Requián rezaba ayer cuando Valga repartía anguila.

Miles de devotos en A Estrada//Se comieron 1.600 kilos de pescado

Cientos de devotos acudieron a la procesión de Requián

La comarca vivió ayer dos fiestas que, aunque bien diferentes, coincidieron en su gran poder de convocatoria favorecidas quizá por el buen tiempo ya que tanto la romería estradense de Requián como la XXIII Festa da Anguía y la XXI Mostra da Caña do País que celebró la localidad de Valga sumaron miles de visitantes.

En Requián cientos de devotos acudieron a la celebración en honor de la Virgen de los Milagros, con misas desde las ocho de la mañana, siendo la más concurrida fue la de la una de la tarde, aunque el acto que levantó más expectación fue la procesión con la imagen de una Virgen que llevaba en su manto menos billetes que otras veces y un sobre cerrado con dinero.

La capilla de Requián, que se amplió en 1950, fue construida en el año 1744 por el sacerdote Pedro García de Aboy, natural de esta aldea. Su intención era evitar a los vecinos el trayecto de unos 5 kilómetros para acudir hasta la iglesia parroquial de Frades. Curiosamente, la primera advocación se dedicó a la Piedad (que hoy en día es protagonista de la segunda jornada festiva, la de mañana), pero a principios del siglo XIX la virgen de Os Milagros se convirtió en la titular del templo. En Valga, por su cercanía, el 28 de agosto es festivo.

Y allí supieron celebrarlo bien ya que en Valga se repartieron ayer 1.600 kilos de anguila preparada de diferentes maneras: en empanada, guisada, a la Bella Otero (en paella con mariscos), rebozada, frita y en escabeche con cachelos. Cada ración tenía un precio de seis euros aunque la empanada de medio kilo se vendía por diez euros y la organización ofrecía la posibilidad de adquirir una bandeja con un menú degustación que abarcaba una pequeña porción de cada especialidad por el precio de quince euros. Y al atractivo gastronómico de la anguila se sumaba un stand que ofrecía licores de todos los colores y sabores con una característica común: todos ellos estaban basados en el aguardiente .

Mientras tanto el pregonero de este año, el actor Manuel Manquiña, acompañado por el alcalde de Valga, José María Bello Janeiro; el director xeral de Competitividade e Innovación Tecnolóxica, Juan Carlos Maneiro; el empresario local Andrés Quintá, propietario de Extrugasa; el locutor de la Radio Galega Luis Rial; y otras autoridades se acercaba al lugar en el que dos alambiques elaboraban aguardiente de la mano de Tucho y Fermín, que atendieron amablemente a todos aquellos visitantes que quisieron probar la caña tal y como salía de las dos potas instaladas en el recinto de la fiesta.

EL CORREO GALLEGO, 29/08/11

La extraña pareja aguanta el tipo.

La Festa da anguía e da caña midió fuerzas ayer con una romería

Los vecinos de Valga estaban llamados ayer a renovar sus lazos con la anguila y la caña del país, dos productos que simbolizan la fecundidad de este municipio del Baixo Ulla. Esa mezcla de pescado y licor puede resultar, a simple vista, rara. Pero funciona: lleva más de veinte años haciéndolo. Ayer, la extraña pareja volvió a demostrar todo lo que vale, y lo hizo saliendo airosa de un pulso con la mismísima Virxe dos Milagres de Requián (A Estrada). Y es que, a pesar de que muchos valgueses decidieron cruzar la frontera y asistir a la tradicional romería del pueblo vecino, en el parque Irmáns Dios Mosquera las raciones se agotaron.

«Polo que eu vin, no recinto había xente, pero a maioría de fóra de Valga». La frase es del alcalde, Bello Maneiro, que como todos los alcaldes de pueblo sabe bien quién es quién. Habla el regidor sin acritud hacia los desertores de la fiesta de la anguila y la caña. Y es que muchos de ellos apostaron por irse a Requián, sí, pero cargados con una empanada bajo un brazo y una buena botella de orujo bajo el otro.

Sea como fuere, la de ayer fue una fiesta atípica: justa en bullicio y recortada en gente bajo las carpas. El agobio y la sensación de claustrofobia estaban desterrados, y eso no fue solo efecto de un milagro, si no también del recinto escogido para albergar la celebración.

