En
la iglesia de San Xulián de Pontecesures, donde se ha oficiado el
funeral, nadie daba crédito al baño de sangre que el Domingo de
Resurrección truncó la vida de unos jóvenes muy conocidos y queridos en
la zona, con residencia en este pueblo de la provincia de Pontevedra y
que tenían un sinfín de sueños para su futuro.
La
capilla ardiente se ha instalado en el tanatorio de la vecina localidad
de Padrón, donde María, de 32 años, trabajaba en la empresa de sus
padres especializada en equipación de trabajo, y, desde allí, sus
cuerpos han sido trasladados para el funeral.
La
emotiva ceremonia ha estado oficiada por el arzobispo de Santiago de
Compostela, Julián Barrio, que ha confesado que, nada más enterarse de
la tragedia, había rezado por ellos, pero también por sus familiares,
sabedor, como ha confesado, de que nadie está preparado para afrontar el
final de aquellos a los que quiere.
Mucho
menos si la causa es un ataque terrorista, “siempre injusto e
indiscriminado, perverso y nunca justificable”, como el acontecido en
esa isla, la lágrima de la India, que se ha atribuido el Estado Islámico
y que ha dejado 253 muertos y más de 500 heridos.
“Esta
comunidad parroquial se ha estremecido”, ha subrayado el arzobispo, y
ha indicado que, con lo ocurrido, “todos hemos perdido” a unos seres
humanos que formaban parte de la convivencia diaria, de la cercanía y de
los afectos.
Ha ahondado el
arzobispo en que la muerte, un enigma de la condición humana, llega
siempre inesperadamente y en el caso concreto de María y Alberto “les
han arrebatado sus vidas cuando tantos proyectos y tantas esperanzas
llenaban su horizonte diario”.
Visiblemente
afectado, ha hecho hincapié en que es difícil entenderlo, -“sé que
estáis viviendo un dolor intenso”-; no en vano, ha admitido que las
experiencias del mal pueden “estremecer la fe” y llegar a ser para ella
una tentación, en referencia a no creer, pero ha pedido y rogado no caer
en eso. “Todo parece un mal sueño del que uno espera salir
en cualquier amanecer”, ha vuelto a reconocer, porque María y Alberto
llevan consigo parte de muchas otras vidas, que han quedado partidas a
la mitad.
Han asistido al funeral el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo;
su número dos, Alfonso Rueda; la cabeza de lista al Congreso del PP por
Pontevedra, Ana Pastor; el delegado del Gobierno en Galicia, Javier
Losada; as subdelegadas de Pontevedra (Maica Larriba) y A Coruña (Pilar
López-Riobóo); el presidende del Parlamento, Miguel Santalices; el
secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, y los alcaldes de
Pontecesures, Juan Manuel Vidal; Rianxo, Adolfo Muíños; y Valga, José
María Bello.
Alberto, de 31
años, natural de Rianxo (A Coruña), trabajaba en la filial de Profand en
la India, y su novia, María, lo hacía en la empresa de sus padres.
Ambos disfrutaban de unas vacaciones juntos en Semana Santa.
María y Alberto se encontraban desayunando cuando se produjo el asalto al hotel donde se alojaban. Poco antes habían subido fotografías de una aventura que les estaba encantando.
Souto Cordo ya ha reclamado y espera que se pueda subsanar el desaguisado.
El pasado lunes Ángel Souto confirmaba a La Voz que, una vez más,
Terra Galega iba a presentar una candidatura para las elecciones
municipales que se celebrarán el 26 de mayo. La sorpresa saltó cuando el
Boletín Oficial de la Provincia publicó las listas y en las de la
localidad cesureña figuraban las de Independientes de Pontecesures, PP,
BNG y PSOE pero no la de TeGa. ¿Qué había pasado? Pues que un error a la
hora de realizar la inscripción había traslado la aventura de Souto
Cordo de intentar arrebatar la alcaldía a Vidal Seage, con quien ahora
gobierna en coalición, a hacerlo nada menos que a Miguel Anxo Fernández
Lores, puesto que la suya es una de las diez listas que figuran en la
capital de la provincia.
