Lembranza da visita de Manuel Fraga á Festa da Lamprea de 2004.

No día en que finou Don Manuel, lémbrome da súa visita á Festa da Lamprea de Pontecesures 2004. Aquí o vemos departindo co hispanista británico Ian Gibson, pregoeiro na XIX edición da festa no Alfolí de Pontecesures na presenza do alcalde de Pontecesures, Manuel Luis Álvarez Angueira.
Pasouno ben aquela tarde Manuel Fraga en Pontecesures no almorzo oficial da festa. Ideolóxicamente Gibson e Fraga estaban nas antípodas pero as conversas entre os dous con varias referencias á estadía do político de Vilalba como embaixador en Londres e da obra do historiador Gibson foron dunha gran simpatía que se deixou sentir tamén nos discursos de ámbolos dous. Foi entrañable aquela edición da festa e tivo unha gran repercusión mediática que beneficiou á nosa vila.
Descanse en paz o expresidente da Xunta.

Cocina tradicional gallega y un sello de San Xulián para las credenciales.

A Mesa da Pedra no ofrecerá grandes dispendios gastronómicos, pero sí brindará a los peregrinso cocina tradicional gallega con un menú formado por primer plato, segundo y postre que a provechará los productos de temporada, “como las sollas e incluso la lamprea del Ulla”, afirma Vázquez, que tiene una dilatada experiencia como hostelero y que en la actualidad regenta una pulpería gallega en la vieja estación de tren de Botorrica, a 10 minutos de Zaragoza.
En A Mesa da Pedra será posible tamibién sellar también las credenciales .La Asociación de Amigos del Camino de Santiago en Internet utiliza un viejo sello de San Xulián, del siglo XVII.
Esta agrupación ha viabilizado la formación de asociaciones del Camino en otras zonas del planeta, como por ejemplo la de Puerto Rico, que agrupa en la actualidad a más de trescientos socios.

PLATOS DEL MEN?

Algunas opciones:
Caldo gallego
Pulpo á feira
Chorizos ahumados a la fragua
Carne ao caldeiro tradicional
Empanadas de tirgo o maiz
Mejillones de Cabo de Cruz al vapor
Sardinas asadas con cachelos
Pimientos de Herbón
Lacón con grelos
Queso de Arzúa con “relish” de higos
Filloas y chulas de calabaza
Tarta de Santiago
Café de pota

LA VOZ DE GALICIA, 12/01/12

El bajo caudal y la escasez de lamprea en el río Ulla empiezan a desesperar a los valeiros.

Las capturas son escasas y la demanda tampoco es excesiva, quizás a causa del alto precio

Los pescadores de Carril (Vilagarcía) y Pontecesures que trabajan en el Ulla dentro de la campaña de pesca de la lamprea empiezan a desesperarse. El caudal es bajo, como se advirtió ya en ocasiones anteriores, y esto reduce considerablemente las posibilidades de éxito.
Las capturas, como se comprobó nuevamente ayer, siguen siendo muy escasas ??apenas cuatro o cinco piezas diarias??, y lo que sucede es que esto encarece el precio ??pueden rondar los 50 o 70 euros la pieza??, lo cual provoca a su vez que la demanda de producto sea menor de lo habitual.
“El río lleva tan poca agua que parece que estamos en agosto”, se queja uno de los valeiros, que saben que la lamprea necesita encontrar agua dulce para orientarse y remontar el río antes de desovar. “Con tan poca agua hacemos el trabajo en apenas media hora, los aparejos no rompen y no los llenamos de porquería; todo eso es positivo, pero el problema es que significa que tampoco pescamos, y esta campaña se está convirtiendo en un auténtico desastre”, manifestaba ayer otro de los pescadores habituales del puerto de Pontecesures.
Mientras sigue la incógnita con los precios, puesto que “cada uno vende como puede”, la actividad en el citado muelle sigue siendo discreta, a pesar de lo cual es enorme la expectación que despierta ver a estos pescadores en plena faena a solo un puñado de metros de distancia. La pesca de la lamprea incluso llega a congregar en la zona portuaria pontecesureña a vecinos de otras localidades que observan con detenimiento cómo se lanzan y recogen las nasas butrón empleadas por los valeiros. Y la expectación es máxima cuando los pescadores llegan a tierra con alguna pieza en sus manos. Lo que sucede es que este año esos momentos de satisfacción tras una buena mañana de pesca son pocos, y si no empieza a llover de manera copiosa tampoco parece probable que la situación pueda mejorar.

FARO DE VIGO, 12/01/12

Las primeras lampreas cruzaron el Ulla hasta la cocina del Farrucán padronés.