El parque Irmáns Dios Mosquera, situado a un tiro de piedra del Concello, es amplio y permite colocar cada pieza en su lugar, todas relativamente cerca pero lo suficientemente lejos para evitar tumultuosas aglomeraciones. La caja, los puestos para recoger las raciones y los expositores que permiten conocer cómo se destila el buen orujo gallego marcan el límite de la zona cero: una carpa de largas mesas a las que los primeros comensales empezaron a llegar poco después del mediodía. Mientras ellos escogían sitio sobre los blancos manteles de papel, los camareros del imprescindible bar móvil empezaban a calentar motores, los maestros daban sus primeras lecciones de alambique, y un club de adiestramiento de perros hacía una demostración de las habilidades combinadas de canes y humanos al más puro estilo César Millán. Cerca de allí, en el Concello, las autoridades se preparaban para su desembarco en el recinto festivo. A Bello Maneiro y al pregonero, Manuel Manquiña, les aguardaban muchas manos que estrechar.

LA VOZ DE GALICIA, 29/08/11

Manuel Manquiña se declara fan de la anguila frita y del buen orujo.

Fue Manuel Manquiña, presentado como «o mellor actor galego», el encargado de inaugurar oficialmente esta edición de la Festa da Anguía e Mostra da Caña do País. Con media hora de retraso sobre el horario previsto, se subió al escenario y pronunció un pregón sin tacha: ni muy corto, ni muy largo; ni escaso en elogios al pueblo anfitrión, ni excesivo en sus loas. Y regado con un chorro de humor que hace más fácil la digestión de todo tipo de ejercicio de oratoria.

Argumentos

Su primer argumento fue que la de Valga es gente «tranquila e sen presas». Algo de lo que da fe que empezasen hace 23 años «a comer anguía, e aínda esperasen dous antes de empezar a beber» la caña que tan bien destilan. Del pescado homenajeado aseguró que «é un tesouro» difícil de apresar, y que él prefiere degustar frito -los asistentes a la fiesta podían elegir entre seis preparaciones diferentes-. De la caña aseguró, licencias de artista, que sobre ella se cimentó el Camino de Santiago: fue un chupito de orujo valgués lo que permitió a quienes transportaban el cuerpo del Apóstol acabar su viaje.

LA VOZ DE GALICIA, 29/08/11

La tierra de la Bella Otero degusta anguilas y caña.

Preparación de combinados con caña.

El lugar de Vilarello se hizo con el premio al más hermoso en el concurso Embelecer Valga entregado en la Festa da Anguía

Valga celebró ayer la vigésimo tercera edición de su Festa da Anguía y la vigésimo primera de la de la caña. Vecinos y visitantes participaron en una celebración en la que los productos locales fueron los protagonistas. Pero no solo, pues en la jornada también se entregaron premios a los lugares más hermosos del municipio y a los mejores carteles, así como a los trabajos de investigación presentados al certamen Xesús Ferro Couselo.

Las anguilas del río Ulla y el aguardiente destilado por los vecinos de Valga volvieron a congregar ayer a cientos de personas alrededor de una mesa. Vecinos y visitantes participaron en la vigésimo tercera edición de la Festa da Anguía y en la XXI de la de la Caña, que pese a celebrarse bajo un sol de justicia pocos quisieron perderse.
Ya a mediodía los comensales más madrugadores comenzaban a coger sitio para degustar las anguilas en empanada, guisadas, fritas en escabeche y con cachelos, rebozadas, fritas con pimientos o cocinadas al modo La Bella Otero. Y aunque la imagen de las mesas instaladas bajo las carpas de la fiesta distaba del lleno total, los fogones no pararon de crepitar y echar humo, pues más de uno optó por llevarse los platos y disfrutarlos con calma en su casa.
Mientras algunos empezaban a comer y otros probaban los cócteles de caña y frutas que se ofrecían en unos puestos en los que se exhibían además alambiques, la Banda Municipal de Valga hacía el papel del Flautista de Hamelin y conducía a la gente hacia el escenario sobre el que el actor Manuel Manquiña se encargó de loar las virtudes valguesas en su pregón. Acto seguido, Alejandro Fernández Palacio y Ana María Sixto Barcia recogieron los premios por los trabajos sobre flora y vegetación y sobre alfabetización presentados al certamen de investigación Xesús Ferro Couselo. No fueron ellos, no obstante, los únicos galardonados, pues en la ceremonia se entregaron también, como es habitual, los galardones del concurso de carteles, los del certamen Embelecer Valga y los del concurso de aguardientes.
Los vítores se dejaron oír cuando se supo que Vilarello había conseguido imponerse como «el lugar más hermoso» de la localidad en un certamen que dejó a Canle en segunda posición y a San Miguel en tercera. Y mientras las cocineras trabajaban para atender a los cientos de comensales que se esperaban, por el escenario pasaban también Belén Potel Conde, Vanesa Sánchez Pardal y Hugo Padín Garrido, ganadores del concurso de carteles infantil. Marina Pardal Cardia, Ángeles Garrido Comparada y Aida María Pardal Cardia recogieron los premios en la modalidad de adultos. Las mejores cañas tostadas fueron las de Gustavo Rodríguez Blanco y José María Santiago Fontenla, y las de hierbas las de Diego Lorenzo Pardal y Francisco Javier Cerneira Torres. José Ribeiro Agrafojo y José Lagos Aboi hicieron las mejores blancas.