Tras el sofoco inicial, Ángel Souto y su
equipo se pusieron manos a la obra para intentar reparar el
desaguisado. Elevaron una reclamación a la junta electoral para
solicitar la rectificación y que Terra Galega regrese a las tierras
cesureñas. En la formación cesureña están convencidos de que todo se
subsanará y que lo sucedido quedará en una simple anécdota. TG fue la
tercera fuerza más votada en los comicios que se celebraron hace cuatro
años y ha contado con dos concejales en el mandato que está a punto de
concluir.
La de Terra Galega es una de las 50 candidaturas que se
han registrado en los concellos de O Salnés y del Baixo Ulla. El PP y el
PSOE tendrán representación en todos ellos y el BNG en diez de los once
puesto que, de nuevo, no ha conseguido formar una candidatura en Valga.
Allí, justamente, ha surgido una de las sorpresas puesto que
socialistas y populares se las tendrán que ver esta vez con una marea,
la de Valga Viva que lidera Manuel Castiñeiras.
También habrá novedades en Vilagarcía, con la presencia de Vox y Ciudadanos y en Cambados, donde la formación naranja también se estrena en los próximos comicios, con Sergio Abal, hermano del concejal José Ramón Abal a la cabeza.
De izquierda a derecha y de arriba a abajo, los candidatos arousanos a estas elecciones generales Jorge María, Diego Bravo, Gaspar González Somoza, David Torres, Modesto Pose, Daniel Chenlo, Elena Suárez y María Xosé Cacabelos, esta semana en Vilagarcía.
El paro, la
emigración de los jóvenes, los problemas de las cuotas pesqueras,
coeficientes reductores y enfermedades profesionales de trabajadores del
mar, el saneamiento de la ría de Arousa, la transferencia de la AP-9 a
Galicia o que Vilagarcía tenga una parada del AVE constituyen algunas de
las prioridades de los candidatos arousanos que se presentan a las
elecciones generales. Doce políticos de la comarca de siete partidos
diferentes (PP, PSOE, BNG, En Marea, En Común-Unidas Podemos, Ciudadanos
y Vox) integran las listas, entre titulares y suplentes. FARO ha
reunido a la mayoría de ellos en el ecuador de la campaña.
La campaña electoral del 28-A llegó anoche a su ecuador y FARO ha
reunido a los políticos arousanos que aspiran a hacerse un hueco en
Madrid, ya sea en el Congreso o en el Senado, para que la comarca tenga
voz propia en las instituciones en las que se toman las decisiones que
nos afectan a todos. Ocho candidatos de distinto color político
reflexionan sobre lo que se juega Arousa en estos comicios y sobre los principales problemas que se podrían solventar desde las Cortes.
| Modesto Pose (PSOE). El
cabeza de lista al Senado por Pontevedra prioriza para Arousa la
Autovía A-57, “que comunica Vilagarcía con la salida de Vigo y que
estuvo en un cajón en los gobiernos del PP”. También se compromete a
defender en la Cámara alta mejoras marítima y de seguridad ciudadana.
Además, “Arousa, como toda España y toda Galicia, tiene pensionistas que
necesitan que sus pensiones sean dignas, tiene jóvenes que necesitan un
gobierno que piense en ellos y trabajadores que necesitan ver
defendidos sus derechos en una reforma laboral racional”. Pose se
sentiría “satisfecho” si se consiguiese “dar un impulso económico
estable que redujese el paro en la comarca”. Considera urgente “un liderazgo económico inversor que dinamice la iniciativa privada”.
| Elena Suárez (PP). La
número 3 del PP al Congreso ensalza a su partido como el único “que
defiende los intereses de los arousanos” y arremete contra Pedro Sánchez
por “minusvalorar Galicia
al ser la única de las comunidades autónomas que no quiso pisar siendo
presidente y a la que ha castigado con 200 millones de euros menos de
inversión”. “Cuatro años más de socialistas y sus socios serían muy
dañinos para esta comarca”, espeta Suárez.