“O problema vai ser a quen llas preparamos… porque hai demanda”. Era el testimonio de Manuel Losas, minutos después de adquirir las piezas capturadas en el Ulla por Gerardo, una, y la otra por la embarcación de Paco y su hermano. Pilar Novo, mujer de Losas y ama de los fogones del Farrucán, tuvo el privilegio de cocinarla a la bordelesa el Día de Reyes, tras ser por fin elegidos los afortunados clientes que darían buena cuenta de los ejemplares.

Pilar Novo es además continuadora de la saga familiar de un establecimiento hostelero que prepara lamprea desde 1878, precisamente sobre el propio Ulla, pero del lado de Padrón (justo antes del puente). Por su parte, el presidente de los baleiros, Antonio Pesado, se hacían eco de las parcas capturas que propicia el escaso caudal del Ulla en el arranque de temporada, una situación que esperan mejore a medida que avance el invierno.

Según explicaba Novo a este semanario, su familia ya preparaba lamprea en este establecimiento desde el siglo XIX, y recuerda que su mejor maestra fue su madre, Pilar Pérez, que regentó el restaurante durante 25 años. Ella y su marido llevan cinco años al pie del cañón, y Pilar tiene un grato recuerdo de dos de las tías de su padre, Matilde e Xosefa, que xa preparaban a lamprea na primeira metade do pasado século”. El problema es que no está asegurada la continuidad del Farrucán, ya que la hija de Pilar y Manuel no está por la labor. “Se alguen non se responsabiliza de levar o restaurante como debe de ser, creo que a tradición vai a acabar con nós”, se lamentaba Pilar Novo la pasada semana.

LA CLAVE. Vuelven a trabajar las pesqueiras y barcas en la parroquia de Herbón

. Además de la pesca artesanal de los baleiros en Pontecesures, este año vuelven a capturar lamprea en la parroquia de Herbón, donde se emplazan las famosas pesqueiras y operan las grandes barcazas. La lamprea ya se consideraba un alimento exquisito en la Edad Media, y los romanos la procuraban en sus banquetes. Además, algunas dataciones consideran que las pesqueiras del Ulla pueden llevar operativas 25 siglos. Paradójicamente, no se trata de un plato popular porque no es barato y su veda sólo se levanta durante cuatro o cinco meses. Además, se alimenta de la sangre de sus víctimas, sean tiburones, salmones o mamíferos marinos.

TIERRAS DE SANTIAGO, 10/01/12

La escasez de lamprea hace que algunos valeiros desistan y vayan “al paro”.

El colectivo de valeiros atraviesa unos momentos difíciles. Aunque el arranque de campaña de cada temporada siempre es flojo, esta vez parecen más pesimistas que de costumbre, y algunos aseguran incluso que prefieren irse “al paro”, o quedarse en casa sin hacer nada antes de estar acudiendo cada mañana al río “para gastar mucho dinero en gasolina de las lanchas sin traer nada a tierra para comer”.
La escasez de lamprea es “preocupante”, sostienen otros, a lo que añaden que “la contaminación del río está matando los peces”.
No obstante, el argumento que más se escucha hace referencia al bajo caudal. “El río no lleva casi agua, por eso la lamprea no aparece”, indican la mayoría de los consultados, quienes saben que este pez cartilaginoso que remonta el cauce fluvial para desovar necesita orientarse por las corrientes de agua dulce que salen a las rías o al Atlántico.
“Hemos decidido guardar las nasas y parar la lancha hasta que el caudal del río suba”, indicaba ayer uno de los pescadores más experimentados de cuantos operan en el río.
“No podemos hacer nada porque la anguila está en veda y la lamprea no aparece, de ahí que solo nos quede esperar a que llueva intensamente durante unos cuantos días para que suba el caudal del Ulla y la lamprea empiece a remontarlo, solo entonces volveremos a la actividad”, exp’lica con rotundidad uno de los valeiros.
A esto añade que ayer se levantaron las nasas butrón “y no apareció ni una sola pieza” meintras que el jueves se habían capturado dos ejemplares y el miércoles, tres.
“Es un pobre balance” explican, y más cuando esas cinco piezas capturadas pueden repartirse, quizás, entre dos o tres embarcaciones, lo cual supone que hay al menos una docena de barcos más, con un par de marineros a bordo en cada uno, que todavía no se han estrenado y temen no hacerlo pronto.
“Las cosas están muy mal (continúan los pescadores) y no es de ahora, sino que atravesamos dificultades desde hace ya varios años”.
Otros opinan que “a veces se dice que la lamprea es muy cara (puede pagarse a 70 euros la pieza), pero con esta escasez es normal que debamos cobrarla a esos precios porque cada vez resulta más difícil pescarla, y por tanto es mucho más complicado poder saborearla”.

FARO DE VIGO, 07/01/12