Los gallegos realizaron a lo largo del 2022 un total de 106.339 donaciones de sangre, una cifra que sitúa la tasa en 40 por mil habitantes y año, dentro de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El número de extracciones subió ligeramente respecto al 2021 (106.287), pero las diferencias son significativas por municipios.
Padrón vuelve a ser el ayuntamiento gallego excluyendo las siete ciudades con la tasa más alta (93 donaciones por mil habitantes), lo que duplica la media gallega. En la provincia de Lugo el concello con mayor tasa de extracciones es Meira (54 por mil), en Ourense A Pobra de Trives (67 por mil) y en Pontevedra el municipio de Pontecesures (70 por mil habitantes).
Es el segundo condenado en la provincia a esta pena tras el autor del crimen de las dos menores de Moraña
La sección segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha condenado, de acuerdo con el veredicto del Tribunal del Jurado, a prisión permanente revisable al hombre que asesinó a tiros a su exmujer y a la madre y a la hermana de esta en septiembre de 2019 en el municipio de Valga. Los miembros del jurado, tal y como consta en la sentencia, consideraron probado que las víctimas no tuvieron ninguna posibilidad de huir ni de defenderse. En concreto, la Audiencia Provincial le ha impuesto, por el asesinato de su expareja, la pena de 24 años y medio de cárcel; por el asesinato de la madre de su exesposa, 23 años y medio de prisión; y, por el de su excuñada, prisión permanente revisable (por haber sido previamente condenado por dos asesinatos, tal y como establece el artículo 140.2 del Código Penal).
La Audiencia ha tenido en cuenta, en los tres delitos, la agravante de haberlos cometido por discriminación por razón de género y la atenuante de colaboración. Además, como autor de dos delitos de lesiones psíquicas sobre sus hijos, lo ha condenado a nueve años de prisión, y, como autor de un delito de tenencia ilícita de armas, a dos años de cárcel. También le ha impuesto la prohibición de residir en el término municipal de Valga durante 32 años y la privación de la patria potestad sobre sus hijos.
Se trata de la segunda ocasión en la que la Audiencia de Pontevedra condena a un acusado a una pena de prisión permanente revisable después de que se dictase esta misma pena contra David Oubel Renedo, autor del asesinato de sus dos niñas.
Despois de solicitarse por varios colectivos infórmase que a partir do vindeiro 28 de marzo recuperamos máis servizos ferroviarios que foron eliminados coa pandemia.
As novidades son ás seguintes:
O tren que sae de Pontecesures para Santiago ás 8,04 horas que agora só circula en días laborais tamén circulará os sábados e os domingos.
De Pontecesures dirección Vilagarcía sairán novos trens ás 11:20, 18:20 e 22:20 horas (este último continúa para Pontevedra e Vigo os outros dous rematan o percorrido en Vilagarcía). Sairán de Santiago ás 11.00; 18:00 e 22:00 horas.
De Pontecesures dirección Santiago sairán novos trens ás 12:16 e 20,52 horas. Sairán de Vilagarcía ás 12:00 e 20:35 horas.
Estamos ante unha boa nova. Tan só salientar que todavía non se pon en servizo un tren que saía de Vilagarcía ás 15:26 horas con dirección Santiago e paraba en Pontecesures sobre ás 15:40 horas. A ver se o poñen de novo en servizo.
Para concluir lamentar que os dous trens «curtos» Vilagarcía/Santiago e viceversa recuperados siguen sen parar en Catoira. Inexplicable.
Abet, abandonando la Audiencia de Pontevedra esta semana tras finalizar una vista.
Las cantidades que las acusaciones solicitan en concepto de indemnización para los familiares de las tres mujeres tiroteadas superan el millón de euros
Es difícil imaginar algo que pueda reparar el daño causado a los dos niños que contemplaron las muertes. O aliviar siquiera un ápice la pérdida que comparten con su abuelo, privado de su esposa y de sus dos hijas por los disparos que José Luis Abet descerrajó sobre las tres mujeres aquella mañana del 16 de septiembre del 2019 en Carracido, la aldea de Valga en la que vivían. Pero el mundo de a pie, el que despierta con el sol cada mañana, debe buscar alguna equivalencia con la que calibrar las realidades que se le presentan, por inconcebibles que resulten. En el caso del triple crimen que esta semana le ha valido a su autor un veredicto de culpabilidad por asesinato, esa medida es la responsabilidad civil, y su unidad es el dinero. De acuerdo con la petición de las tres acusaciones —pública, particular y popular— personadas en este proceso, más de un millón de euros que, sin embargo, difícilmente podrán percibir los familiares de las víctimas.