Los
principales problemas de Arousa que pueden encontrar solución en Madrid
son, en opinión de la candidata conservadora, que Vilagarcía tenga
parada del AVE “aunque el PSOE esté obsesionado en borrarnos de un
plumazo”, desbloquear la segunda fase del paseo de la playa de A Compostela,
la regeneración de los arenales de bandera azul y hacer realidad el
nuevo cuartel de la Guardia Civil “en contra de las previsiones de
Sánchez, que lo mantiene en el fondo de su cajón”, concluye la aspirante
a diputada.
| Daniel Chenlo (PSOE). El número 3 al Senado por el PSOE
está convencido de que “nos jugamos la posibilidad de que en los
próximos cuatro años los falsos ajustes presupuestarios de la derecha
dejen paso a las necesidades de las personas como eje de la acción
política”. Como principales problemas que se pueden resolver desde
Madrid cita el paro juvenil, la ría y “en especial el río Ulla y sus
posibilidades de pesca y promoción turística, que van a tener un aliado
en el gobierno socialista con la ayuda de la Unión Europea”, expone el
pontecesureño.
| Jorge María López (PSOE). Este
vilanovés número 4 del Partido Socialista al Congreso, tiene claro que
están en juego “las políticas para las personas, tales como tener
garantizado el incremento de las pensiones,
darles más posibilidades y más medios a nuestros jóvenes,
extraordinariamente preparados, para que puedan desarrollar sus
capacidades y formar su proyecto de vida, o que no se produzca una
involución en temas de igualdad entre hombres y mujeres”. En materia
medioambiental, aboga por lograr un desarrollo sostenible para la ría de
Arousa “y dejarle a nuestros hijos y nietos, sino un mundo mejor, al
menos igual que el que heredamos”.
| Gaspar Somoza (En Marea). El
saneamiento de la ría de Arousa, la recuperación de sus sectores
productivos, la mejora de sus infraestructuras, la transferencia de
competencias, la gestión de Costas, las pensiones, los emigrantes
retornados y unos “presupuestos justos para que la gente no emigre y
tenga aquí un futuro” constituyen las principales preocupaciones del
número 5 de En Marea.
“Básicamente lo que esperamos de Madrid son unos presupuestos justos
para poder desarrollar la comarca y poder vivir donde realmente queremos
sin tener que emigrar”, concluye el vilagarciano.
| María Xosé Cacabelos (BNG). El
principal objetivo de la número 6 del BNG al Congreso es “tener más
capacidad de decisión sobre nuestros problemas”.Por ejemplo en el mar,
un sector “fundamental en la economía de la comarca y es Madrid quien
establece los criterios de reparto de cuotas, tipos de cotización y
coeficientes reductores”. Cacabelos también menciona la Ley de Costas,
“que condiciona la ordenación de nuestro litoral”, y Salvamento
Marítimo, una competencia del Estado: “Deciden y dirigen desde Madrid
algo tan fundamental como es la seguridad y protección de la gente del
mar”. Ocurre lo mismo con los puertos de interés general, como el de
Vilagarcía, “competencia del Estado y por tanto es quien determina el
papel que juega y las prioridades”.
En
sanidad y educación -continúa la candidata nacionalista-, también el
Gobierno central establece las tasas de reposición, decide el número y
ubicación de los juzgados y tiene competencia en infraestructuras como
la AP-9. “Si el BNG está en el Congreso, Galicia está”, finaliza.
| David Torres (BNG). Suplente
en la lista que lleva el BNG al Congreso, este grovense defiende la
transferencia de la AP-9 a Galicia y dejar libre de peaje el tramo
Curro-Pontevedra.
“No pueden seguir sangrando nuestras nóminas con peajes por ir a
trabajar. Y sin peajes en este tramo, nuestras empresas serían más
competitivas al reducir costes de transporte, costes que también se
reducirían con una tarifa eléctrica gallega”. David Torres también hace
alusión a la tasa de reposición de los empleados públicos, que depende
de Madrid, y a las decisiones sobre el sector del mar, cuyas normativas
“deberían diferenciar aguas del interior de la ría con mar abierto”.
Apuesta por conseguir “un reparto justo de cuotas y Tacs para nuestra
flota” y por un tren de cercanías “acorde a las necesidades de nuestros
vecinos”.
| Diego Bravo (Vox). Es el suplente segundo de la cabeza de lista de Vox al Senado por Pontevedra, María de los Ángeles Romero. Diego Bravo considera que Arousa se juega en estos comicios “que su voz y sus problemas reales sean escuchados y solucionados en el Congreso y en el Senado”. Este joven vecino de Vilagarcía asegura haberse reunido con diversas asociaciones y colectivos para conocer de primera mano sus demandas y se compromete a seguir escuchándolos después de los comicios.
El PP, IP, TeGa, BNG y PSOE concurrirán a los comicios.
