Las mil raciones de lamprea que se repartieron se agotaron en tres horas ·· El buen tiempo colaboró al éxito de la exaltación gastronómica ·· Los organizadores cifraron en más de 300 los ejemplares degustados ·· Llegaron ‘gourmets’ para la ocasión desde toda Galicia
Con el sol como invitado de lujo, la localidad de Pontecesures celebró ayer la decimotercera edición de la fiesta de exaltación de la lamprea. Aficionados a la reina del Ulla procedentes de distintos puntos de Galicia eligieron ayer la gran carpa instalada en el recinto portuario, que albergó a unos 1.500 comensales, que iban llegando a ritmo de charanga. Doce euros fue el precio de la ración de lamprea a la bordalesa, que incluía pan, bebida y una cazuela conmemorativa de barro de Buño. Este año como novedad también se repartieron 500 pinchos al precio de 2,50 euros.
Los paladares no dieron tregua, y para muestra un botón: antes de las tres de la tarde ya se habían vendido casi la totalidad del millar de raciones preparadas, acompañadas como es preceptivo de pulpo y churrasco. En las inmediaciones de la carpa se formaron largas colas para hacerse con las raciones. La organización cifraba en más de 300 las lampreas degustadas en la fiesta.
Desde toda Galicia
Entre los gourmets que se animaron para esta ocasión estaba, por ejemplo, Avelino Colino y Pilar Santiago, que viajaron desde Verín: «Decidimos pasar por Pontecesures para disfrutar de esta fiesta, ya que nunca habíamos podido venir y a mi marido le gusta mucho, pero yo lo voy a probar por primera vez», señaló la mujer.
Ellos formaban parte de las más de cinco mil personas que ayer llegaron a la villa cesureña para rendir culto al pez ciclóstomo que cada año sube el río Ulla para caer en las redes de los 44 pescadores del municipio que se dedican a esta captura. En las inmediaciones de la carpa se formaron largas colas para hacerse con las raciones.
La exaltación comenzó con la lectura del pregón a cargo del escritor Xosé Luis Ladra Fernández, reciente ganador del Premio Vicente Risco de Ciencias Sociais con su trabajo A pesca fluvial tradicional en Galicia. Caneiros, pescos e pesqueiras. Acompañado por la alcaldesa, María Isabel Castro Barreiro, el pregonero destacó el origen histórico de esta especie «A historia ensínanos que a lamprea foi un manxar aprezado polos emperadores romanos, polos zares de Rusia imperial e polos reis ingleses», señaló durante su intervención.
FERIA-EXPOSICI?N Cientos de coches y motos clásicos tomaron la localidad
Alrededor de 200 vehículos antiguos (más de 140 coches y 50 motos inscritos) participaron ayer en la II Feira do Automóbil Antigo de Pontecesures, organizada por la Asociación Cultural Mirándolle Os Dentes. Las estrellas del evento fueron algunos automóviles de los años 20 como un Citroën C-3, de 1925, propiedad del jefe de bomberos de Santiago, Cesáreo Rey, que también expuso por primera vez fuera de la capital gallega un coche de bomberos de 1912. También destacaron un Chevrolet Dobe Phanton Six y un Chrysler 72, ambos de 1928. Precisamente, el propietario de este último, Domingo López, de Santiago, llevó el premio al participante más veterano, y el más lejano fue para José Ramón Villanueva, de Madrid. Entre las motos destacó una BMW R-75 de la II Guerra Mundial. Previamente, el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán; el delegado de Medio Rural, Gonzalo Constenla, y la alcaldesa de Pontecesures, María Isabel Castro, homenajearon a los pioneros de esta feria y descubrieron sobre un pedestal, una réplica del construido en 1925, el primer vehículo que circuló a gasolina por Galicia, un Renault Freder, PO-02, cedido para la ocasión por la familia Pazó-Olmedo de Pontevedra .
EL CORREO GALLEGO, 07/04/08