La razón es tan cruda como sencilla. A la espera de que la Audiencia Provincial de Pontevedra dicte su sentencia, basada en el veredicto de culpabilidad que el jurado leyó el martes, los abogados de las partes consultadas coinciden al señalar que José Luis Abet, el hombre que acabó con la vida de su exmujer, su excuñada y la madre de ambas, carece de capacidad para hacer frente a la indemnización a la que se enfrenta. El único patrimonio que se le conoce es una finca ubicada en el municipio coruñés de Ames. Así que, a menos que aflore alguna sorpresa mayúscula, lo más probable es que acabe acogiéndose a la figura de la insolvencia.
Las conclusiones
En el momento de presentar sus conclusiones, la Fiscalía se sumó a las que defendía la fundación Amigos de Galicia, que ejerce la acusación popular. En su opinión, a cada uno de los dos niños, que en el 2019 tenían cuatro y siete años, debe corresponderle medio millón de euros como víctima de un delito de lesiones psíquicas. A su abuelo, una indemnización de trescientos mil euros, y al novio de su tía, otros ochenta mil euros. Sumados, 1.380.000 euros que la acusación particular sitúa incluso por encima. Nada que una finca en Ames pueda cubrir, a poco que las cifras del fallo que emita la Audiencia se aproximen a estas cantidades.
Que Abet no disponía de un gran nivel de vida es algo que se da por hecho desde que él mismo confesó que, a raíz de su separación de Sandra Boquete, su exesposa y primera víctima, había dormido varios meses en su coche, bajo un puente. Pese a ello, está claro que sí pudo echar mano de los recursos necesarios para adquirir de forma ilegal un revólver del calibre 32y dos cajas de munición, probablemente en Portugal. Según las conclusiones a las que llegó la Guardia Civil, el arma con la que asesinó a su exmujer, a su excuñada y a su antigua suegra cuesta alrededor de setecientos euros en el mercado regular. Un precio que fácilmente puede triplicarse en el mercado negro para un hombre que, además, carecía de licencia.
El arma y las balas no constituyen el único dispendio que Abet pudo permitirse a la hora de perjudicar a la madre de sus dos hijos y a su entorno directo. Meses antes de los asesinatos, su autor contrató a Kandioura Cisee, un ciudadano senegalés que ofertaba desde Pontevedra sus servicios como brujo africano. Al principio, Abet se limitó a invocar el mal de ojo, pero acabó encargando un maleficio que causase la muerte a los miembros de su familia política. Ante la envergadura del asunto, el mago le pidió dinero con el que comprar un camello que debía ser sacrificado. Su cliente pagó. Aunque el sumario no lo concreta, aquello pudo costarle diez mil euros.
Abet, abandonando la Audiencia de Pontevedra tras la finalización de una vista esta semana.
La Fiscalía solicita retomar la vista tras el fin de semana para adaptar su informe definitivo a la modificación planteada por la abogada del único acusado
La quinta jornada del juicio del triple crimen de Valga tendría que haber finalizado este viernes con la entrega de los informes definitivos de las partes -con o sin modificaciones- y el trámite de dar la opción al acusado de hablar antes de la deliberación del jurado popular. Pero el guion preestablecido no se cumplió por la modificación planteada por la defensa del único acusado, José Luis Abet. Su abogada solicitó añadir a sus conclusiones el atenuante analógico de confesión tardía, por lo que la Fiscalía solicitó suspender la vista hasta el lunes para actualizar su escrito de conclusiones atendiendo a este cambio de última hora.
El resto de partes personadas, a excepción de la Xunta, también modificó sus escritos, pero sin que alterase los hechos ya plasmados en sus escritos iniciales. Tampoco la pena: todas las partes coinciden al demandar la prisión permanente revisable. Entre las modificaciones aportadas este jueves, la acusación popular reiteró que se considere el agravante de género, y la Fiscalía se sumó esta mañana.
El juicio se retomará el lunes a las 10.00 horas, en lo que supondrá la sexta jornada, con la exposición de las conclusiones de la Fiscalía y los abogados. Luego, Abet tendrá la oportunidad de romper su silencio, ya que no quiso declarar en el juicio sobre lo ocurrido la mañana del 16 de septiembre del 2019, cuando asesinó a su exmujer, Sandra Boquete (39 años), su hermana Alba (27) y la madre de ambas, María Elena Jamardo (58). Tal vez Abet, llegado el momento, decida pedir perdón por primera vez desde el día de autos.
Al margen de la postura que adopte el único acusado, lo siguiente será entregar el objeto del veredicto a los integrantes del jurado popular para que deliberen, por lo que su resolución podría conocerse el martes, de no surgir discrepancias de criterio entre ellos y argumentar sus conclusiones correctamente para ser validado por la magistrada que preside este tribunal en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra.
Jose Luis Abet asesino confeso del triple crimen de Valga entra a la Audiencia Provincial el segundo día de juicio.