Todo apunta a que los vecinos de Pontecesures
tendrán que elegir, el 26 de mayo, entre cinco aspirantes a la
alcaldía. Aunque durante semanas circularon los rumores sobre la posible
participación en la carrera electoral de una Marea local, parece que
esa vía se ha cerrado. Así las cosas, a estas alturas están claras cinco
alternativas de voto.
La primera, la del actual alcalde, Juan
Vidal Seage, que repetirá al frente del cartel del Partido Popular. Tras
varios años de gobierno conjunto con Terra Galega e Independientes de
Pontecesures, parecía que podría producirse una reunificación del voto
de derechas bajo las siglas del partido de la gaviota. Pero esa
alternativa está descartada: no parece que el PP haya mostrado demasiado
interés por seducir a quienes han sido sus socios de gobierno.
Así que IP, con Maribel Castro a la cabeza,
volverá a concurrir a los comicios. Así lo confirma la número uno de
esta formación, quien no quiso desvelar de momento las bazas de su
candidatura. También Ángel Souto Cordo, cabeza visible de TeGa,
tiene previsto presentarse a los comicios de mayo. En este caso, Souto
fue claro: no ha habido ningún contacto ni con el PP ni con ninguna otra
fuerza, por lo que Terra Galega trazará su camino sola. En estos
momentos «se puede dar por hecho que nos vamos a presentar», a falta de
completar algunos puestos en la lista electoral que se debe formalizar.
En Pontecesures, es la derecha la que está fragmentada. El voto de izquierda, sin embargo, se repartirá únicamente entre las dos fuerzas que concurren a la cita electoral. La primera de ellas, el BNG, con la exalcaldesa Cecilia Tarela a los mandos. Es la segunda vez que esta mujer, con una amplia experiencia en la vida municipal, encabeza la propuesta nacionalista. En los últimos comicios, de hecho, consiguió hacerse con el bastón de mando hasta que fue desbancada por una moción de censura. El Partido Socialista ha vuelto a confiar el liderazgo en Pontecesures a Roque Araújo, que también ocupó el cartel electoral en los últimos comicios.
Valga aprobó una moción del gobierno local y el alcalde de Pontecesures enviará escritos a la subdelegación del Gobierno.
El lunes fue una tarde completa para la corporación de Valga, que
celebró tres plenos seguidos. En el ordinario, se aprobó una moción del
equipo de Bello Maneiro por la cual se insta al Ministerio del Interior a
que se proceda a «aumentar o número de efectivos no
cuartel da Garda Civil de Valga, e a dotar ao mesmo dos medios axeitados
para o desenvolvemento do seu labor». En ese sentido, el alcalde recordó que a las instalaciones del Instituto Armado solo acuden un sargento y un agente. «A presenza é so testemuñal e non se está a facer unha política disuasoria no noso termo municipal», donde muchos vecinos «optan
por non denunciar os roubos que sofren por non ter onde facelo, xa que
teñen que desplazarse ata Caldas, Vilagarcía ou Cambados».
La situación descrita por el alcalde de Valga no
le resulta ajena a su homólogo de Pontecesures. Juan Manuel Vidal Seage
explicaba ayer que también él tiene previsto enviar cartas a todas las
autoridades competentes para expresar su malestar por el recorte de
efectivos en el cuartel. «Neste asunto dos corpos de
seguridade deberían marcarse unhas isocronas como xa se fai no ámbito
das emerxencias, porque non son razoables os tempos que hai que agardar
pola patrulla. Pero claro, se cando chamas están na Illa, en chegar ata
aquí van tardar si ou si», explica el regidor cesureño.
Por su parte, el PSOE de Valga quiso aprovechar la moción presentada por el PP para poner sobre la mesa la posibilidad de crear un servicio municipal de policía local en este ayuntamiento, en el que ahora solo existe la figura de un vigilante. Según explicó María Ferreirós, la normativa permite, a un Concello como Valga, disponer de un servicio de estas características. Sería, obviamente, un cuerpo de policía local pequeño, pero que permitiría aumentar la presencia en la calle, realizando así una labor disuasoria, al tiempo que facilitaría agilizar otras muchas cuestiones, dado que «as súas funcións non se limitan a actuar en roubos». En todo caso, la propuesta hecha por el PSOE no obtuvo el menor eco en el gobierno local, que la ignoró.