidos de aguas fecales que van directamente desde las viviendas al río Ulla». Sostienen que a pesar de los avances experimentados en materia de depuración y de la ampliación de las redes de saneamiento, «la situación sigue sin ser controlada en esta zona, a la altura del puente de hierro de la vía del tren que cruza sobre el cauce fluvial». Explican que «hay fosas sépticas canalizadas hacia el río sin que nadie haga nada para acabar con esta situación».

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