El único acusado se acogió a su derecho a no declarar; el chamán africano al que el procesado pagó por echar un maleficio a su exfamilia política, y al que confesó el asesinato, no se presentó en la Audiencia de Pontevedra y está en paradero desconocido
José Luis Abet regresó la mañana de este martes a la Audiencia Provincial de Pontevedra para comparecer en la primera vista del juicio iniciado el lunes por el triple crimen de Valga. Tras exponer la Fiscalía y las acusaciones particular, popular y pública las cuestiones previas, llegó el turno de tomarle declaración en calidad de único acusado. Abet guardó silencio y se acogió a su derecho a no declarar, despejando las dudas que existían de si respondería al menos a las preguntas de su abogada o de la Fiscalía. Silencio absoluto, tal vez consciente de que ya confesara la autoría del triple asesinato a quemarropa pocas horas después de cometerse el 16 de septiembre del 2019.
Sí hablaron los 21 testigos que comparecieron hoy martes, repartidos en turnos de mañana y tarde. Antes de comer, hablaron nueve de los once citados, que tenían que haber declarado ayer, pero por el retraso imprevisto en esa jornada, lo hicieron este martes. Los nueve ratificaron sus declaraciones iniciales ante la Guardia Civil, que sitúan a Abet no solo cometiendo el triple crimen contra su exmujer, excuñada y exsuegra, también evidenciando premeditación por tener la pistola desde varias semanas antes de apretar el gatillo.
Dos de los testigos citados no comparecieron: uno por defunción, y el otro es un ciudadano de África que en el momento del asesinato vivía en Pontevedra y ofrecía sus servicios de brujo para vaticinar el futuro o echar maleficios a demanda del mejor postor. Abet, antes del crimen, recurrió a él para que echara un maleficio a varios integrantes de su exfamilia política. Pagó una importante cantidad de dinero, algunas fuentes la cifran por encima de 10.000 euros, pero sin resultado alguno.
Una de las confesiones grabadas en audio
Por eso, tras cometerse el crimen, Abet le envió una nota de audio por WhatsApp con el siguiente contenido: «Ya se acabó, amigo, ya maté a las tres, ja, ja. Ya están las tres para enterrar. Ahora ves que no hace falta camello. Las maté sin camello, pues ya están las tres muertas: la madre, ella y la hermana. Ahora voy a pasar el resto de mi vida en el calabozo. Lo que Dios quiera». Este ciudadano nacido en África desapareció de Pontevedra poco después de cometerse el triple crimen de Valga, y este martes no compareció en el juicio sin que fuera posible localizarlo.
La vista a puerta cerrada con jurado popular en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra se suspendió a las 15.00 horas para retomarla después de comer. Fue el turno de agentes de la Guardia Civil que participaron en la investigación. Se citó a 17, y declararon 12, tras descartarse a cinco porque reiterarían lo dicho por compañeros. Sus testimonios sirvieron para ratificar los informes oficiales que cimentan la causa judicial. La defensa de Abet encaminó sus preguntas a buscar defectos de forma procesal en su trabajo con el objetivo de declarar nula causa, que no implica demostrar la inocencia de Abet. Se preguntó, por ejemplo, sobre cuestiones tan básicas como si al ser detenido, los agentes leyeron sus derechos al autor confeso o por qué no se hizo un informe de imputabilidad.
Otras preguntas de la defensa buscaron dejar constancia de la colaboración mostrada por Abet en las horas posteriores a cometerse el triple asesinato. Se recordó que Abet desveló que había tirado la pistola en el río Tambre, a la altura de Ponte Maceira, para hacerla desaparecer, y que por eso fue posible recuperarla. También se recordó que Abet, ya en casa de su madre, llamó a la Guardia Civil para confesar el triple asesinato y solicitar que fueran a detenerlo. Poner de manifiesto los pasos dados por Abet tras el triple asesinato estaría dirigido a buscar una pena que recoja los delitos de tres homicidios y tenencia ilícita de armas, pero esquivando la condena de prisión permanente revisable.
En lo que Abet no colaboró, y también se constató hoy en el juicio, es en detallar dónde y cómo compró la pistola utilizada para matar a su exmujer, excuñada y exsuegra. Tampoco se reveló si alguien le ayudó a adquirirla en el mercado negro, ya sea en España o Portugal, país en el que se cree que pudo pagar por ella.
Poco después de las 18.00 horas, la vista se suspendió para un receso. Tras reanudarla, declararon los restantes agentes de la Guardia Civil convocados. Sus testimonios se sucedieron de forma rápida, finalizando la jornada a las 19.45 horas. Mañana miércoles, se retomará la actividad a las 10.00 horas, solo en horario de mañana. El cronograma prevé la declaración de 10 familiares de las tres víctimas mortales: Sandra Boquete (39 años), su hermana Alba (27) y la madre de ambas, María Elena Jamardo (58). También están citados tres agentes más de la Guardia Civil. El hijo mayor del acusado y de Sandra Boquete no prestará declaración tras acordarse la reproducción en sala de la prueba videográfica que recoge la exploración del menor realizada tras el trágico suceso.