FARO DE VIGO, 29/08/11

Andrés Quintá: «Los concellos deberían crear una gran destilería comarcal».

El empresario valguense considera que, más que nunca, en tiempos de crisis «hay que aprovechar los recursos del río y de la tierra»

A sus 72 años Andrés Quintá se confiesa un apasionado de esta fiesta y de los productos que la protagonizan. El propietario de Extrugasa asegura que los tiempos de crisis obligan de nuevo a mirar a la tierra y al río o al mar.

-¿Cómo vive esta fiesta?

-Con esta fiesta tengo una relación muy especial. Una de las cosas que más me gusta de ella es que sirve para juntar a gente que viene de sitios muy distintos y que, en ocasiones, solo nos vemos una vez cada muchos años.

-¿Es usted amante de los productos que se exaltan?

-Desde niño. Recuerdo coger anguilas en los regatos de Valga hasta con un tenedor. Y después llevarlas a casa para comerlas. Una anguila recién pescada es un manjar sabrosísimo.

-¿Y de la caña del país?

-Pues aunque no esté muy bien decirlo, tengo que confesar que desde niño también. Recuerdo que los mayores me llevaban a labrar, a la siega o a la malla y allí me daban agua fría de la fuente y una copita de aguardiente. Y eso no me ha perjudicado en absoluto, en nada.

-¿Y aún sigue degustándola?

-Por supuesto. No hay mejor experiencia para un café que echarle una copa de aguardiente.

-¿Cuál es su favorita?

-La de hierbas. Tomas una copita después de comer y quedas como nuevo.

-En más de una ocasión ha dicho que tendríamos que explotar mejor estos recursos.

-Y mucho más ahora. En tiempos de crisis hay que volver a mirar para la tierra, para el río o para el mar. Y saber aprovechar las riquezas y los recursos que nos ofrecen. Ahí tienen los jóvenes una gran oportunidad.

-¿Nunca se lo ha planteado usted?

-No, yo no. Yo ya tengo 72 años, y ni siquiera tenía que seguir ya estando en mi empresa. Pero reconozco que hay un potencial enorme en el tema de la caña del país. Fíjese lo que han conseguido los italianos con la grappa. Pues nuestra aguardiante es mucho mejor. Pero a quien le corresponde tirar del carro es a las administraciones, empezando por la local. Yo creo que sería una fenomenal idea promover y crear una gran destilería entre todos los ayuntamientos de la zona del Ulla y del Umia y lanzar la caña como un producto de calidad con un gran valor añadido.

Fiel defensor de la sabiduría tradicional, para el empresario Andrés Quintá la incorporación de los jóvenes al mercado laboral debe pasar necesariamente por el aprendizaje de las «técnicas de los abuelos».

-¿Cuál es su momento favorito de la fiesta?

-Me gusta mucho la reunión de los cañeiros que se hace el domingo. Y me agrada ver a la juventud en ese acto. Después, claro, también disfruto de la degustación de la anguila en la que me suelo reunir con los amigos. Siempre acabamos probando un poco de todas las cañas. Y para rematar, lo mejor es la verbena con una orquesta. Así que se podría decir que me gusta todo de la fiesta.

? Entre las novedades incorporadas este año por el concello de Valga a la Festa da Anguía e a Mostra da Caña do País destaca el concurso de recetas elaboradas con anguila.

Durante varias semanas todas aquellas personas que lo desearon pudieron realizar su inscripción. El pasados 19 de agosto, a las 13.30 horas, tuvo lugar la preselección de entre todas las recetas presentadas para escoger las dos mejores.

El jurado de la preselección estuvo compuesto por los hosteleros ?scar Freiría Rey y María Dolores Devesa Fernández, el hotelero Xosé Alberte Piñeiro Tubio y el cocinero responsable de la preparación de la anguila la fiesta de Valga Juan Carlos Sanmarco. En representación del concello también participó Román Castro Castromán.

El jurado decidió que las dos recetas merecedoras de pasar a la final fueran la anguila al horno con gambas y la anguila ao xeito do Ulla.

Estas dos variedades serán presentadas hoy al público en la degustación que tendrá lugar en el parque Irmáns Dios Mosquera a partir de las doce del mediodía.

Las votaciones de los comensales serán las que decidan qué plato es merecedor del primer premio de la primera edición del concurso A mellor receita de anguía.

LA VOZ DE GALICIA, 28/08/11